Thomas Ospital, desde las iglesias hacia el mundo entero interpretando el órgano
El Maestro Ospital interpreta recitales como solista, así como acompañado de coro u orquesta. Esta convencido en perpetuar el arte de la improvisación en todas sus formas, incluyendo el acompañamiento de películas mudas.
Organista titular de la Iglesia Saint-Eustache en París, Organista residente en la Maison de la Radio (en el Radio France Concert Hall) y recientemente designado como Profesor de órgano en el Conservatorio de París (CNSMDP). Thomas Ospital es un joven artista que se ha ganado rápidamente un lugar entre los mejores interpretes del órgano del mundo.
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Organista titular de la Iglesia Saint-Eustache en París, Organista residente en la Maison de la Radio (en el Radio France Concert Hall) y recientemente designado como Profesor de órgano en el Conservatorio de París (CNSMDP). Thomas Ospital es un joven artista que se ha ganado rápidamente un lugar entre los mejores interpretes del órgano del mundo.
El Maestro Ospital interpreta recitales como solista, así como acompañado de coro u orquesta. Está convencido en perpetuar el arte de la improvisación en todas sus formas, incluyendo el acompañamiento de películas mudas. Sus presentaciones han tenido lugar a lo largo de toda Europa, incluyendo Gran Bretaña, España, Italia, Grecia, Alemania, Suiza y Holanda. Se ha presentado en Rusia y en los Estados Unidos, donde en 2012 fue por seis meses el Joven Artista Residente en la Catedral Basilica del Rey San Luis de Francia en New Orleans, USA.
Actualmente es el Organista Titular del órgano más grande de Francia; El Grand Organ en la St. Eustache en París. Asumió el puesto en el 2015 cuando fue el sucesor de Jean Guillou. El Maestro Ospital fue designado recientemente como Organista Residente de la Maison de la Radio (en el Concert Hall de Radio France) donde preside los nuevos conciertos en el órgano construido por Grenzing.
Ospital habló con El Espectador sobre los inicios de su carrera y la pasión que lo llevó a tocar el órgano y no cualquier otro instrumento. Además, también comenta que trabajará junto a la Orquesta Filarmónica de Bogotá-
¿Cómo es su comienzo en el Órgano siendo tan joven y cómo llegó a este instrumento?
Empecé en la música y el órgano, a los diez años en el País Vasco, del lado Frances, donde nací, en una iglesia había visto a alguien tocar el órgano, y no sé qué pasó, pero de repente me dio como un escalofrío o corrientazo por el instrumento. Creo que había como un cupido de la música que estaba al lado de mi en ese momento y me ha lanzado esa flecha del amor, a la música y el órgano.
Después de eso la verdad, empecé a practicar bastante. Y luego me fui a estudiar a París con dieciocho años y he tenido la suerte de trabajar con los mejores maestros de órgano que hay, después de haber cursado la carrera, he tenido la oportunidad de tocar en varias partes del mundo y ahora siendo organista de la Iglesia St. Eustache en París, que es una iglesia muy importante por el órgano. Desde el año pasado soy profesor de órgano en el Conservatorio Superior de París, en el que yo estudié.
¿Cree usted que se le debe dar más visibilidad a este instrumento? ¿Hay varios concursos para órgano? Este no es un instrumento muy común…
Sí, la verdad el órgano no es muy común por lo que la gente lo no conoce, y esto, debo decir, es porque los medios de comunicación, por ejemplo, no hablan suficiente de este instrumento, pero cada órgano tiene su propia vida y tiene mucho éxito. A decir verdad, así como para el piano, o como muchos otros instrumentos, hay varios concursos para órgano.
Estos concursos son la mejor forma de mostrarnos y ser reconocidos, además, también nos da la posibilidad de conocer nuevos instrumentos, conocer gente de la misma edad o incluso más jóvenes que están participando en el concurso y también nos da la posibilidad de trabajar nuestro en carácter, esa oportunidad de tocar en público; Si bien los concursos tienen preparada una programación, se debe saber manejar el tiempo y aprovechar todos los momentos que tenemos. Por esa razón es siempre una experiencia muy importante para que los jóvenes puedan tener acceso a esos concursos.
