El espíritu emprendedor de los colombianos
No es fácil hacer empresa en el país. Sin embargo, es innegable que el talento y la creatividad sobresalen en quienes forman un emprendimiento.
Colombia hoy por hoy es una nación de emprendedores. El panorama actual da para pensar que el emprendimiento es una opción real y justificada para que millones de colombianos cumplan el sueño de crear empresa.
Justamente, en el más reciente informe del Global Entrepreneurship Monitor (GEM), publicado el pasado 5 de mayo de 2021, Colombia se ubicó en la cuarta posición del TEA entre 35 países que participaron en la encuesta a población adulta. Es decir, que en el país existen altas proporciones de adultos que afirman que hay buenas oportunidades para crear una empresa.
De acuerdo con cifras del Registro Único Empresarial y Social (RUES), que recoge información de las 57 cámaras de Comercio del país, entre enero y marzo de 2021 se crearon en el país 96.431 empresas, 9,3 % más que en el mismo período de 2020, cuando la cifra fue de 88.248 unidades productivas.
En 2020, a través de los diferentes programas e iniciativas de la entidad, impactamos a 4’553.179 emprendedores, empresarios y colombianos con ideas de negocios, en todas las regiones del país.
Tan solo en el 2020, se logró impactar más de 43.000 ciudadanos en todos los departamentos del país a través de festivales y espacios de mentalidad y cultura, generación de habilidades blandas y gestión empresarial, según información de iNNpulsa Colombia, la agencia de emprendimiento e innovación con la que cuenta el país y que fue desarrollado por el Gobierno Nacional.
Si bien siempre han existido dificultades para hacer empresa, un ecosistema idóneo para el emprendedor, entre otros, debe fomentar la cultura emprendedora, propiciar fuentes de financiación y facilitar el acceso a compras públicas.
Después de todos estos meses de pandemia, fortalecer el emprendimiento debe ser una labor constante. Estos son algunos ejemplos de emprendimientos colombianos que aportan y hacen crecer y ver a Colombia como una nación emprendedora.
Cocoah, la nueva forma de disfrutar del chocolate
Cocoah nació en medio de la pandemia. Un emprendimiento orgánico que inició con la venta de bombas de chocolate rellenas de masmelos y diferentes bebidas calientes. Entre noviembre y diciembre de 2020 este emprendimiento logró vender más de 4.200 chocolates en varios lugares de Bogotá, Armenia y Cali. Además, realizó entregas para grandes empresas como Coomeva, que adquirió el producto como regalo de Navidad para sus colaboradores. Al momento, la empresa ya tiene una cocina oculta, en la que despachan sus productos. Además, han desarrollado nuevas propuestas con bombonería fina que iniciará su lanzamiento en junio, cuando mostrarán su nueva imagen y productos a sus más de 3.200 seguidores en Instagram y 9.000 en Tik Tok.
Tributi, empleadora del talento joven
Esta “start-up” se encarga de digitalizar las declaraciones de renta en Colombia. En 2017 materializaron sus ideas y conocimientos, liderando la construcción de una plataforma que, sin capital externo ni presupuestos millonarios, un año después logra hacer historia, convirtiéndose en la primera empresa de Medellín en recibir apoyo de Y Combinator, la aceleradora de Silicon Valley y mentora de grandes casos de éxito como Airbnb, Dropbox y Rappi. En el 2019 fue reconocida por la revista “INC” como una de las 50 empresas que están cambiando el mundo. Hoy está conformada por un equipo humano donde el 97 % son menores de 35 años. Además, durante la temporada de declaraciones de renta en Colombia, ofrece empleos para más de 100 jóvenes, quienes apoyan las labores de soporte y resolución de problemas tributarios.
Domenica, tejidos 100 % colombianos
Los tan conocidos “hoodies”, un tipo de sacos con capucha y bolsillo, fueron los que las colombianas María Paula Ramón y María Carolina Gutiérrez comenzaron a importar para vender en el país a través de su marca Domenica. Con el tiempo se dieron cuenta, en parte por una convicción propia, de que en el país había textiles y mano de obra calificada para ofrecer un producto confeccionado 100 % con tejidos colombianos. Hoy su emprendimiento es un éxito en ventas a través de comercio electrónico. Nada más en los dos últimos años ya han llegado a ventas de $1.200 millones anuales, principalmente por la página web. Situación que les está dejando una utilidad de más del 50 %. Bavaria, Kellogg’s y Bayer son algunas de las marcas con las que han logrado tener licitaciones.
Asoagripespa, otra forma de pescar
La asociación tiene vinculadas a 40 personas víctimas del conflicto armado. Asoagripespa se dedica al procesamiento de pescado, promoviendo la pesca responsable, artesanal y el precio justo de la región. Entre los tratamientos especiales están el corte, empaque al vacío, etiquetado y comercialización del producto. Es bien sabido que una de las falencias que tienen las asociaciones de pescadores es la falta de la cadena de frío para conservar los productos capturados en el mar. Esta asociación ha venido trabajando desde hace 10 años en el fortalecimiento de sus asociados. Por lo general, el pescador artesanal pesca y como lo pesca lo vende. Esta asociación ha permitido vender en filetes, en postas, empacados al vacío, hacer chorizos de pescado, hamburguesas y nuggets, entre otros productos.
