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The Writing On The Wall, la nueva canción de Iron Maiden, fue producida por Kevin Shirley, y coproducida por el bajista y miembro fundador, Steve Harris. Bruce Dickinson inicialmente tenía un concepto para el video que se hizo realidad en colaboración con dos ex ejecutivos de Pixar galardonados y fanáticos de Maiden desde hace mucho tiempo, Mark Andrews y Andrew Gordon.
La pareja tiene más de 50 años de experiencia en la industria de la animación del más alto nivel, incluido el trabajo en Los Increíbles, Ratatouille, Valiente, Monsters Inc, y Buscando a Nemo. Con los socios haciendo cola para involucrarse en el proyecto, eligieron BlinkInk, un estudio de animación con sede en Londres que se destaca por su trabajo con una variedad de marcas globales, desde Adidas hasta Coca-Cola, y una serie de videos musicales de alto perfil.
El director de BlinkInk, Nicos Livesey, otro fanático de Maiden desde hace mucho tiempo, encontraron a un hombre que compartía la visión colectiva de la pista, lo que resultó en la película final que presenta el primer vistazo de una nueva y sorprendente encarnación de Eddie, en una espectacular forma 3D.
Bruce comenta: “Tenía una idea bastante clara del concepto para acompañar la canción, y cuando conocí a Mark y Andrew, en Zoom, rápidamente quedó claro que todos estábamos en la misma onda, y esto se reforzó con la incorporación de Nicos y su gran equipo BlinkInk. ¡Nuestras reuniones semanales de Zoom del equipo eran, por lo general, muy creativas y muy divertidas! Estoy muy orgulloso de la forma en que resultó el video, en realidad es más como una mini película. Sabía que iba a funcionar tan pronto como Mark le diera vida a mi idea, con sus increíbles guiones gráficos; pensé que podríamos hacer algo muy especial juntos. Creo que lo hicimos, y espero que nuestros fans estén de acuerdo. De hecho, ¡fue creado por fans de Maiden!”
El director, Nicos Livesey, retoma la historia: “Rápidamente encontramos la experiencia que queríamos, y la gente literalmente se me lanzaba para trabajar en un video de Maiden; teníamos más de 60 personas en 13 países, desde Brasil hasta Francia, y Rumania hasta Estados Unidos, para agregar algo al clip, y yo diría que su amor, pasión, y comprensión por la banda brilla en cada cuadro. Eran un equipo de ensueño para que los productores y yo manejáramos”.