Bruno Mars calentó la fría noche bogotana
El estadio El Campín, en Bogotá, vibró con la presentación del cantante estadounidense, quien interpretó éxitos como “Uptown Funk”, “24K”, “Locked Out Of Heaven”, “Treasure”, “Versace ?on ?the ?floor”, entre otras.
Lucety Carreño Rojas / @LucetyC
Muchos de los asistentes llegaron desde el día anterior al estadio El Campín, de Bogotá, para no perderse el primer show del cantante en el país. La noche comenzó con la presentación del grupo DNCE, que cuenta con la participación de Joe Jonas, reconocido por ser parte de la extinta agrupación Jonas Brothers.
Después de la presentación de DNCE, el escenario se oscureció, los gritos de los cientos de asistentes anunciaban que el momento de ver a Bruno Mars en tarima había llegado. Sin embargo, él se hizo esperar, en una o dos ocasiones ilusionó a sus fans, pero aún no era el momento de aparecer. Lo único que se veía en las pantallas era una corona.
Un enérgico "Colombia" se escuchó de la voz del productor, de 32 años, el lugar se estremeció y vibró a causa de los gritos, aplausos y suspiros. A las 8:45 p.m. el telón blanco cayó, y los espectadores enloquecieron al ver tras bambalinas al cantante hawaiano en compañía de su banda.
La primera canción que interpretó el artista vestido de beisbolera roja con la palabra Holligans, bermuda negra y tenis Nike blancos y su sello personal, sus habituales gorras Snapbacks con el nombre de su tour en números romanos, fue Finesse. En medio del furor, la música y el espectáculo, Mars les dijo "parceros", con esa palabra dio el inicio a una gran conexión con su público que duraría una hora y media.
(Lea aquí: Bruno Mars, la grandeza de la constancia).
El compositor saludó a sus seguidores con un "Hola, Colombia". Luego cantó Treasure, tema de su segundo álbum, Unorthodox Jukebox. Entre gritos que no cesaban y sensuales bailes llegó la canción Perm. Para enriquecer el show, el artista durante su interpretación de Calling all my lovelies interactuó con el público y sacó un celular de utilería imitando el video original de la canción y miles de sonrisas se proyectaron entre el público cuando dijo en español: "Te quiero mucho, mi chica".
Deleitó a sus seguidores con sus movimientos en Chunky, que hicieron suspirar a más de uno. La canción que siguió en el repertorio fue That's what I like y cerró el ciclo del nuevo álbum con Versace on the floor. En ese tema los asistentes iluminaron el escenario en un mágico momento con las linternas de sus celulares que tenían un particular accesorio morado característico de la nueva etapa musical de Bruno Mars y su álbum 24K Magic y el motivo por el que visitó Colombia.
Marry you, uno de sus primeros éxitos no podía faltar en una noche en la que la luna llena, las estrellas y el show de luces hacían de la velada algo especial. En los intervalos el artista expresaba su emoción por estar en Colombia por primera vez y agradecía la acogida de los capitalinos, quienes disfrutaron de su poder, energía y talento que le permiten pasar de un soul a un funk en cuestión de minutos.
En Runaway baby el estadio se quedó en silencio mientras Mars bailaba. Sus coreografías y perfecta relación con su banda sobresalieron. En un jocoso momento le preguntó a la gente que si no lo aplaudirían y lejos del micrófono dijo: “What the fuck, baby”. En un momento, dejaron de sonar los instrumentos, sólo se escuchaba uno que otro suspiro, las cámaras enfocaron al músico y lo proyectaron en las pantallas gigantes. Todos miraban cómo se movía, con un estilo único y característico. When I was your man volvió a llenar de furor a las personas, quienes la cantaron de principio a fin. El cantante le dio protagonismo a uno de los integrantes de su banda, quien interpretó un solo de piano.
Para darse el único respiro de la noche, el también productor, se cambió de atuendo para regresar con la última parte de su presentación. Interpretó Grenade, canción de su álbum debut, Doo-Wops & Hooligans, de 2010. Su canción más polémica y sensual no podía faltar, Locked out of heaven. En la fría noche bogotana sus pasos y show calentaron a los miles de seguidores. El artista se despidió con Just the way you are y más de un seguidor pensó que la cantaría en español. En ese tema se le escaparon unas lágrimas de felicidad al músico, de 32 años, por ver a tanta gente coreando sus creaciones.
Cerrando su concierto, presentó a cada integrante de The Hooligans, su banda, y se despidió con un "gracias". Las luces se apagaron, pero nadie queria irse. Dieron lo que les quedaba de voz para gritar “¡otra, otra, Bruno!”. Minutos después, que para los fans fueron una eternidad, volvió a aparecer Bruno Mars para interpretar la infaltable Uptown funk, éxito que hizo en colaboración con Mark Ronson, canción que finalizó su show en su primera visita a Colombia. Los juegos pirotécnicos finalizaron con broche de oro una velada en la que los espectadores vieron en vivo a uno de los cantantes más importantes del pop actual y resistieron el frío bogotano.
