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Está lanzando su álbum número 14 en casi 30 años de carrera… ¿Cómo nació “Cumbiana”?
A lo largo de mi carrera he ido aprendiendo y descubriendo muchísimas cosas, sobre todo ese mundo anfibio que está en el origen de nuestra música, cuando hablamos de toda esa tradición, también estamos hablando de un pueblo americano, está en el origen esa huella que ha quedado de nuestro folclor. Hoy soy más consciente de lo que nos hemos alimentado musicalmente y de ese origen latinoamericano, que por nuestra condición a veces europea empezamos a olvidar. Este no es un disco antropológico ni cultural, sino más bien moderno, que habla de temas que tienen que ver con lo costumbrista, con nuestra biodiversidad, con el amor y el desamor. Es una producción comercial, pero está construida en esos patrones anfibios. Cumbiana es la modernización de los folclores, a los que les sumamos todos estos sonidos nuevos que tiene este disco.
Ha mencionado la cultura anfibia, ¿cuál fue ese encuentro que tuvo con esos sonidos anfibios?
Hay una historia de un país que se llamaba “el país de los Pocabuyes”, y al principio había otro término ligado a ese, que se volvió más familiar para mí por tener familia cienaguera… y los primeros vallenatos que se grabaron eran de las corrientes pocabuyamas. De ese mundo empecé a escuchar sonidos con muchos matices, y ese mundo anfibio está ahí… como samario pasé por esa carretera que va de Barranquilla a Santa Marta, y aunque mi papá nos llevaba porque tenía amigos pescadores, todavía no intuía quiénes eran ellos en toda esta cultura, y que formaban parte de este mundo perdido. Gabo, con Cien años de soledad y todas sus historias, forma parte de este territorio, por eso dije alguna vez que ese libro era como un vallenato largo, así que este mundo a mí me enseñó el vallenato y me empezó a mostrar la genética y la relación de los ríos con ese país que alguna vez habitó las ciénagas. (Lea: "No te vayas", lo nuevo de Carlos Vives)
Este es un disco que hizo entre varios países como Colombia, México, Inglaterra, Canadá… ¿Visitó esos lugares en el proceso creativo?
Sí, esas visitas se fueron dando esporádicamente, me encontré con muchas personas que querían hacer cosas y me contaron muchas historias. Eso para mí es felicidad, encontrarme a alguien y contarle cómo nuestra música los ha influenciado a tal grado que ya hay cosas que son de todos, es sensacional. En este primer volumen estoy con Rubén Blades, Elkin Robinson, Jessi Reyes, entre otros.
Para presentar “Cumbiana” eligió el sencillo “No te vayas”, ¿qué le indicó que esta era la canción apropiada para comenzar a visibilizar el disco?
Porque era la canción más parecida a lo que la gente sabe que hago… es un poco pop moderno, pero inspirado en líneas muy vallenatas con la guacharaca y la caja. Creo que este sencillo abrió muy amablemente este álbum, porque hay sonidos que la gente va a desconocer un poco, pero al final aprendí que uno puede trabajar con nuevas ideas y sonidos, pero el feeling es lo que tiene que prevalecer, porque sin eso no hay nada.
¿Piensa en los bailadores cuando está componiendo?
Soy de la vieja guardia, lo nuestro era bailar de todo: salsa, merengue, vallenato, cumbia, porros… eso no se quita.
En “El hilo” explora el reggae junto a Elkin Robinson y Ziggy Marley, hijo de Bob Marley… ¿Encontró diferencias en la forma de hacer reggae?
Son afines, pero tienen sus diferencias, Elkin tiene mucho de calipso, con él hablábamos mucho de ese Caribe indígena y decíamos que teníamos que unirlo en este sencillo. Queríamos tener a varios integrantes de la familia Marley, y cuando llegó Ziggy quedó fascinado con todo el mundo Tayrona y con la historia de la canción. Si no hubiera llegado la pandemia, la familia Marley y yo hubiéramos ido a un lugar de arahuacos para hacer el video allí. (Lea también: Rubén Blades y Carlos Vives estrenan "No estás solo", canción para los enfermos)
¿Cómo fue trabajar con Rubén Blades juntando el vallenato y la salsa?
Siempre ha habido un matrimonio ahí, trabajar con Rubén fue muy especial porque siempre que nos veíamos teníamos cosas en común. El conocimiento de él como panameño de toda la corriente típica musical de allá que siempre ha estado muy conectada con Colombia nos ayudó a conectar mucho porque somos corrientes muy hermanadas y eso se escucha en Canción para Rubén.
Hablando un poco del sencillo “Los consejos del difunto”, ¿le gusta más dar consejos que recibirlos?
Creo que es más importante recibir consejos, porque siento que si son buenos, son muestras sinceras de cariño, y siento que no soy tanto de dar consejos, sino de compartir experiencias. Los consejos del difunto me ayudaron mucho a lo largo de mi vida.
También hizo una canción con su hija Helena llamada “Rapsodia en La mayor”, ¿cómo nació este sencillo?
Cuando Helena vio la película de Queen se enloqueció con Freddie Mercury y todo el repertorio de la banda. Un día me dijo que me sentara a escuchar Bohemian Rhapsody, ella se sentó al piano y empezó a tocarla… le dije que Queen era una de mis bandas favoritas, luego de que ella terminara de tocarla me senté, escribí las líneas con las que comienza Rapsodia en La mayor y luego la grabamos juntos.
“Cumbiana”, la canción, es una cumbia muy íntima y artesanal, cuénteme un poco sobre esta historia...
Es una historia de amor muy linda, curiosamente en esa canción canté rarísimo y no sé por qué, es una voz nueva para mí que surgió por la naturaleza de la canción… también tiene tristeza y melancolía de esa nostalgia que tiene nuestra música.