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José Antonio Rodríguez, quien fue ministro de Cultura en República Dominicana, admitió "el valor agregado" que supondría ese reconocimiento, al "ser la única institución en el mundo llamada a acreditar esas expresiones culturales y a ponerle el apellido dominicano", como ya ocurrió con el merengue en 2016.
"No solo saber que ha sido reconocido sino que eso bien puede sacarle un hermosísimo y productivo provecho a tener ese valor agregado que se llama la Unesco", explicó el embajador dominicano.
Rodríguez, que es además un reconocido intérprete y compositor musical, recordó que "hay más de cuarenta festivales de bachata en países en todo el mundo", entre los que citó algunos tan ajenos a la cultura latina como Japón, China, Corea del Sur o la India, fenómeno que calificó como "alucinante".
República Dominicana presentó el pasado 4 de abril ante la Unesco el expediente de candidatura para que la "bachata dominicana" sea añadida a la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad.
Ahora la candidatura está siendo analizada por los técnicos, que decidirán si el país caribeño tiene que hacer alguna puntualización.
Para ello, están en contacto con los artistas, con el Ministerio de Cultura, encargado de presentar el expediente, y con la delegación dominicana en la Unesco.
El embajador dominicano ante la Unesco asiste hoy en Madrid al encuentro que convocó el canciller de su país, Miguel Vargas, con los jefes de misión en Europa, Asia, Oriente medio y África.
En esta reunión, el canciller, que llegó a Madrid procedente de Roma, discutirá "los lineamientos de la política exterior dominicana con los embajadores" de su país acreditados en esas zonas.
Como embajador ante la Unesco, Rodríguez señaló la importancia de estos encuentros, que permiten el conocimiento de esas nuevas políticas en el exterior y favorecen la integración entre los distintos representantes diplomáticos.
Desde la delegación diplomática que dirige en la Unesco, Rodríguez expresó su satisfacción por el acuerdo alcanzado con el español Instituto Cervantes en la capital francesa, que albergará encuentros culturales, como cine o presentaciones de artistas.
Esta labor, que realiza en coordinación con la embajada de República Dominicana en París, va dirigida a los 5.000 dominicanos que viven en Francia, para trabajar de manera más eficiente.