Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Vuelven los espectáculos en vivo, después de la dura pandemia. ¿Cómo se siente este regreso a los escenarios?
Volvemos en vivo y en directo después de este largo paréntesis que hemos tenido por este COVID-19. Volvemos con muchísima energía. Somos como una botella de champán encerrados durante mucho tiempo, nos van a descorchar y vamos a salir con todas las burbujas, con muchas ganas de transmitir emociones y vivir presencialmente la zarzuela. Estoy segura de que el público está deseándolo y pueden estar tranquilos, porque la cultura es segura, estamos todos vacunados, ensayamos con mascarillas y tenemos nuestras PCR; será con todos los protocolos de bioseguridad.
¿Cuáles son las novedades de la Temporada Internacional de Ópera y Zarzuela 2021?
Esta versión internacional trae una música y un género único en el mundo, que es nuestro patrimonio. Hemos incorporado unos números nuevos que no se ponían desde hace tiempo o que no se han visto, y traemos por primera vez a un bailarín español: Luis Ortega, quien nos va a deleitar con su arte y su talento. Estoy segura de que el público quedará con la boca abierta.
¿Qué tan viva está la zarzuela en España? ¿Sigue siendo un espectáculo de lujo y solo para conocedores?
Claro que sigue viva en España y se sigue haciendo un esfuerzo tremendo por parte del teatro nacional y las compañías privadas. Sí es verdad que es un espectáculo caro y, debido a este período de encierro, contamos con subvenciones y ayudas para que estas compañías puedan seguir adelante difundiendo y haciendo disfrutar con este patrimonio único en el mundo. En Colombia la Fundación Arte Lírico sigue en esa lucha constante de llevar a los amantes del género todos estos clásicos para su deleite.
¿Cómo se cautiva un público joven para el género? ¿La ópera y la zarzuela han migrado a esa audiencia?
El público joven es un poco ajeno al género, pero eso tiene que ver más con la educación en los colegios y casas. Se están haciendo programas dedicados a los niños y jóvenes. Hay proyectos para ellos dedicados a promover e incentivar esta música y que no solamente se dediquen al TikTok o al reguetón; y la aceptación ha sido fabulosa.
¿Cuál es el diferenciador de la opereta, la ópera y la zarzuela?
Fundamentalmente en lo que se diferencian es en que unas llevan texto hablado, en el caso de la ópera todo es cantado. En cuanto a la exigencia vocal ahí no hay ninguna diferencia, un cantante se prepara igual para cantar un género u otro. La ópera, como no tiene texto, vocalmente exige más resistencia vocal y la zarzuela también tiene su complejidad porque el fraseo en la actuación maneja unos tonos que se deben saber proyectar, fusionado con el canto y el baile. La opereta es más parecida a la zarzuela, un poco más desenfada, alegre.
La vimos haciendo una “Carmen” hace unos años. ¿Cuáles son esas infaltables del público?
Sí, es verdad que disfruté mucho haciendo Carmen; me sentí muy identificada, muy satisfecha, pero la música y los textos, que son los que valen, siempre están ahí. No hay intérpretes únicos o indispensables en este mundo. En esta ocasión vamos a tener el gran placer de disfrutar una “Carmen” nueva, que va a ser María Rodríguez, es una gran intérprete. Lo importante es saber transmitir la esencia de cada personaje y será maravilloso poderla dirigir. Creo que la zarzuela me ha elegido a mí, así que todas tienen un gran significado muy importante.
¿Qué obras veremos en 2021?
Abrimos con la Antología de ópera y zarzuela, luego veremos Carmen, un clásico que el público siempre reclama, y cerramos la temporada con Los gavilanes. Estaremos del 8 al 24 de octubre, en el Teatro Cafam, viernes, sábados y domingos.
¿Por qué ir al Teatro Cafam a esta temporada de zarzuela?
Un espectáculo en directo es único, hay que ir al Teatro de Cafam y más después de estar confinados tantos meses. Es como una ventana que se abre: sientes, lloras, ríes; es una terapia maravillosa. Debemos enfrentar este miedo que hemos tenido por el encierro y volver a esta nueva “normalidad”. Hemos perdido seres queridos en el camino, pero tenemos que seguir por las nuevas generaciones. Vamos a dejar el corazón en el escenario y ustedes lo van a disfrutar.