JUS Dipping: el restaurante que le rinde homenaje a los sándwiches en Colombia
La simplicidad es su receta principal. Con un enfoque en la calidad y el sabor, el establecimiento ubicado en la zona G de Bogotá ofrece solo tres opciones cuidadosamente seleccionadas para satisfacer a sus clientes: el clásico sándwich de roast beef; el de queso cheddar, y el de champiñones. Esta es su historia.
Tatiana Gómez Fuentes
Bogotá es una ciudad con un menú abierto que le ofrece a sus comensales una variedad de sabores para romper con la rutina y darle un toque de innovación a sus papilas gustativas. Ente sus calles habitan alternativas culinarias atractivas que, además de satisfacer paladares, son una transformación de desarrollo económico y social que habla de pluriculturalidad.
La capital colombiana “es de todos y de nadie” como se escucha por ahí en las bocas de los ciudadanos de a pie en conversaciones cotidianas. Y la verdad es que no están muy equivocados, sin embargo, también hay que decir que esto es lo que la hace tan especial, al menos en términos gastronómicos, que es lo que nos atañe en estas líneas.
Aquí se puede encontrar desde una tradicional garulla hasta un plato representativo francés; se recorren territorios en bocados de historia y se viven nuevas experiencias que presentan conceptos que recogen a algunos clásicos de la cocina que no pasan de moda, y que van más allá del significado de la comida casual, representada por hamburguesas, pizzas, perros calientes, choripanes, sándwiches e incluso empanadas.
Un menú de domingo
Andrés Rodríguez guarda en su memoria gustativa un sabor que reunía a su familia en la mesa todos los domingos a la hora del almuerzo. Una preparación que nació de las manos de su hermano mayor, Daniel, que siempre dio de qué hablar y que retó en varias ocasiones el paladar de su madre por su poca afinidad con las carnes rojas.
Se trataba de un sándwich roast beef que le hacía un homenaje a esta común y popular receta que tiene su origen en el siglo XVIII, gracias al aristócrata inglés, John Montagu, quien decidió incluir este plato en su menú para no ensuciarse los dedos mientras jugaba a las cartas.
Su elaboración es quizá una de las más sencillas de la culinaria, solo se necesitan dos rebanadas de pan que contienen diferentes ingredientes y que pueden llevarse a la mesa en menos de 10 minutos. Daniel Rodríguez sabía que más allá de tener una propuesta casera que le gustara a su hermano y sus padres, podría ser un buen pretexto para saborear una oportunidad en el sector gastronómico de Bogotá. Así que, inspirado por el french dip y el amor por los sándwiches de carne, decidió crear una franquicia junto a su hermano que trascendiera más allá de los típicos sándwiches que se encontraban en el mercado.
“Mi hermano y yo siempre hemos compartido una pasión por los sándwiches de carne, por eso siempre visitamos dos de nuestros restaurantes favoritos que tenían este concepto. Uno es en Nueva York, se llama 4 Charles, tiene los mejores sándwiches de roast beef, y otro en Los Ángeles, Philippe, el lugar por excelencia con la mejor experiencia de dipping de la ciudad. En uno de nuestros viajes, decidimos experimentar y fusionar estos dos conceptos que despertaron en nosotros un sinfín de sensaciones gracias al realce de los sabores, y así le dimos vida a JUS Dipping”, contó Andrés Rodríguez, a propósito de esta idea de negocio.
¡Home run de sabor!
Los sándwiches iban a ser sus mejores cómplices para emprender en Colombia, así que decidieron abrir las puertas de su restaurante hace pocos meses, con un nombre que expone la creatividad de estos dos hermanos, y que hace un homenaje a los jugos que se liberan cuando se cocina la carne para esta propuesta, fusionada con el arte de “dipear”, que está caracterizado por mojar un alimento en una salsa, ofreciendo bocados de frescura para sus comensales.
JUS Dipping es el nuevo espacio de comida que está ubicado en la zona G de Bogotá, arrancó con una inversión de 200 mil dólares y ofrece únicamente tres opciones a quienes lo visitan. La primera es un sándwich de roast beef acompañado de caldo de carne, que se destaca por su ternura y jugosidad; la segunda, un clásico culinario, una opción elaborada con queso cheddar para disfrutar con una buena sopa de tomate; y la tercera, es una alternativa donde los champiñones salteados se mezclan con un rico caldo de vegetales para descrestar en la mesa.
Cada uno de ellos tiene un pan diferente en su preparación, el de masa madre y la baguette destacan la suavidad y la crocancia en un solo plato. “Nosotros no queríamos tener 15 opciones de sándwiches, queríamos ir a la fija con tres sabores que estuvieran diseñados para el paladar colombiano. También creamos una receta para las personas que no consumen carne, y eso ha dejado muy buenos resultados. Además, acompañamos los sándwiches con papas fritas, y ¿a quién no le gustan?” (risas).
El sabor del futuro
Su relación con los productores locales es muy cercana. La carne con la que trabajan se la provee una persona que tiene una finca en Tabio, eso les garantiza calidad y les permite obtener un resultado importante en sus recetas, teniendo en cuenta que su proceso de elaboración es de 24 horas y que se hace a través de un termocirculador.
Esto, sumado a su “plus” de servir sus sándwiches en no menos de 10 minutos, hace que ya estén pensando en metas a muy corto plazo, como la de abrir otro punto físico, y crear dos cocinas ocultas en otros sectores de la ciudad.
