La rebeldía de Sinéad O’Connor
La cantante, que nació en Dublín en 1966, falleció hoy a los 56 años. La intérprete revolucionó la escena musical irlandesa con la fuerza de un carácter apasionado e irreverente. Alcanzó a la fama mundial en 1989, con la canción “Nothing Compares 2 U”, compuesta por Prince, y que fue parte de su álbum “I Do Not Want What I Haven’t Got”.
Sarah Gutiérrez
Ganadora del premio Grammy en 1991, sacerdotiza, cantautora, talentosa y con un carácter indómito, esa fue la vida que llevó Sinéad O’Connor, quien falleció ayer a los 56 años, según afirmaron fuentes cercanas a la artista al medio irlandés RTÉ. “Con gran tristeza anunciamos el fallecimiento de nuestra querida Sinéad. Su familia y amigos están devastados y han pedido privacidad en este momento tan difícil”.
(Le puede interesar: Murió la cantante irlandesa Sinead O’Connor a los 56 años)
La música llegó a su vida cuando tenía 15 años, pero por cuenta de su comportamiento su padre la envío a una escuela religiosa con la esperanza de domar sus maneras. Fue allí donde tuvo la oportunidad de conocer a uno de los integrantes de la banda In Tua Nua, con quien realizó su primera grabación, Take My Hand en 1984, canción que llegó al puesto 19 de los listados musicales en Irlanda.
Su cabeza rapada y su estilo irreverente fueron su sello durante los más de 30 años de carrera: 10 álbumes musicales, de los cuales The Lion and the Cobra (1987) y I Do Not Want What I Haven’t Got (1990) fueron de sus producciones más vendidas tanto en Reino Unido como en Estados Unidos, donde en este último fue número 1 en los listados estadounidenses e incluyó su canción más popular, Nothing Compares 2 U, una reinterpretación del sencillo que Prince compuso para su banda, The Family. Este tema fue una despedida que le hizo O’Connor a su madre, quien falleció en un accidente, un hecho que marcó la vida personal de la intérprete, a pesar de que nunca tuvo una buena relación con su progenitora.
El medio especializado Rolling Stone considera que I Do Not Want What I Haven’t Got es uno de los mejores 500 álbumes de todos los tiempos, “un álbum esencial de los años 90″ que contiene 10 sencillos, donde elogiaron también Feel So Different y I Am Stretched on Your Grave, un poema del siglo XVII con un ritmo casi de tipo trip hop.
Esa imagen de rebelde se la ganó por cuenta de las polémicas en las que se vio envuelta en el transcurso de su carrera, una de las más recordadas fue la presentación que tuvo en 1992 en el programa de variedades Saturday Night Live, donde interpretó el tema de Bob Marley War. Cambió la palabra “racismo” por “abuso de menores”, haciendo referencia a los escándalos de pederastia relacionados con la Iglesia católica. En la presentación rompió en directo una foto del papa Juan Pablo II. Este hecho significó su entrada definitiva al mundo de la polémica. Fue abucheada en sus siguientes apariciones en público, pero imitada por Madonna en el mismo programa un año después.
(Lea también: Sinéad O’Connor, la cantante que hizo “llorar” a Argentina nunca actuó en el país)
Su interés por defender problemáticas sociales, como la violencia de género, el abuso infantil y el feminismo, la llevaron a pasar por una “irrespetuosa’” y “desvergonzada”, críticas a las que respondía con su carácter particular: “Siempre he sido una rebelde y lo seguiré siendo. No creo en aceptar las cosas tal como son si no están bien”.
Su lucha en contra de la religión llegó a una tregua cuando en 1999 dio de qué hablar, cuando una iglesia irlandesa disidente la ordenó “sacerdotisa”. Años más tarde, en 2018, anunció que se había convertido al islam y cambió su nombre oficialmente a Shuhada’ Sadaqat.
Am I Not Your Girl? (1992) y Universal Mother (1994) no fueron bien recibidos por el público ni la crítica, y su lucha por mantener la custodia de su hija Roisin hizo más eco que alguno de sus sencillos.
