Taylor Swift planea recuperar los derechos de sus canciones que perdió ante Scooter Braun
La artista dijo a CBS que la letra pequeña de su contrato le permitiría grabar sus cinco primeros discos a partir de noviembre de 2020.
AFP
Ante el lanzamiento el viernes de su álbum "Lover", la estrella del pop Taylor Swift está planeando regrabar sus primeros álbumes para tener la última palabra en una disputa por los derechos sobre su música.
La noticia reaviva la batalla de Swift con el magnate de la industria Scooter Braun, quien recientemente compró Big Machine Label Group a través de su compañía Ithaca Holdings en un acuerdo de 300 millones de dólares, obteniendo así la propiedad mayoritaria de los máster (grabaciones originales) de Swift.
El dueño de las grabaciones puede determinar cómo se reproducen y venden las canciones.
"Me despojó del trabajo de mi vida", dijo Swift, de 29 años, cuando la noticia del acuerdo se dio a conocer en junio.
Ahora la exitosa artista asegura que recuperará el control. Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de grabar sus primeros seis álbumes multiplatino en una entrevista con CBS el domingo por la mañana, Taylor Swift dijo que la opción era probable. (Le puede interesar: Taylor Swift se reconcilia con Katy Perry)
Cuando se le preguntó "¿harías eso?", ella respondió: "oh, sí", según un avance de la entrevista. "A partir del próximo año podré grabar los álbumes del uno al cinco una vez más. Es algo que me emociona mucho. Creo que los artistas merecen controlar su trabajo. Es un tema que me apasiona", agregó.
La dramática medida podría complicarse por las restricciones temporales en sus primeros contratos -firmó por primera vez con Big Machine Label Group en 2005, cuando aún era una adolescente- pero aun así es posible.
Taylor Swift tiene los derechos de las letras y composiciones de sus canciones, lo que significa que podría grabar nuevas versiones sin necesidad de acceder a las grabaciones originales.
Sus contratos anteriores no se conocen, pero típicamente restricciones de tiempo impiden a los artistas publicar trabajos regrabados hasta que pasan tres a cinco años de su lanzamiento inicial. El disco debut de Swift se lanzó en 2006, mientras que su último álbum salió en 2017.
El año pasado, la superestrella firmó un nuevo acuerdo con Republic Records y Universal Music Group.
La fortuna de Swift y su profunda red en la industria de la música también ayudarían, ya que necesitaría el apoyo de sus antiguos colaboradores en las canciones para que sean competitivas con sus versiones originales.
Ante el lanzamiento el viernes de su álbum "Lover", la estrella del pop Taylor Swift está planeando regrabar sus primeros álbumes para tener la última palabra en una disputa por los derechos sobre su música.
La noticia reaviva la batalla de Swift con el magnate de la industria Scooter Braun, quien recientemente compró Big Machine Label Group a través de su compañía Ithaca Holdings en un acuerdo de 300 millones de dólares, obteniendo así la propiedad mayoritaria de los máster (grabaciones originales) de Swift.
El dueño de las grabaciones puede determinar cómo se reproducen y venden las canciones.
"Me despojó del trabajo de mi vida", dijo Swift, de 29 años, cuando la noticia del acuerdo se dio a conocer en junio.
Ahora la exitosa artista asegura que recuperará el control. Cuando se le preguntó sobre la posibilidad de grabar sus primeros seis álbumes multiplatino en una entrevista con CBS el domingo por la mañana, Taylor Swift dijo que la opción era probable. (Le puede interesar: Taylor Swift se reconcilia con Katy Perry)
Cuando se le preguntó "¿harías eso?", ella respondió: "oh, sí", según un avance de la entrevista. "A partir del próximo año podré grabar los álbumes del uno al cinco una vez más. Es algo que me emociona mucho. Creo que los artistas merecen controlar su trabajo. Es un tema que me apasiona", agregó.
La dramática medida podría complicarse por las restricciones temporales en sus primeros contratos -firmó por primera vez con Big Machine Label Group en 2005, cuando aún era una adolescente- pero aun así es posible.
Taylor Swift tiene los derechos de las letras y composiciones de sus canciones, lo que significa que podría grabar nuevas versiones sin necesidad de acceder a las grabaciones originales.
Sus contratos anteriores no se conocen, pero típicamente restricciones de tiempo impiden a los artistas publicar trabajos regrabados hasta que pasan tres a cinco años de su lanzamiento inicial. El disco debut de Swift se lanzó en 2006, mientras que su último álbum salió en 2017.
El año pasado, la superestrella firmó un nuevo acuerdo con Republic Records y Universal Music Group.
La fortuna de Swift y su profunda red en la industria de la música también ayudarían, ya que necesitaría el apoyo de sus antiguos colaboradores en las canciones para que sean competitivas con sus versiones originales.