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La cantante estadounidense Madonna llegó a la ciudad vieja de Marrakech, en el sur Marruecos, para festejar sus 60 años el jueves, informaron varias fuentes esta semana. (También le puede interesar: Madonna se hace material)
"Caminando por el laberinto de La Medina a la hora de la oración", comentó la reina del pop en sus cuentas de Facebook e Instagram con un video rodado en la noche.
El martes, la artista había compartido un retrato suyo con un fez (gorro de fieltro rojo tradicional), cubierto con joyas típicas berebere y la leyenda: "Hoy llevo la torta en la cabeza... Dos días más..." (Además, ¡Feliz cumpleaños Madonna!)
La policía marroquí se ha esforzado por evitar que los periodistas y fotógrafos den con la estrella, según diferentes reporteros contactados por la AFP en Marrakech.
Las especulaciones sobre el lugar que eligió Madonna para soplar sus 60 velitas están a la orden del día.
Algunos afirman que será en El Fenn -palacio con piscina y una gran terraza en los tejados de la ciudad ocre-, otros señalan el Kaskab Tasmanot -suntuosa propiedad del magnate británico Richard Branson, ubicado en un valle al pie de las montañas del Atlas - y otros indican que será en la casa de huéspedes de lujo pero rústica, The Break, enclavada en un paisaje desértico cerca de las Montañas Agafay.
La artista, que el año pasado se mudó a Lisboa, donde uno de sus hijos asiste a una academia juvenil de fútbol, alienta a sus fans para que en su 60º cumpleaños hagan donaciones a su obra de caridad para niños en Malaui.
Divorciada del director de cine Guy Ritchie, madre biológica de dos jóvenes, Madonna adoptó cuatro niños de Malaui.