Colombia hoy por hoy es una nación de emprendedores. El panorama actual da para pensar que el emprendimiento es una opción real y justificada para que millones de colombianos cumplan el sueño de crear empresa.
Justamente, en el más reciente informe del Global Entrepreneurship Monitor (GEM), publicado el pasado 5 de mayo de 2021, Colombia se ubicó en la cuarta posición del TEA entre 35 países que participaron en la encuesta a población adulta. Es decir, que en el país existen altas proporciones de adultos que afirman que hay buenas oportunidades para crear una empresa.
De acuerdo con cifras del Registro Único Empresarial y Social (RUES), que recoge información de las 57 cámaras de Comercio del país, entre enero y marzo de 2021 se crearon en el país 96.431 empresas, 9,3 % más que en el mismo período de 2020, cuando la cifra fue de 88.248 unidades productivas.
En 2020, a través de los diferentes programas e iniciativas de la entidad, impactamos a 4’553.179 emprendedores, empresarios y colombianos con ideas de negocios, en todas las regiones del país.
Tan solo en el 2020, se logró impactar más de 43.000 ciudadanos en todos los departamentos del país a través de festivales y espacios de mentalidad y cultura, generación de habilidades blandas y gestión empresarial, según información de iNNpulsa Colombia, la agencia de emprendimiento e innovación con la que cuenta el país y que fue desarrollado por el Gobierno Nacional.
Si bien siempre han existido dificultades para hacer empresa, un ecosistema idóneo para el emprendedor, entre otros, debe fomentar la cultura emprendedora, propiciar fuentes de financiación y facilitar el acceso a compras públicas.
Después de todos estos meses de pandemia, fortalecer el emprendimiento debe ser una labor constante. Estos son algunos ejemplos de emprendimientos colombianos que aportan y hacen crecer y ver a Colombia como una nación emprendedora.
Cocoah, la nueva forma de disfrutar del chocolate
Cocoah nació en medio de la pandemia. Un emprendimiento orgánico que inició con la venta de bombas de chocolate rellenas de masmelos y diferentes bebidas calientes. Entre noviembre y diciembre de 2020 este emprendimiento logró vender más de 4.200 chocolates en varios lugares de Bogotá, Armenia y Cali. Además, realizó entregas para grandes empresas como Coomeva, que adquirió el producto como regalo de Navidad para sus colaboradores. Al momento, la empresa ya tiene una cocina oculta, en la que despachan sus productos. Además, han desarrollado nuevas propuestas con bombonería fina que iniciará su lanzamiento en junio, cuando mostrarán su nueva imagen y productos a sus más de 3.200 seguidores en Instagram y 9.000 en Tik Tok.
Tributi, empleadora del talento joven
Esta “start-up” se encarga de digitalizar las declaraciones de renta en Colombia. En 2017 materializaron sus ideas y conocimientos, liderando la construcción de una plataforma que, sin capital externo ni presupuestos millonarios, un año después logra hacer historia, convirtiéndose en la primera empresa de Medellín en recibir apoyo de Y Combinator, la aceleradora de Silicon Valley y mentora de grandes casos de éxito como Airbnb, Dropbox y Rappi. En el 2019 fue reconocida por la revista “INC” como una de las 50 empresas que están cambiando el mundo. Hoy está conformada por un equipo humano donde el 97 % son menores de 35 años. Además, durante la temporada de declaraciones de renta en Colombia, ofrece empleos para más de 100 jóvenes, quienes apoyan las labores de soporte y resolución de problemas tributarios.
Domenica, tejidos 100 % colombianos
Los tan conocidos “hoodies”, un tipo de sacos con capucha y bolsillo, fueron los que las colombianas María Paula Ramón y María Carolina Gutiérrez comenzaron a importar para vender en el país a través de su marca Domenica. Con el tiempo se dieron cuenta, en parte por una convicción propia, de que en el país había textiles y mano de obra calificada para ofrecer un producto confeccionado 100 % con tejidos colombianos. Hoy su emprendimiento es un éxito en ventas a través de comercio electrónico. Nada más en los dos últimos años ya han llegado a ventas de $1.200 millones anuales, principalmente por la página web. Situación que les está dejando una utilidad de más del 50 %. Bavaria, Kellogg’s y Bayer son algunas de las marcas con las que han logrado tener licitaciones.
Asoagripespa, otra forma de pescar
La asociación tiene vinculadas a 40 personas víctimas del conflicto armado. Asoagripespa se dedica al procesamiento de pescado, promoviendo la pesca responsable, artesanal y el precio justo de la región. Entre los tratamientos especiales están el corte, empaque al vacío, etiquetado y comercialización del producto. Es bien sabido que una de las falencias que tienen las asociaciones de pescadores es la falta de la cadena de frío para conservar los productos capturados en el mar. Esta asociación ha venido trabajando desde hace 10 años en el fortalecimiento de sus asociados. Por lo general, el pescador artesanal pesca y como lo pesca lo vende. Esta asociación ha permitido vender en filetes, en postas, empacados al vacío, hacer chorizos de pescado, hamburguesas y nuggets, entre otros productos.