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Afirmaban las antiguas sagas nórdicas que los destellos que, en ocasiones, aparecían parpadeantes en el cielo acompañados de un estruendo eran provocados cuando un ser, sobre cuyos hombros recaía la justicia, el clima y la fertilidad, entre otros, agitaba su martillo en el cielo.
Más allá de donde el ojo humano puede ver, en donde el infinito azul celeste termina para develar sus misterios, Thor demostraba su grandeza iluminando y retumbando en los cielos, dando luz y movimiento a la tierra que habita el hombre. Hoy, aunque muchas de aquellas creencias mitológicas han sido encasilladas más en la fantasía que en la fe, Volvo, el fabricante de autos de origen sueco, conmemora sus tradiciones ancestrales en uno de sus productos más recientes.
De frente y con una baja luminosidad alrededor, dos martillos iluminan el camino del nuevo S60. Es esta figura, que se encuentra en los faros delanteros del carro, quizá una de las más llamativas y autóctonas propiedades de este sedán de gran tamaño.
Es un susurro del lujo sobre ruedas. Cuando la firma decidió actualizar su portafolio, dando un renovado aire a sus SUV (XC40, XC60 y XC90), el público se encontró con coches en el que la seguridad y el lujo pueden convivir en armonía. Con líneas deportivas, más suaves y menos agresivas, y un interior poco invasivo, con menos botones físicos y más asistencias electrónicas.
Alejado de todo lo que puede representar un carro aburrido, el más reciente lanzamiento que la marca trae al país alberga, en su versión T4, un motor a gasolina, turboalimentado, que se basa en un sistema de inyección directa de cuatro cilindros y 2,0 litros.
Basta ejercer una leve presión sobre el acelerador para ser participe de la dinámica del coche. Su potencia es de 190 caballos de fuerza (5.000 rpm) y el torque, entre las 1.700 y 4.000 rpm, es de 300 Nm.
Interior y asistencias
Su diseño no es una ilusión. Las amplias dimensiones exteriores del S60 (largo de 4,7 metros, 1,4 m de altura y 2 m de ancho, contando espejos), anuncian un espacioso habitáculo. Al igual que la plaza de copiloto, el asiento de conductor, eléctricamente ajustable, es confortable para una persona de 1,80 m, y a simple vista puede ajustarse a alguien de 10 o 15 centímetros más de altura.
Las sillas traseras conservan las características de las delanteras. Vale la pena mencionar que dos personas más pueden ubicarse de forma cómoda allí, pues el espacio del medio se ve reducido por la elevación del túnel de transmisión.
En diagonal al conductor, resalta una enorme pantalla táctil de nueve pulgadas, compatible con los principales sistemas operativos. Es ágil y permite hacer una revisión rápida de mapas y del manual de operación del carro. Así mismo, el panel de instrumentos es digital y tiene un tamaño de 12,3 pulgadas.
Tradicionalmente, Volvo ha sido reconocido por ofrecer vehículos seguros a sus clientes y el S60 no se queda atrás. Está dotado de airbags frontales, laterales y tipo cortina. La plataforma Euroncap califica a esta línea con cinco estrellas en este rubro.
Sobresalen asistencias al conductor como el parqueo semiautomático y el sistema de advertencia de cambio de carril, encargado de mantener el vehículo dentro de la línea vial girando el volante para mantenerlo en posición.
Precio y versiones
Por el momento, Volvo ya ofrece en sus vitrinas la versión T4 del S60; sin embargo, voceros de la marca anunciaron la llegada al país de la T8, una híbrida, que basa su propulsión en un motor turbo Supercharger Drive-E de 320hp y otro eléctrico de 87hp.
El Nuevo Volvo S60, que compite con modelos como el BMW Serie 3, el Audi A4 y el Mercedes-benz Clase C tiene un precio base de $149’990.000 y está disponible en colores “gris savile”, “rojo fusión”, “azul denim”, “gris osmo”, “negro onyx”, “plata brillante” y “blanco cristal”.
Nefernandez@elespectador.com