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Deshuesar un pavo o pollo para rellenarlo puede parecer complicado al principio, pero con algo de práctica se vuelve un proceso sencillo. En Gastronomía y recetas de El Espectador, te explicamos cómo hacerlo paso a paso.
Prepara tus herramientas
Utiliza un cuchillo afilado (para deshuesar) y pinzas o tenazas para retirar los huesos pequeños. Asegúrate de tener una tabla de cortar grande y estable.
Retira las piernas y los muslos
Haz un corte entre el muslo y el cuerpo del ave y corta alrededor de la articulación de la pierna. Puedes doblar la pierna para ver mejor la articulación y cortarla. Repite con la otra pierna.
Desprende las alas
Realiza un corte en la base de las alas donde se unen al cuerpo. Corta alrededor de las articulaciones para retirarlas.
Deshuesa el cuerpo con cuidado
Haz un corte a lo largo de la columna vertebral y alrededor del esternón, separando la carne de los huesos sin perforar la piel. Usa un cuchillo para cortar los cartílagos y los tejidos conectivos.
Deshuesa las piernas y muslos (si es necesario)
Para quitar los huesos de los muslos, corta a lo largo del fémur y la tibia. Utiliza pinzas para retirar los huesos pequeños.
Mantén la piel intacta
Si prefieres que la piel quede como envoltura para el relleno, ten cuidado de no perforarla al retirar la carne. Esto ayudará a que el contenido se mantenga intacto.
Revisa y limpia
Antes de rellenar, asegúrate de que no queden fragmentos de hueso o cartílago en la carne.
Cierra el ave adecuadamente
Después de rellenar, cierra el ave con hilo de cocina o palillos, asegurándote de no sobrecargarla para evitar que se rompa durante la cocción.
Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) o al de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