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El 24 de octubre de 1995 Aterciopelados lanzó “El Dorado”, un trabajo que Andrea Echeverri y Héctor Buitrago definen como “cancionero visionario que celebra nuestras muchas sangres y que, como metáfora, derrumba las tantas fronteras que nos separan como colombianos”. (Le puede interesar: Juanes celebra 20 años como solista).
El nombre del álbum evoca, por supuesto, la leyenda de ‘El Dorado’, un reino de oro que buscaron infructuosamente los conquistadores españoles, y que musicalmente sugiere que ese tesoro permanece en el interior de cada persona.
Para entonces, Aterciopelados ya había presentado “Con el corazón en la mano”, pero fue desde “El Dorado” que se acercaron espiritualmente a las raíces ancestrales de América que siguen explorando en su música. (Le recomendamos: Héctor Buitrago: “Los conciertos virtuales dan más libertad”).
Bajo la producción de Federico López, en este disco trabajaron ritmos autóctonos como la cumbia, el bolero, la balada rock y algo del sonido punk presente de su primer LP. Las canciones las grabaron en el estudio Audiovisión de Bogotá entre octubre y diciembre de 1994.
Cuando se estrenó “El Dorado” el canal MTV era el que marcaba la tendencia musicalmente, y específicamente MTV Latino presentar producciones en español.
El primer sencillo de la agrupación bogotana en entrar a esta cadena internacional y rotar en la radio del continente fue “Bolero falaz”. Su video, realizado por Rhayuela Films (responsables del documental “Símbolo marciano”, recorrido por la historia musical y personal de Aterciopelados); mostraba a la banda y la poderosa imagen de Andrea Echeverri con su guitarra de flores en el centro de Bogotá, acompañados de un paisaje urbano caótico y popular. (También le recomendamos: Andrea Echeverri, rock aterciopelado y hormonal).
Otras canciones de gran repercusión fueron el ‘latin rock’ de Candela, la ranchera rock La Estaca, la callejera Pilas o Siervo Sin Tierra que navega en los sonidos andinos e indígenas y que nos relatan la historia, reflejo de lo que aún sucede en Colombia, de un campesino que no logra conseguir un trozo de tierra para cultivar y vivir en paz.
Por su parte, “Florecita rockera” se convirtió el referente obligado del rock nacional y que hasta el presente su mensaje se asocia con un espíritu femenino libre y aguerrido.
La promoción del disco “El Dorado” les significó también un sin número de presentaciones con las que pasaron de lo local a lo global permitiéndoles estar en las grandes ligas del rock latino de los 90.
Es considerado por la crítica especializada como uno de los discos más importantes y emblemáticos en la historia del rock en español, apareciendo en lo alto de múltiples listados de los mejores álbumes latinos de todos los tiempos.
La aceptación casi inmediata de este disco se reflejó a nivel comercial registrando ventas que actualmente superan las 400.000 copias en Colombia y 600.000 a nivel internacional, llegando a contar con ediciones diferentes para Estados Unidos, España, México y Argentina.
Hoy, 25 años después, las canciones de “El Dorado” siguen resonando en los oídos y corazones de una generación de Latinoamericanos que lo recuerdan como banda sonora y como un registro musical de historias de Colombia.
Aterciopelados tiene pendiente la celebración de los 25 años de “El Dorado”, la cual esperan hacer una vez pase la emergencia generada por el coronavirus.