El negocio colombiano tiene una receta ambiciosa en sus planes de expansión. Está buscando abrirse camino en ciudades como Bucaramanga, Cali y Medellín, entre otras, en los próximos cinco años, buscando fortalecer las economías locales y siendo un trampolín para microempresarios y emprendimientos que se verán beneficiados con una franquicia que ya ha generado más de 10 empleos directos e indirectos en la capital colombiana.
Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) o al de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧
Bogotá es una ciudad con un menú abierto que le ofrece a sus comensales una variedad de sabores para romper con la rutina y darle un toque de innovación a sus papilas gustativas. Ente sus calles habitan alternativas culinarias atractivas que, además de satisfacer paladares, son una transformación de desarrollo económico y social que habla de pluriculturalidad.
La capital colombiana “es de todos y de nadie” como se escucha por ahí en las bocas de los ciudadanos de a pie en conversaciones cotidianas. Y la verdad es que no están muy equivocados, sin embargo, también hay que decir que esto es lo que la hace tan especial, al menos en términos gastronómicos, que es lo que nos atañe en estas líneas.
Aquí se puede encontrar desde una tradicional garulla hasta un plato representativo francés; se recorren territorios en bocados de historia y se viven nuevas experiencias que presentan conceptos que recogen a algunos clásicos de la cocina que no pasan de moda, y que van más allá del significado de la comida casual, representada por hamburguesas, pizzas, perros calientes, choripanes, sándwiches e incluso empanadas.
Un menú de domingo
Andrés Rodríguez guarda en su memoria gustativa un sabor que reunía a su familia en la mesa todos los domingos a la hora del almuerzo. Una preparación que nació de las manos de su hermano mayor, Daniel, que siempre dio de qué hablar y que retó en varias ocasiones el paladar de su madre por su poca afinidad con las carnes rojas.
Se trataba de un sándwich roast beef que le hacía un homenaje a esta común y popular receta que tiene su origen en el siglo XVIII, gracias al aristócrata inglés, John Montagu, quien decidió incluir este plato en su menú para no ensuciarse los dedos mientras jugaba a las cartas.
Su elaboración es quizá una de las más sencillas de la culinaria, solo se necesitan dos rebanadas de pan que contienen diferentes ingredientes y que pueden llevarse a la mesa en menos de 10 minutos. Daniel Rodríguez sabía que más allá de tener una propuesta casera que le gustara a su hermano y sus padres, podría ser un buen pretexto para saborear una oportunidad en el sector gastronómico de Bogotá. Así que, inspirado por el french dip y el amor por los sándwiches de carne, decidió crear una franquicia junto a su hermano que trascendiera más allá de los típicos sándwiches que se encontraban en el mercado.
“Mi hermano y yo siempre hemos compartido una pasión por los sándwiches de carne, por eso siempre visitamos dos de nuestros restaurantes favoritos que tenían este concepto. Uno es en Nueva York, se llama 4 Charles, tiene los mejores sándwiches de roast beef, y otro en Los Ángeles, Philippe, el lugar por excelencia con la mejor experiencia de dipping de la ciudad. En uno de nuestros viajes, decidimos experimentar y fusionar estos dos conceptos que despertaron en nosotros un sinfín de sensaciones gracias al realce de los sabores, y así le dimos vida a JUS Dipping”, contó Andrés Rodríguez, a propósito de esta idea de negocio.
¡Home run de sabor!
Los sándwiches iban a ser sus mejores cómplices para emprender en Colombia, así que decidieron abrir las puertas de su restaurante hace pocos meses, con un nombre que expone la creatividad de estos dos hermanos, y que hace un homenaje a los jugos que se liberan cuando se cocina la carne para esta propuesta, fusionada con el arte de “dipear”, que está caracterizado por mojar un alimento en una salsa, ofreciendo bocados de frescura para sus comensales.
JUS Dipping es el nuevo espacio de comida que está ubicado en la zona G de Bogotá, arrancó con una inversión de 200 mil dólares y ofrece únicamente tres opciones a quienes lo visitan. La primera es un sándwich de roast beef acompañado de caldo de carne, que se destaca por su ternura y jugosidad; la segunda, un clásico culinario, una opción elaborada con queso cheddar para disfrutar con una buena sopa de tomate; y la tercera, es una alternativa donde los champiñones salteados se mezclan con un rico caldo de vegetales para descrestar en la mesa.
Cada uno de ellos tiene un pan diferente en su preparación, el de masa madre y la baguette destacan la suavidad y la crocancia en un solo plato. “Nosotros no queríamos tener 15 opciones de sándwiches, queríamos ir a la fija con tres sabores que estuvieran diseñados para el paladar colombiano. También creamos una receta para las personas que no consumen carne, y eso ha dejado muy buenos resultados. Además, acompañamos los sándwiches con papas fritas, y ¿a quién no le gustan?” (risas).
El sabor del futuro
Su relación con los productores locales es muy cercana. La carne con la que trabajan se la provee una persona que tiene una finca en Tabio, eso les garantiza calidad y les permite obtener un resultado importante en sus recetas, teniendo en cuenta que su proceso de elaboración es de 24 horas y que se hace a través de un termocirculador.
Esto, sumado a su “plus” de servir sus sándwiches en no menos de 10 minutos, hace que ya estén pensando en metas a muy corto plazo, como la de abrir otro punto físico, y crear dos cocinas ocultas en otros sectores de la ciudad.
El negocio colombiano tiene una receta ambiciosa en sus planes de expansión. Está buscando abrirse camino en ciudades como Bucaramanga, Cali y Medellín, entre otras, en los próximos cinco años, buscando fortalecer las economías locales y siendo un trampolín para microempresarios y emprendimientos que se verán beneficiados con una franquicia que ya ha generado más de 10 empleos directos e indirectos en la capital colombiana.
Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) o al de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