Luis Alfonso: “No me siento compitiendo contra los mexicanos, sino aprendiendo”
El fin de semana pasado abrió la gala de los premios Billboard en Estados Unidos. Su reciente éxito “Chismofilia” ocupa el puesto 19 en la lista “Latin Pop Airplay” de la revista musical. En entrevista para El Espectador, el cantante de música popular, habló sobre su inclinación al electrocorrido y el acercamiento que ha tenido con la música regional mexicana. El artista se presenta el sábado 26 de octubre en el Coliseo MedPlus de Bogotá.
Alberto González Martínez
Luis Alfonso es uno cuando habla y otro cuando canta. Cuando habla es como si se mordiera las muelas y se hablara para sí mismo. Cuando canta es como si se tratase un cantante mexicano con la modulación de un Vicente Fernández en sus mejores años.
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Luis Alfonso es uno cuando habla y otro cuando canta. Cuando habla es como si se mordiera las muelas y se hablara para sí mismo. Cuando canta es como si se tratase un cantante mexicano con la modulación de un Vicente Fernández en sus mejores años.
Dice lo primero que se le viene a la cabeza y todo se le viene en formato diminutivo: saludcita, cervecita. Aunque para referirse a sí mismo piensa en grande: “señorazo”.
Suena en Colombia y en las radios mexicanas, circula por los medios de comunicación de ese país, da conciertos allí, colabora con artistas de ese territorio y tiene una clara apuesta por sumergirse en el buen momento que pasa la música regional mexicana, de la que dice que ha aprendido.
Hace un par de años, Peso Pluma, Carin León y Christian Nodal ingresaban sus canciones por primera vez en los listados de Billboard en Estados Unidos. Hoy lo hace Luis Alfonso con su canción “Chismofilia”, que ocupa el puesto 19 en la lista “Latin Pop Airplay”. Esa producción fue el primer electrocorrido hecha por un colombiano y el primero en abrir la gala de los Premios Billboard.
Lo veo adentrándose en otros géneros, ¿quiere seguir es camino de explorar otros ritmos?
No voy tan allá. Simplemente que veo un estudio de grabación como un laboratorio químico-musical. Me encanta innovar, hacer nuevos ritmos, que todos los días tenga algo nuevo, que no sea siempre lo mismo. Por esos hicimos “Chismofilia” y después, con Blessd, hicimos “Tequila con cerveza” que también es un “electrocorrido contentoso”. Se viene también otro álbum que se llama “Electrocorridos contentosos”, con gente nacional e internacional.
Ya los mexicanos venían trabajando en esta línea del electrocorrido...
Claro, siempre me ha gustado empaparme de la música y la cultura mexicana porque como siempre fue amante de la ranchera. Hoy en día he tratado de llevar la línea de antaño de la ranchera, pero como todo en la vida evoluciona, entonces he tratado de tener un sello entre la línea vieja y lo moderno. Nuestra música abarca todos los géneros y las edades, desde un niño chiquito hasta un adulto mayor.
Hay una clara apuesta por el mercado mexicano desde Colombia, ¿cómo ha sido para usted tratar de entrar en este género tan grande y constituido?
Para nosotros es un honor y es una bendición poder escuchar nuestras canciones en el hermoso país mexicano, porque los admiro mucho. De pronto no entramos a competir porque la verdad es que México en música nos lleva años luz porque la tienen muy clara. Llevan haciendo durante muchos años lo que nosotros estamos haciendo a nuestro estilo, pero empapados de ellos. Hemos tratado de aprender mucho de México sin perder nuestra esencia colombiana. Más que una competencia es un honor y un orgullo poder tener nuestras canciones sonando en tierras mexicanas porque no es un mercado fácil, como vos decís, uno mueve un árbol y caen 100.000 bandas, empezando porque México es un país gigante: son ocho Colombia entonces hay ocho veces más artistas de lo que hay en este país.
Dice que no compite, entonces ¿cómo se siente frente a ellos?
Jamás. Nunca me siento compitiendo ni con los colegas colombianos ni con los de ninguna parte del mundo. No me siento compitiendo con los mexicanos, sino compartiendo, aprendiendo y empapándolos un poquito de lo nuevo y de lo nuestro también. Hemos tratado de hacer unos lazos familiares, musicales y de amistad muy bonitos.