Carlos III: una coronación sin la esencia de los artistas británicos
Este sábado 6 de mayo se celebró en el Castillo de Windsor la coronación del Rey Carlos III, un evento que reunió a grandes personalidades. Varios de los artistas más importantes de Reino Unido rechazaron la invitación, y bandas icónicas de rock como los Rolling Stones, Muse e incluso Coldplay brillarán por su ausencia.
Daniela Suárez Zuluaga
Londres vivió este sábado un hecho que había ocurrido por última vez el 2 de junio de 1953, cuando Elizabeth Alexandra Mary fue coronada como Reina de Inglaterra. Los preparativos para la posesión de Carlos III, que ahora toma el lugar de su madre, empezaron hace algunos meses y la lista de invitados al evento es extensa. Desde dirigentes mundiales, hasta miembros de otras monarquías asistieron a la coronación.
Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO
¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar
Londres vivió este sábado un hecho que había ocurrido por última vez el 2 de junio de 1953, cuando Elizabeth Alexandra Mary fue coronada como Reina de Inglaterra. Los preparativos para la posesión de Carlos III, que ahora toma el lugar de su madre, empezaron hace algunos meses y la lista de invitados al evento es extensa. Desde dirigentes mundiales, hasta miembros de otras monarquías asistieron a la coronación.
La ausencia del rock británico y sus grandes figuras en el Concierto de Coronación en el Castillo de Windsor fue tema de conversación en los días previos a la ceremonia. ¿A qué se debe que bandas tan icónicas como los Rolling Stones, The Cure e incluso Coldplay brillen por su ausencia?
El legado de la Reina Isabel II
Hace algunos días la BBC dio a conocer la lista de artistas que cantarán en dicho concierto: Katy Perry, Lionel Ritchie y Andrea Bocelli serán los encargados de abrir el show, y ninguno de ellos es británico. ¿Qué puede influir en la decisión de no querer hacer parte de un evento tan masivo e importante para el Reino Unido?
“Debemos entender que, por un lado, cuando vimos la última coronación eran los años 50, e Isabel fue una reina muy joven, pero aun así hay muchas cosas que se conservan. Tal vez el movimiento mediático alrededor de la monarquía inglesa es el que ha ido evolucionando con la tecnología y demás, y nos da otro tipo de “espectáculo” que espera la gente, no podemos dejar esto de lado, de todas formas la coronación de la Reina no contó con un espectáculo de entretenimiento como lo que esperan los espectadores esta vez”, comenta Héctor Mora, productor y realizador de Radionica – RTVC.
Durante su reinado, se veía a la Reina Isabel con un carisma que le permitió conectar con varios artistas que fueron, y siguen siendo, fundamentales en la historia musical del territorio. Fue el caso de la banda Queen, que en uno de sus cumpleaños fueron captados en cámara tomando té mientras hacían el sonido de “We Will Rock You” con las cucharas chocando los vasos. Eran épocas diferentes, claro, pero ese tipo de acciones hacían que la reina se sintiera más cercana a su pueblo, algo que según las estadísticas se ha ido perdiendo con el tiempo.
Carlos III y el reto de las nuevas generaciones
Según un sondeo de YouGov realizado el 17 de abril, uno de cada cuatro jóvenes de 18 a 24 años (26%) piensa que la monarquía es una cosa buena para Reino Unido, cuando en el conjunto de la población adulta interrogada esa opinión fue compartida por un 53%. El dato de abril contrasta con el de julio de 2019, cuando el 48% de los jóvenes de 18 a 24 años consideraba positivo el aporte de la realeza al país.
“Una de las grandes preocupaciones de la monarquía es generar más entusiasmo entre los jóvenes”, indicó la profesora. “Es muy importante conquistar a esta generación si la monarquía quiere sobrevivir. Y los ataques como estos son muy inoportunos. No sé si será que nos sentimos alejados de la monarquía. Pero me parece que no tenemos mucha interacción con la familia real, así que no veo por qué tendría que sentirme concernida”, comentó Pauline Maclaran, profesora de la universidad Royal Holloway.
Pero ¿cómo conecta esta indiferencia de la juventud con el tema de los artistas británicos más importantes que no asistirán a la coronación? Justamente con esa lejanía que está cada vez más pronunciada y amenaza con el fin de la monarquía, porque aunque la ceremonia esté llena de tradiciones, no llegará a los jóvenes de la misma manera si no tienen a un referente de su generación (como Harry Styles, que rechazó la invitación supuestamente por su apretada agenda) participando activamente en ella.
Si bien la banda de pop británica Take That es uno de los pocos ejemplos de artistas británicos que estarán presentes, es un nombre muy potente en la industria musical. Han vendido más de 17 millones de copias en el mundo e incluso la revista Forbes los reseñó como uno de los grupos más importantes y alcanzaron a estar dentro de los tres primeros. Pero es una agrupación que se fundó en los 90, y sigue estando alejada de la nueva generación.
La ausencia del rock
Según Héctor Mora, este vacío se debe a varios factores. Es importante reconocer que el rock ha ido cambiando progresivamente y que muchos de los artistas y bandas que estaban vigentes en la era de la Reina Isabel ya no están, y algunas figuras actuales del género no están de acuerdo con la imagen del Rey Carlos III, y a nivel de popularidad también hay un cuestionamiento político, pues la corona inglesa no está pasando por su mejor momento. “Se sabe que muchos artistas declinaron la invitación a la coronación, incluidos Adele, Ed Sheeran y Elton John… eso fue un golpe muy fuerte para el mismo protocolo del evento”.
Muchos se preguntan sobre la ausencia de los Rolling Stones luego de que Mick Jagger recibiera el título de Caballero de la Orden del Imperio Británico entregada por el propio Príncipe Carlos en su momento (2003). Son datos que demuestran que no es que al Rey no le guste el rock, sino que la conexión que tenía la Reina Isabel con el género era más fuerte. “Creo que la relación entre el rock y la monarquía no se deterioró, simplemente el género no puede brillar de la forma en la que lo hizo antes”, concluye Mora.