J Álvarez: “que el reguetón dure 100 o 200 años”

Repasé sus éxitos que aún guardaba en la memoria: “La pregunta”, “Sexo, sudor y calor” y “Junto al amanecer”. La entrevista debía ser contundente. Mientras esperaba el turno, un colega de otro medio le hizo una pregunta que generó risas entre los que estábamos en la sala. “¿Ha comido paisa en bandeja?”. El cantante respondió afirmativamente. Las otras respuestas las acompañó con una muletilla y su acento puertorriqueño: “¿Me entiendes?”.

Repasé sus éxitos que aún guardaba en la memoria: “La pregunta”, “Sexo, sudor y calor” y “Junto al amanecer”. La entrevista debía ser contundente. Mientras esperaba el turno, un colega de otro medio le hizo una pregunta que generó risas entre los que estábamos en la sala. “¿Ha comido paisa en bandeja?”. El cantante respondió afirmativamente. Las otras respuestas las acompañó con una muletilla y su acento puertorriqueño: “¿Me entiendes?”.

Al momento del cara a cara, lo saludé y lo previne de que mis preguntas no eran de TikTok. Sonrió por cortesía. Era un intento fracasado por empatizar.

Acudí a los recuerdos. Le conté que escuchaba sus canciones en la adolescencia, que le había perdido el rastro desde entonces, pero que cuando me ofrecieron entrevistar a J Álvarez, no tuve que dar muchas vueltas.

¿Qué diferencias hay entre el J Álvarez de aquella época al actual?

Que había poquitos. Eran menos artistas. Salí trayendo una propuesta nueva, después empezó otra camada de artistas. El fanático tiene que escoger. Esa es la diferencia, que ahora estoy compitiendo con muchos más.

Está en la mitad de la escena. Hay unos detrás que fueron los precursores y los más recientes que recorren ese camino.

Sí, estoy disfrutando de una evolución del género increíble. Disfrutando que gracias a Dios mis canciones nacieron en la época de lo digital y estoy gozando de las plataformas digitales. Gozando de una trayectoria. Ya no es tan difícil sacar una canción, antes tenías que ir a una disquera o ver cómo ponían tu música a sonar.

En el reguetón es frecuente que los artistas con más trayectoria colaboren con los que apenas inician. ¿A qué se debe esto?

Por eso es que esto no para. Porque yo puedo meterme en el estudio con un muchacho que lleva pocos años en la industria. Hay géneros que no tienen visión, no entiendo por qué no colaboran con los artistas nuevos. Así le darían más vida al género. Por eso llevo 15 años y el género, mal contado, lleva 30 y tenemos que seguir hasta que dure 100 0 200 años.

Cuando el reguetón comenzó se decía que no iba a durar mucho, pero acaba de decir que lleva 30 años en la industria. ¿Ve ese final en algún punto?

Antes, los equipos de trabajo te decían “aprovecha que esto se acaba rápido”, porque cuando ellos empezaron ellos mismos se quitaban. Muchos artistas pararon sus carreras, pero este género va a parar cuando todo mundo pare. Ahora vienen otros artistas. Esto va a seguir, es un estilo de vida. Les preguntas a los niños qué quieren ser cuando sean grandes y te dicen que quieren ser reguetoneros.

Blessd, que es de aquí, tiene una historia similar. Él también estuvo en algún momento de su vida en la cárcel, luego salió, hizo música y pegó...

Amén. Con él hemos hablado por WhatsApp varias veces, no lo he visto de frente, estoy loco por conocerlo. Me transmite un aura del chamaco que quiere echar pa’lante y que es bien respetuoso y agradecido.

En Medellín se desarrolla una escena importante del reguetón. Y desde aquí se ve a Puerto Rico como el pionero y gran referente. ¿Cuál es la imagen que ustedes tienen de Medellín en términos musicales?

Lo veo como un lugar de exportación. Como un lugar donde puedo lanzar mis temas, están los medios y el ojo comercial. Tú lo promocionas desde aquí y puedes tener la suerte de que se riegue más.

¿Por qué cree que Medellín y no otra ciudad se convierte en el epicentro del reguetón?

Porque aquí es donde dieron el respeto que se merecen los pioneros de este género. Aquí fue que comenzaron a consumir nuestra música y a hacer los mejores conciertos hasta que convertirlo en lo que es hoy.

También veo similitudes entre el Caribe colombiano y el Caribe antillano...

La jerga. Y hasta hablamos igualito.

De hecho, en algún momento grabó una canción con Carlos Vives, quien ha recogido los sonidos del Caribe: la cumbia, la champeta, el vallenato. ¿Le llama la atención algún género del Caribe colombiano?

Me gusta mucho lo que hace Zaider (champeta), Silvestre (vallenato), el mismo Carlos Vives. Todos los muchachos que hacen música aquí son muy buenos.

Codiscos le hace un reconocimiento por sus 15 años de trayectoria. ¿Cómo lo recibe?

Eso me hace sentir que vale la pena el sacrificio, la consistencia, la disciplina, las horas de estudio. Todo lo que he pasado para madurar y llegar al nivel que estoy ahora mismo mental y empresarialmente. Ahora con mi nuevo sencillo “Casi soltera”. Hermano, lo que estoy es muy agradecido.

***

Al final rompí con la promesa inicial con dos preguntas de TikTok. La primera fue por los otros géneros que escuchaba. Dijo que escuchaba el reguetón viejo “el de la mata”, salsa, jazz, A&B, hip hop y que ahora estaba escuchando Quizomba. Luego mencionó la “Over” de Lucky Daye, como respuesta a la segunda pregunta de cuál era la última canción de su playlist. Para él fue la última. Para mí sería la primera.