Muchos de los asistentes llegaron desde el día anterior al estadio El Campín, de Bogotá, para no perderse el primer show del cantante en el país. La noche comenzó con la presentación del grupo DNCE, que cuenta con la participación de Joe Jonas, reconocido por ser parte de la extinta agrupación Jonas Brothers.
Después de la presentación de DNCE, el escenario se oscureció, los gritos de los cientos de asistentes anunciaban que el momento de ver a Bruno Mars en tarima había llegado. Sin embargo, él se hizo esperar, en una o dos ocasiones ilusionó a sus fans, pero aún no era el momento de aparecer. Lo único que se veía en las pantallas era una corona.
Un enérgico "Colombia" se escuchó de la voz del productor, de 32 años, el lugar se estremeció y vibró a causa de los gritos, aplausos y suspiros. A las 8:45 p.m. el telón blanco cayó, y los espectadores enloquecieron al ver tras bambalinas al cantante hawaiano en compañía de su banda.
La primera canción que interpretó el artista vestido de beisbolera roja con la palabra Holligans, bermuda negra y tenis Nike blancos y su sello personal, sus habituales gorras Snapbacks con el nombre de su tour en números romanos, fue Finesse. En medio del furor, la música y el espectáculo, Mars les dijo "parceros", con esa palabra dio el inicio a una gran conexión con su público que duraría una hora y media.
(Lea aquí: Bruno Mars, la grandeza de la constancia).
El compositor saludó a sus seguidores con un "Hola, Colombia". Luego cantó Treasure, tema de su segundo álbum, Unorthodox Jukebox. Entre gritos que no cesaban y sensuales bailes llegó la canción Perm. Para enriquecer el show, el artista durante su interpretación de Calling all my lovelies interactuó con el público y sacó un celular de utilería imitando el video original de la canción y miles de sonrisas se proyectaron entre el público cuando dijo en español: "Te quiero mucho, mi chica".
Deleitó a sus seguidores con sus movimientos en Chunky, que hicieron suspirar a más de uno. La canción que siguió en el repertorio fue That's what I like y cerró el ciclo del nuevo álbum con Versace on the floor. En ese tema los asistentes iluminaron el escenario en un mágico momento con las linternas de sus celulares que tenían un particular accesorio morado característico de la nueva etapa musical de Bruno Mars y su álbum 24K Magic y el motivo por el que visitó Colombia.
Marry you, uno de sus primeros éxitos no podía faltar en una noche en la que la luna llena, las estrellas y el show de luces hacían de la velada algo especial. En los intervalos el artista expresaba su emoción por estar en Colombia por primera vez y agradecía la acogida de los capitalinos, quienes disfrutaron de su poder, energía y talento que le permiten pasar de un soul a un funk en cuestión de minutos.
En Runaway baby el estadio se quedó en silencio mientras Mars bailaba. Sus coreografías y perfecta relación con su banda sobresalieron. En un jocoso momento le preguntó a la gente que si no lo aplaudirían y lejos del micrófono dijo: “What the fuck, baby”. En un momento, dejaron de sonar los instrumentos, sólo se escuchaba uno que otro suspiro, las cámaras enfocaron al músico y lo proyectaron en las pantallas gigantes. Todos miraban cómo se movía, con un estilo único y característico. When I was your man volvió a llenar de furor a las personas, quienes la cantaron de principio a fin. El cantante le dio protagonismo a uno de los integrantes de su banda, quien interpretó un solo de piano.
Para darse el único respiro de la noche, el también productor, se cambió de atuendo para regresar con la última parte de su presentación. Interpretó Grenade, canción de su álbum debut, Doo-Wops & Hooligans, de 2010. Su canción más polémica y sensual no podía faltar, Locked out of heaven. En la fría noche bogotana sus pasos y show calentaron a los miles de seguidores. El artista se despidió con Just the way you are y más de un seguidor pensó que la cantaría en español. En ese tema se le escaparon unas lágrimas de felicidad al músico, de 32 años, por ver a tanta gente coreando sus creaciones.
Cerrando su concierto, presentó a cada integrante de The Hooligans, su banda, y se despidió con un "gracias". Las luces se apagaron, pero nadie queria irse. Dieron lo que les quedaba de voz para gritar “¡otra, otra, Bruno!”. Minutos después, que para los fans fueron una eternidad, volvió a aparecer Bruno Mars para interpretar la infaltable Uptown funk, éxito que hizo en colaboración con Mark Ronson, canción que finalizó su show en su primera visita a Colombia. Los juegos pirotécnicos finalizaron con broche de oro una velada en la que los espectadores vieron en vivo a uno de los cantantes más importantes del pop actual y resistieron el frío bogotano.