Empezando el nuevo milenio, Sinéad O’Connor decidió probar suerte con el reggae y lanzó su disco Throw Down Your Arms (2003), en el cual hace un tributo a la cultura jamaiquina con sus reinterpretaciones de canciones de Bob Marley, Lee Perry y Peter Tosh.
Casada en cuatro ocasiones, Sinead O’Connor tuvo cuatro hijos, el último de ellos nacido en 2006.
Su último álbum salió en 2014, I’m Not Bossy, I’m the Boss, saludado por la crítica, pero a mitad del año siguiente anuló todos sus conciertos por “agotamiento”.
En los últimos años, en redes sociales, amenazó a sus antiguos socios con llevarlos ante la justicia, así como hablando de sus problemas de salud física y mental e incluso de sus pensamientos suicidas.
En 2022, su hijo Shane, de 17 años, puso fin a sus días. Su muerte fue un tremendo golpe y la cantante fue hospitalizada tras anunciar en redes sociales que planteaba también suicidarse.
Entre los primeros que lamentaron la muerte de una de la voces más icónicas de la música de las últimas tres décadas se destacó el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, quien extendió sus “condolencias a su familia, amigos y a todos los que amaban su música”.
“Su música era amada en todo el mundo y su talento era inigualable e incomparable”, escribió el jefe del gobierno dublinés en Twitter.
El humorista irlandés Dara O’Briain, conocido presentador de la cadena británica BBC, mostró su sorpresa por “la triste noticia”: “Pobre. Espero que supiera cuánto se le amaba”.
(Le recomendamos: Murió Ceferina Banquez, la reina del bullerengue, a sus 80 años)
El músico Tim Burgess, de la banda The Charlatans, aseguró que Sinéad era la “la verdadera encarnación del espíritu punk” y recordó que nunca “se comprometió”, una actitud vital “que hizo que su vida fuera una lucha”.
“Espero que haya encontrado la paz”, agregó Burgess sobre su muerte, cuyas causas la familia no ha precisado.
El director de cine irlandés Mark Cousins celebró que O’Connor haya representado “el lado salvaje irlandés” y que haya “formado parte de nuestras vidas imaginadas”.
La escritora irlandesa Marian Keyes calificó hoy la pérdida de la cantante de “desgarradora”: “Cuánto ha sufrido. Pobre, pobre Sinéad. Descansa en paz, maravilla única, increíble, valiente, preciosa”.
Ganadora del premio Grammy en 1991, sacerdotiza, cantautora, talentosa y con un carácter indómito, esa fue la vida que llevó Sinéad O’Connor, quien falleció ayer a los 56 años, según afirmaron fuentes cercanas a la artista al medio irlandés RTÉ. “Con gran tristeza anunciamos el fallecimiento de nuestra querida Sinéad. Su familia y amigos están devastados y han pedido privacidad en este momento tan difícil”.
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La música llegó a su vida cuando tenía 15 años, pero por cuenta de su comportamiento su padre la envío a una escuela religiosa con la esperanza de domar sus maneras. Fue allí donde tuvo la oportunidad de conocer a uno de los integrantes de la banda In Tua Nua, con quien realizó su primera grabación, Take My Hand en 1984, canción que llegó al puesto 19 de los listados musicales en Irlanda.
Su cabeza rapada y su estilo irreverente fueron su sello durante los más de 30 años de carrera: 10 álbumes musicales, de los cuales The Lion and the Cobra (1987) y I Do Not Want What I Haven’t Got (1990) fueron de sus producciones más vendidas tanto en Reino Unido como en Estados Unidos, donde en este último fue número 1 en los listados estadounidenses e incluyó su canción más popular, Nothing Compares 2 U, una reinterpretación del sencillo que Prince compuso para su banda, The Family. Este tema fue una despedida que le hizo O’Connor a su madre, quien falleció en un accidente, un hecho que marcó la vida personal de la intérprete, a pesar de que nunca tuvo una buena relación con su progenitora.