Usted empezó practicando no en un órgano sino con un piano, al final ya sabemos quién ganó… ¿cuál es la diferencia entre ambos instrumentos?
Para empezar hay que decir que el órgano es un instrumento de viento y un piano es un instrumento de cuerdas. Ya para ahondar un poco más, el piano tiene esa característica de ser un instrumento de percusión, porque su sonido se da gracias a un golpe a una cuerda, por su parte, el órgano funciona como un coro, muy similar a la voz humana. Es un viento que va por entre los tubos, esto hace que tenga más apertura, con formas y maneras de interpretarlo, y en ese orden de ideas tiene menos acento percusivo como lo puede tener el piano. Pero si tiene esa noción, el ser muy parecido a la voz.
Sabemos que usted tiene ese gusto por la improvisación y un gusto a las adaptaciones de películas mudas, ¿Por qué es tan importante la improvisación y cómo se complementa esto con estas películas?
La improvisación hace realmente parte de la tradición de tocar el órgano. Porque es una tradición que se ha perpetuado, sobre todo por la idea de la liturgia en las misas. Porque cuando tocas en una misa o un culto, no sabes cuánto tiempo vas a quedarte a tocar una obra, no sabes cuanto tiempo tienes. Así que la improvisación permite elegir exactamente el tiempo que necesitas para tocar y detenerte cuando toque detenerse.
A decir verdad esta tradición se ha transmitido de generación en generación, los músicos experimentados son los que más suelen improvisar. Y bueno, esto se une a la tradición también de incluirlo a una película muda, pues es una tradición muy antigua, mucho antes que incluyeran sonido y palabras en las películas, había siempre músicos que tocaban, interpretando obras que podrían ser eternas y duraban toda la película, pero había diferentes tradiciones.
Ahora vuelve nuevamente a posicionarse esa idea o tradición de volver a traer esas películas mudas, es siempre una experiencia muy particular, porque claro, tienes que empezar a interpretar, pero tienes que respetar la película que hay, no puedes elegir el tiempo, sino que la película te dice el tiempo que tienes que dar. También el carácter de la música que tocas, no lo puedes dirigir, lo tienes que respetar tal cual con lo que las imágenes te dictan, si, podríamos decir que es una improvisación, pero es más un enlace que se tiene que hacer entre la película y la música que interpretas.
¿Qué conoce hasta el momento sobre la Orquesta Filarmónica de Bogotá y que sintió cuando tocó con ellos?
Bueno, es realmente un placer haber recibido esa invitación para tocar con la Orquestra Filarmónica de Bogotá y puedo decir que después de un par de ensayos, estoy más que seguro de poder haber hecho una gran conexión para trabajar juntos. Precisamente, a ese concierto de Rheinberger la orquesta le ha dado un toque especial. Se ha sentido esa conexión con los músicos y con el director invitado (José Antonio Méndez) y la verdad es que creo que se puede sentir esa esa conexión que tenemos juntos.
Va a estrenar aquí en Colombia, junto a la Orquesta Filarmónica de Bogotá el Concierto No. 2 para Órgano y Orquesta de Josef Rheinberger ¿qué nos puede decir de este estreno que van a tener los bogotanos?
Es una obra que le da un papel protagónico al órgano, ya que no existen tantos conciertos de órgano junto a una orquesta. Además, hay que decir que no siempre es fácil tocar en una iglesia por la distancia que hay entre la orquesta y el órgano, pero aquí, en la Catedral Primada en Bogotá tenemos la suerte que el órgano está bastante cerca del coro y también bastante cerca de donde estará la Orquesta. Así qué este espacio da esa gran posibilidad de interpretar esos conciertos para órgano y orquesta. Y esta pieza, es una obra romántica, con toques muy interesantes que estoy seguro que la gente va a querer y conocer.