Esta es la receta para hacer pan “cascarita”

Un poco de la historia de este plato

Aunque el origen exacto del pan es desconocido, expertos en gastronomía aseguran que en Mesopotamia se cocía pan desde hace nueve mil años y que ya se utilizaba harina de todo tipo para llevarlo a las mesas. Su preparación se caracterizaba en esa época porque molían grano entre dos piedras, formando una masa delgada que se llevaba al fuego caliente para consumirse. Los ingredientes principales para su elaboración son la harina y el agua.

En Colombia el pan es uno de los productos más apetecidos por los comensales, surgiendo de su elaboración varios tipos dependiendo de la región del país que se visite, existe el casabe del Amazonas, de arroz de los Llanos Orientales, de maíz del altiplano cundiboyacense y el de coco, proveniente de la región Caribe, entre otros.

Preparación

Comienza llevando a un mesón la harina, forma un volcán y añade en el interior 1 taza de azúcar, 1 taza de sal, 1 taza de levadura seca,1 taza de agua tibia y 1 huevo.

Continúa integrando los ingredientes líquidos con los secos hasta formar una masa.

Cuando empieces a observar que la masa va quedando en su punto, agrega 2 pedazos grandes de mantequilla y amasa por unos minutos hasta que quede bien lisa.

Con la masa lista, espolvorea harina en un mesón y con un rodillo empieza a hacer un cuadrado para luego esparcir mantequilla por toda la masa.

Ahora dobla las puntas hacia el centro y estira a lo largo con la ayuda del rodillo para hacer un doblez simple.

Luego de esto, deja reposar unos minutos para volverlo a estirar y hacer el mismo doblez simple. Deja reposar unos 10 o 15 minutos.

Estira la masa y divídela en tiras iguales. Toma una de las tiras, estírala muy bien con las manos y enróllala sobre el dedo pulgar hasta formar un rollito grande.

Luego lleva los rollitos a una bandeja para que doblen su tamaño y una vez que están listos pincélalos con huevo y llévalos al horno hasta que se vean dorados.

Déjalos enfriar y estarán listos para disfrutar. ¡Deliciosos!

¡Trucos de la abuela!

Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) o al de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧

Un poco de la historia de este plato

Aunque el origen exacto del pan es desconocido, expertos en gastronomía aseguran que en Mesopotamia se cocía pan desde hace nueve mil años y que ya se utilizaba harina de todo tipo para llevarlo a las mesas. Su preparación se caracterizaba en esa época porque molían grano entre dos piedras, formando una masa delgada que se llevaba al fuego caliente para consumirse. Los ingredientes principales para su elaboración son la harina y el agua.

En Colombia el pan es uno de los productos más apetecidos por los comensales, surgiendo de su elaboración varios tipos dependiendo de la región del país que se visite, existe el casabe del Amazonas, de arroz de los Llanos Orientales, de maíz del altiplano cundiboyacense y el de coco, proveniente de la región Caribe, entre otros.

Preparación

Comienza llevando a un mesón la harina, forma un volcán y añade en el interior 1 taza de azúcar, 1 taza de sal, 1 taza de levadura seca,1 taza de agua tibia y 1 huevo.

Continúa integrando los ingredientes líquidos con los secos hasta formar una masa.

Cuando empieces a observar que la masa va quedando en su punto, agrega 2 pedazos grandes de mantequilla y amasa por unos minutos hasta que quede bien lisa.

Con la masa lista, espolvorea harina en un mesón y con un rodillo empieza a hacer un cuadrado para luego esparcir mantequilla por toda la masa.

Ahora dobla las puntas hacia el centro y estira a lo largo con la ayuda del rodillo para hacer un doblez simple.

Luego de esto, deja reposar unos minutos para volverlo a estirar y hacer el mismo doblez simple. Deja reposar unos 10 o 15 minutos.

Estira la masa y divídela en tiras iguales. Toma una de las tiras, estírala muy bien con las manos y enróllala sobre el dedo pulgar hasta formar un rollito grande.

Luego lleva los rollitos a una bandeja para que doblen su tamaño y una vez que están listos pincélalos con huevo y llévalos al horno hasta que se vean dorados.

Déjalos enfriar y estarán listos para disfrutar. ¡Deliciosos!

¡Trucos de la abuela!

Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) o al de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