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“Dejaré mi huella en cada paso, ellas me enseñan a vivir”. La frase, cargada a la vez de humildad y valentía, es parte de Contracorriente, la producción musical que unió a los reconocidos cantantes españoles Alvaro Soler (Alvaro sin tilde) y David Bisbal. Una canción con un mensaje poderoso: una especie de aliento para todos los que de algún modo están yendo contra la corriente, luchando por conseguir sus metas, a pesar de las adversidades.
Al respecto, en entrevista con El Espectador, Alvaro Soler comentó: “Dejar huella, en este caso, significa y simboliza poder ayudar a todos aquellos que escuchen la canción, transmitirles un mensaje de alegría, incluso motivarlos en momentos duros, que puedan arreglar cosas que parecían que no se podían arreglar tan fácilmente. Este es el poder de la música”.
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David Bisbal, por su parte, se mostró complacido con todo lo que le ha dejado este encuentro musical, y se refirió, de modo entusiasta, a las principales virtudes de este sencillo: “Hemos encontrado una canción hermosísima, con una melodía muy potente, tanto en los versos como en el precoro y el coro, una canción donde efectivamente hemos puesto cada uno nuestra esencia. Estamos contentos con el resultado”.
Bisbal, que se ha constituido en uno de los músicos más populares de Iberoamérica desde que en el año 2001 ganó en su país el concurso Operación triunfo, considera que esta colaboración artística va más allá de lo meramente musical.
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Así se refirió al trabajo con Alvaro Soler: “Fue espectacular, para mí es muy importante que la gente sepa que trabajar con este artista es un lujo, un lujo por muchos motivos, pues va más allá de lo musical. Alvaro tiene un montón de hits, un montón de colaboraciones que a mí me encantan: con Morat, con TINI, con Jennifer López, con muchos artistas y con canciones muy exitosas, pero que, al mismo tiempo, tienen mucha calidad musical. Además de todo esto, es un lujo para mí porque me he encontrado con un buen compañero, de los que siempre les gusta estar apuntando cosas para aportar, y sé que eso me hace mejorar a mí”.
Desde hacía cierto tiempo esta colaboración era un pendiente en la agenda y, sobre todo, en los intereses artísticos de ambos músicos. Sin embargo, por distintas razones, no se había podido realizar. Alvaro Soler contó cómo se dieron una serie de circunstancias, un poco por azar, pero definitivamente propicias, para que por fin pudieran unir sus talentos. “Aunque en el mismo lugar, estábamos en estudios separados, en habitaciones separadas, él estaba grabando voces para un proyecto suyo y yo estaba componiendo con mi equipo allí, al mismo tiempo, el mismo día, entonces vi a David y dije: ‘No me lo creo’. Le pregunté qué hacía allí, lo invité al estudio y le enseñé un par de canciones. Fue el momento perfecto, pues él creó magia, añadió su esencia y todo hizo clic”.
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Asimismo, referente al recordado momento, David Bisbal apuntó: “Yo quería participar de alguna manera porque tenía muchísimas ganas de colaborar con Alvaro desde hace mucho tiempo, era algo que ya habíamos hablado en el pasado, entonces sí resultó curioso cómo el destino nos había puesto en ese espacio con proyectos completamente diferentes, pero quizás el mismo destino nos tenía esa canción para que nosotros colaborásemos juntos”. Por último, apuntó Soler: “La verdad, fue muy bonito: es una historia que vale la pena contar y que viene totalmente del corazón”.
Otro punto para destacar de esta alianza musical Soler-Bisbal es la realización audiovisual que acompaña el corte. El video, dirigido por Gustavo Carvalho, se grabó en España y tiene una notable factura. Sobre esto, Alvaro Soler expresó: “El director es un artista, es una persona encantadora que tiene muy buenas ideas. Creo que se nota en el movimiento de cámara, por ejemplo, pero sobre todo se nota en el amor que se le ha puesto en toda la concepción del video; gracias a todo el equipo quedó muy bonito. Queríamos escoger un sitio con desierto, queríamos algo que tuviese polvo, algo duro, y entonces encontramos un lugar cerca de Toledo, que está al sur de Madrid. Es un escenario espectacular, es un parque natural con un pantano y unos acantilados”.
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En otro aspecto relacionado con la realización de esta pieza audiovisual, David Bisbal resaltó la acogida y el buen trato que recibieron por parte de la gente que los respaldó durante este proceso.
“Nos cuidaron de verdad, toda la gente que trabaja en Turismo de Toledo se portó muy bien. Imagínate que estábamos grabando en un entorno natural, protegido, y si te fijas bien en el script del videoclip, al final, se supone que todos estamos alrededor de un fuego, pues teníamos que bailar, pero por supuesto ahí no se puede hacer ningún fuego, entonces pusimos unos espejos rotos unos encima de otros, formando una especie de hoguera muy bonita, porque el sol estaba brillando en esos espejos y se creó algo natural, protegiendo el entorno, y eso me gustó mucho como recurso”.
Por ahora, Contracorriente, la colaboración musical fruto de un encuentro más bien casual, pero sazonado de antemano por el deseo mutuo de sacar adelante un proyecto creativo conjunto, ha tenido una muy buena aceptación. El video, en poco tiempo, ya va por los casi cinco millones de visitas en Youtube. Seguramente, y tal vez sin planearlo mucho, llegará el momento indicado para presentarla y ponerla a consideración de la gente que asista a sus presentaciones. Así lo cree David Bisbal: “Ahora lo que falta es que pase un poco más el tiempo para que defendamos nuestra canción en vivo y en directo en cualquier concierto”.