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Un poco de la historia de las salsas
El origen de las salsas se asocia con los romanos, ellos utilizaban “garum”, la salsa reina de la cocina romana, en todas sus propuestas gastronómicas, esta tenía una particularidad en esa época: se preparaba con intestinos de pescado y una fusión de especias que se fermentaban al sol, dejando como resultado una mezcla de sabores indescriptibles. Historiadores gastronómicos cuentan que las salsas eran las favoritas del emperador Domiciano, quien utilizaba las charlas políticas del momento para elegir la más conveniente a la hora de ofrecer banquetes en las diferentes épocas de su reinado.
Estas elegidas de la cocina, se caracterizan por ser una mezcla líquida que contiene ingredientes fríos o calientes, y se sirven como acompañante de platos fuertes o comidas rápidas como hamburguesas, pizzas, o perros calientes. Algunas son espesas y funcionan a la perfección como “condimentos líquidos para los alimentos”. Es importante resaltar que las salsas son la primera “prueba” para estudiantes de cocina, durante este proceso es una de las habilidades que deben desarrollar, para ofrecer a los comensales diferentes opciones de texturas, olores, colores, sabores y sensaciones.
Existe la salsa pesto, napolitana, carbonara, putanesca, amatriciana, roja, tártara, rosada y de tomate, solo por mencionar algunas.
Gastronomía: Griega.
Antoja a tus comensales con este sabor
- Tiempo de preparación: 15 minutos.
- Tiempo de cocción: 15 minutos.
- Porciones: 5.
Ingredientes
- 1 barra de bocadillo en cubos medianos
- 1 cebolla roja picada finamente
- 200 gramos de salsa de tomate
- 40 mililitros de salsa de humo
- 40 mililitros de salsa inglesa
- 80 mililitros de salsa de soya
- 30 mililitros de vinagre
- 100 mililitros de agua
- 60 gramos de azúcar
- Sal y pimienta al gusto
Preparación
Toma una olla y llévala al fuego. Añade la cebolla, la salsa o pasta de tomate, la salsa de humo, la salsa inglesa, el agua y deja cocinar un ratico a fuego bajo.
Adiciona la salsa de soya, vinagre, azúcar, bocadillo y deja cocinar hasta que el bocadillo se derrita. Agrega sal y pimienta al gusto y disfruta.
Ideal para acompañar carnes blancas como pollo, pescado o cerdo.
¡Trucos de la abuela!
Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) o al de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