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Doce años tuvieron que pasar para que Hayley Williams y su banda pisaran de nuevo el país. En ese momento de rock insuperable que se convirtió en una cultura, Paramore era un ícono, un infaltable, y sus temas le dieron la vuelta al mundo en cuestión de meses. El primer álbum que llegó a escucharse y tener éxito en Colombia y el mundo fue “Riot!” en 2007, y desde allí su éxito creció sin parar.
Aunque antes de “Riot!” ya habían sacado un álbum titulado “All We Know Is Falling” del que hacen parte sencillos como “Emergency”, “Never Let This Go” y “Here We Go Again”, fue hasta “Misery Business” que la banda logró hacer parte de la lista de Billboard Hot 100. Para completar el éxito, grabaron dos canciones para la saga de “Crepúsculo”, que en ese momento era el Paramore del cine. “Decode” y “I Caught Myself” estallaron por todas partes.
La primera vez que la banda vino a Bogotá fue el 2 de marzo de 2011, se presentaron en Corferias y no estaban pasando por un buen momento. Zac y Josh Farro, baterista y guitarrista respectivamente, habían anunciado hace solo unos meses atrás su salida del grupo... no fue fácil llenar el vacío, pero aun así, se embarcaron en una gira que recorrió gran parte de Suramérica.
Muchas cosas pasaron desde ese momento hasta este martes, otra vez en marzo, Paramore regresara con toda su esencia al escenario del Movistar Arena... discos, Grammy, sencillos exitosos y este tour que los trajo de regreso más de una década después.
Elke, la artista invitada
Hoy en día, la banda está conformada por Hayley Williams, Taylor York y Zac Farro. El público los esperaba ansioso, la gradería estaba repleta y miles de personas aprovecharon la ocasión para recordar esa época “emo” de mediados de los 2000 para vestirse como en ese entonces imponía la moda: ropa negra, medias de malla, maquillaje en los ojos, peinado extrava ante y chaquetas de cuero. No tomó mucho tiempo que el lugar se llenara en su totalidad, y desde lejos se veía el tercer piso con luces amarillas, el segundo azules y la zona de platea con luces rojas, para que se viera la bandera.
Antes de Paramore, el público se deleitó con el show de Elke, una artista de rock alternativo de Nueva York que es la novia de Zac Farro, baterista de Paramore. Su voz inauguró la noche, y su forma de moverse en el escenario conectó rápidamente con el público que estaba ansioso, pero a la vez paciente ante un buen show. La puesta en escena de Elke daba la impresión de estar dentro de una obra de teatro, donde el público era protagonista y ellos espectadores.
Su concierto duró un poco más de una hora, y Elke nunca se cambió su ropa, que daba la impresión de una mujer que lleva todo el día en casa. Las vibras relajantes de la banda se sentían en los rincones, y quisieron hacer un cover de una canción de “The Killers”. Hace poco estrenó su EP My Human Experience, y también lanzó su álbum de larga duración No Pain For Us Here el año pasado.
Paramore y su reencuentro con Bogotá
Eran las nueve de la noche, hace más de veinte minutos que Elke había abandonado el escenario y la ansiedad se apoderaba de la fanaticada de Paramore. Las luces empezaron a encenderse y apagarse mientras cientos de personas gritaban a una sola voz: “¡Paramore, Paramore, Paramore”! hasta que por fin, solo cinco minutos después salieron al escenario.
Su repertorio lo inauguraron con “You First”, una canción que hace parte de su nuevo álbum “This is Why”, pero continuaron apelando a la nostalgia con “That’s What You Get”, la canción que todos los treintones recordamos porque solíamos ver el videoclip siempre en “Los diez más pedidos” de MTV.
Hayley como vocalista y líder de la banda es excepcional. Sus movimientos, su voz, su forma de conectar con el público estuvieron presentes en cada momento de la noche, su carisma, su sonrisa y sus coqueteos hacia el público cautivaron a las más de diez mil personas que fueron a verlos brillar.
Se rumoraba que la banda omitiría “Decode” de la lista, pero para sorpresa de muchos, no fue así. Ese fue quizás el momento perfecto para los amantes de la banda y de la saga también, memorable. También cantaron “Playing God”, “Running Out of Time”, “I Caught Myself”, “The Only Exception”, Ain´t Fun”, y así hicieron un recorrido por todo lo que ha sido su vida artística hasta hoy.
El cierre estuvo protagonizado por dos canciones infaltables dentro del setlist: “Misery Business”, que fue la que los catapultó a la fama, y “This is Why”, una mezcla perfecta entre pasado y presente que reafirmó al público una vez más que su banda favorita es solo una: Paramore.