El medio especializado Rolling Stone considera que I Do Not Want What I Haven’t Got es uno de los mejores 500 álbumes de todos los tiempos, “un álbum esencial de los años 90″ que contiene 10 sencillos, donde elogiaron también Feel So Different y I Am Stretched on Your Grave, un poema del siglo XVII con un ritmo casi de tipo trip hop.
Esa imagen de rebelde se la ganó por cuenta de las polémicas en las que se vio envuelta en el transcurso de su carrera, una de las más recordadas fue la presentación que tuvo en 1992 en el programa de variedades Saturday Night Live, donde interpretó el tema de Bob Marley War. Cambió la palabra “racismo” por “abuso de menores”, haciendo referencia a los escándalos de pederastia relacionados con la Iglesia católica. En la presentación rompió en directo una foto del papa Juan Pablo II. Este hecho significó su entrada definitiva al mundo de la polémica. Fue abucheada en sus siguientes apariciones en público, pero imitada por Madonna en el mismo programa un año después.
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Su interés por defender problemáticas sociales, como la violencia de género, el abuso infantil y el feminismo, la llevaron a pasar por una “irrespetuosa’” y “desvergonzada”, críticas a las que respondía con su carácter particular: “Siempre he sido una rebelde y lo seguiré siendo. No creo en aceptar las cosas tal como son si no están bien”.
Su lucha en contra de la religión llegó a una tregua cuando en 1999 dio de qué hablar, cuando una iglesia irlandesa disidente la ordenó “sacerdotisa”. Años más tarde, en 2018, anunció que se había convertido al islam y cambió su nombre oficialmente a Shuhada’ Sadaqat.
Am I Not Your Girl? (1992) y Universal Mother (1994) no fueron bien recibidos por el público ni la crítica, y su lucha por mantener la custodia de su hija Roisin hizo más eco que alguno de sus sencillos.
Empezando el nuevo milenio, Sinéad O’Connor decidió probar suerte con el reggae y lanzó su disco Throw Down Your Arms (2003), en el cual hace un tributo a la cultura jamaiquina con sus reinterpretaciones de canciones de Bob Marley, Lee Perry y Peter Tosh.
Casada en cuatro ocasiones, Sinead O’Connor tuvo cuatro hijos, el último de ellos nacido en 2006.
Su último álbum salió en 2014, I’m Not Bossy, I’m the Boss, saludado por la crítica, pero a mitad del año siguiente anuló todos sus conciertos por “agotamiento”.
En los últimos años, en redes sociales, amenazó a sus antiguos socios con llevarlos ante la justicia, así como hablando de sus problemas de salud física y mental e incluso de sus pensamientos suicidas.
En 2022, su hijo Shane, de 17 años, puso fin a sus días. Su muerte fue un tremendo golpe y la cantante fue hospitalizada tras anunciar en redes sociales que planteaba también suicidarse.
Entre los primeros que lamentaron la muerte de una de la voces más icónicas de la música de las últimas tres décadas se destacó el primer ministro irlandés, Leo Varadkar, quien extendió sus “condolencias a su familia, amigos y a todos los que amaban su música”.
“Su música era amada en todo el mundo y su talento era inigualable e incomparable”, escribió el jefe del gobierno dublinés en Twitter.
El humorista irlandés Dara O’Briain, conocido presentador de la cadena británica BBC, mostró su sorpresa por “la triste noticia”: “Pobre. Espero que supiera cuánto se le amaba”.
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El músico Tim Burgess, de la banda The Charlatans, aseguró que Sinéad era la “la verdadera encarnación del espíritu punk” y recordó que nunca “se comprometió”, una actitud vital “que hizo que su vida fuera una lucha”.
“Espero que haya encontrado la paz”, agregó Burgess sobre su muerte, cuyas causas la familia no ha precisado.
El director de cine irlandés Mark Cousins celebró que O’Connor haya representado “el lado salvaje irlandés” y que haya “formado parte de nuestras vidas imaginadas”.
La escritora irlandesa Marian Keyes calificó hoy la pérdida de la cantante de “desgarradora”: “Cuánto ha sufrido. Pobre, pobre Sinéad. Descansa en paz, maravilla única, increíble, valiente, preciosa”.