Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Usher protagonizó el domingo el espectáculo del intermedio del Super Bowl con una actuación digna de Las Vegas, cargada de brillo, coreografía y nostalgia. Sin embargo, no fue el único artista destacado de la noche, ya que que Taylor Swift concentró todas las miradas animando a su novio Travis Kelce, ala cerrada de los Kansas City Chiefs, desde un palco de lujo con un grupo de amigos famosos.
La relación de Swift con Kelce, la carismática estrella de los Chiefs, ha sido muy llamativa para los índices de audiencia televisiva y ha cautivado a la NFL y a la industria cultural, ya que cada uno de sus movimientos es motivo de titulares.
Podría interesarle: Julio Cortázar: “Largo, flaco, feo y aburrido”
Sin embargo, la “diosa” actual del pop no fue una de las invitadas sorpresa del medio tiempo, como lo fueron Alicia Keys, la guitarrista H.E.R y los raperos Ludacris y Lil Jon, que participaron junto a Usher en uno de los espectáculos más codiciados del mundo de la música y de la publicidad que duró escasos 15 minutos ante los 65.000 espectadores que acudieron a ver la final de la NFL entre los Kansas City Chiefs y los San Francisco 49ers.
Beyonce también asistió con su esposo, el magnate del hip hop Jay-Z, y anunció un nuevo álbum durante un comercial en el tiempo del encuentro en el que intenta repetidamente “romper Internet”. El anuncio termina con la frase: “Suelta la música”.
Podría interesarle: Santiago de Bedout: “Soy más consciente de que no conocemos la realidad del otro”
“Reducir 30 años de carrera a 15 minutos es mucho pedir”, había dicho Usher, que en diciembre terminó una residencia de 100 conciertos en Las Vegas y el viernes sacó su noveno álbum de estudio “Coming Home”. Pese a todo, el ganador de ocho premios Grammy tuvo tiempo para interpretar éxitos como “Yeah”, “Caught up” o “Bad girl” en el abarrotado estadio Allegiant de Las Vegas, en la final del fútbol americano, en un espectáculo que sienta frente al televisor a decenas de millones de espectadores.
También se cambió de ropa, empezó vestido de blanco y terminó con un conjunto negro y azul subido sobre patines, demostrando que además de cantar está en excelente forma física para bailar. Usher, cuyos éxitos incluyen “OMG” y “My Boo”, ya estuvo en el escenario del Super Bowl en 2011 como invitado de Black Eyed Peas.
Podría interesarle: Fallece el artista Günter Brus, último representante del Accionismo Vienés
La lista de artistas que han actuado anteriormente en el descanso de la cita máxima del fútbol americano ha contado con cantantes y grupos de la talla de Michael Jackson, Prince, Rolling Stones, Bruce Springsteen, U2, Lady Gaga, Stevie Wonder y Paul McCartney, así como la colombiana Shakira que actuó con Jennifer López. Entre los artistas más recientes figuran Rihanna, que el año pasado sorprendió al público al revelar su embarazo, y las leyendas del hip-hop Dr. Dre, Kendrick Lamar, Mary J. Blige, Snoop Dogg, Eminem y 50 Cent en 2022 en Los Ángeles.
Uno de los momentos más esperados de la televisión estadounidense, este espectáculo no ha estado exento de polémica, como cuando en 2004 Janet Jackson mostró inadvertidamente su pecho derecho desnudo mientras actuaba con Justin Timberlake, en una controversia que se conoció como “Nipple-gate”.
Podría interesarle: De la imaginación y la búsqueda en la obra de Julio Cortázar
Al inicio del encuentro, la leyenda del country Reba McEntire interpretó el himno nacional y Post Malone cantó “America the Beautiful” y Andra Day interpretó una versión de “Lift Every Voice and Sing”, considerado como el himno nacional negro de Estados Unidos.
Si le interesan los temas culturales y quiere opinar sobre nuestro contenido y recibir más información, escríbanos al correo de la editora Laura Camila Arévalo Domínguez (larevalo@elespectador.com) o al de Andrés Osorio (aosorio@elespectador.com).