La quintaesencia del Ródano

El seductor y legendario valle de Ródano, en el sureste francés, tiene poco que envidiarles a reverenciados fortines del buen vino como Burdeos, Borgoña y Champaña, cuyas peculiaridades ya desfilaron por aquí.

• Historia: el valle del Ródano es el menos francés, pues, a diferencia de los mencionados, sus orígenes no se remontan a la colonización romana, sino a los anteriores asentamientos griegos en el territorio.

Los griegos fueron responsables de introducir, hacia el siglo IV a. C., los primeros cultivos de Vitis vinifera. Los primeros en ingresar fueron colonizadores de origen rodiano (procedentes de la isla de Rodas), quienes comenzaron a bautizar todo lo que encontraban a su paso con apelativos derivados de su raíz etimológica. Así fue como le dieron el nombre al río y al valle circundante. Entre los 200 kilómetros que separan al norte del sur existe una marcada diferencia de temperaturas: el primero es frío, y el segundo, cálido y soleado. Estas condiciones prescriben el uso de las variedades más apropiadas, así como el estilo de los vinos.

Después, los romanos introdujeron técnicas y procesos para mejorar los resultados, pero, tras la caída de su imperio, la zona entró en desgracia y solo logró recuperarse en el siglo XIV, cuando el papado trasladó su sede de Roma a Aviñón. Hoy, el Ródano es un origen muy respetado en el universo del vino.

• Áreas y principales denominaciones. Ródano norte: Côt-Rôtie, Condrieu y Hermitage. Ródano sur: Châteauneuf-du-Pape, Lirac, Gigondas y Tavel.

• Variedades. Ródano norte: Syrah (tinto) y Viognier, Marssane y Rousanne (blancos). Ródano sur, Grenache, Mourvèdre y Syrah (tintos), y Grenache Blanc, Viognier, Marsanne y Rousanne (blancos). En el sur, la elaboración de tintos y blancos se basa en el concepto de mezcla. Châteauneuf-du-Pape, por ejemplo, utiliza unos trece cepajes, incluidos algunos blancos.

• Aromas y sabores: Syrah del Ródano norte: vino elegante, de sabor profundo, con reminiscencias a frambuesa, almizcle, humo y pimienta negra. Viognier del Ródano norte: vino perfumado, con recuerdos a maracuyá, durazno, jengibre y pasto. Grenache del Ródano sur: vino de estilo alcohólico y color moderado, con sugerencias a cereza agria, arándano, violeta y pimienta negra.

• En la mesa: el Syrah armoniza con cordero, carnes rojas grilladas, preparaciones con pimienta negra y platos condimentados con orégano, pimienta roja (cayena) y comino. El Grenache combina con cordero, pavo, guisos de larga cocción y preparaciones con tomate.

• Marcas más reconocidas: para el Syrah, Guigal, Paul Jaboulet, Chapoutier y Domain Guerin. Para el Viognier, Domaine Pierre Gaillard y Domaine André Perret. Para el Châteauneuf-du-Pape, Domaine du Pegau, Close des Papes y Château Rayas. Para el Grenache, Château Pesquié.

El seductor y legendario valle de Ródano, en el sureste francés, tiene poco que envidiarles a reverenciados fortines del buen vino como Burdeos, Borgoña y Champaña, cuyas peculiaridades ya desfilaron por aquí.

• Historia: el valle del Ródano es el menos francés, pues, a diferencia de los mencionados, sus orígenes no se remontan a la colonización romana, sino a los anteriores asentamientos griegos en el territorio.

Los griegos fueron responsables de introducir, hacia el siglo IV a. C., los primeros cultivos de Vitis vinifera. Los primeros en ingresar fueron colonizadores de origen rodiano (procedentes de la isla de Rodas), quienes comenzaron a bautizar todo lo que encontraban a su paso con apelativos derivados de su raíz etimológica. Así fue como le dieron el nombre al río y al valle circundante. Entre los 200 kilómetros que separan al norte del sur existe una marcada diferencia de temperaturas: el primero es frío, y el segundo, cálido y soleado. Estas condiciones prescriben el uso de las variedades más apropiadas, así como el estilo de los vinos.

Después, los romanos introdujeron técnicas y procesos para mejorar los resultados, pero, tras la caída de su imperio, la zona entró en desgracia y solo logró recuperarse en el siglo XIV, cuando el papado trasladó su sede de Roma a Aviñón. Hoy, el Ródano es un origen muy respetado en el universo del vino.

• Áreas y principales denominaciones. Ródano norte: Côt-Rôtie, Condrieu y Hermitage. Ródano sur: Châteauneuf-du-Pape, Lirac, Gigondas y Tavel.

• Variedades. Ródano norte: Syrah (tinto) y Viognier, Marssane y Rousanne (blancos). Ródano sur, Grenache, Mourvèdre y Syrah (tintos), y Grenache Blanc, Viognier, Marsanne y Rousanne (blancos). En el sur, la elaboración de tintos y blancos se basa en el concepto de mezcla. Châteauneuf-du-Pape, por ejemplo, utiliza unos trece cepajes, incluidos algunos blancos.

• Aromas y sabores: Syrah del Ródano norte: vino elegante, de sabor profundo, con reminiscencias a frambuesa, almizcle, humo y pimienta negra. Viognier del Ródano norte: vino perfumado, con recuerdos a maracuyá, durazno, jengibre y pasto. Grenache del Ródano sur: vino de estilo alcohólico y color moderado, con sugerencias a cereza agria, arándano, violeta y pimienta negra.

• En la mesa: el Syrah armoniza con cordero, carnes rojas grilladas, preparaciones con pimienta negra y platos condimentados con orégano, pimienta roja (cayena) y comino. El Grenache combina con cordero, pavo, guisos de larga cocción y preparaciones con tomate.

• Marcas más reconocidas: para el Syrah, Guigal, Paul Jaboulet, Chapoutier y Domain Guerin. Para el Viognier, Domaine Pierre Gaillard y Domaine André Perret. Para el Châteauneuf-du-Pape, Domaine du Pegau, Close des Papes y Château Rayas. Para el Grenache, Château Pesquié.