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Patricia Maestre es una mujer alta, de cabello encanecido, que siempre adorna con una sonrisa cálida su rostro. Todos los días tiene un delantal de colores atado a la cintura, y las manos y el corazón listos para transformar. Algunos dicen que todo lo que toca se vuelve social y que su vocación para servir es uno de los mejores platos que se sirven en Barranquilla.
En el colegio alfabetizó en barrios muy pobres y estando en la universidad, en Bogotá, se dedicó a hacer trabajos sociales los fines de semana. Recuerda con emoción que se sentía siempre muy complacida de ayudar a los demás, y que esa herencia que le dejó su abuela Paulina, fue una gran influencia para ella.“Mi abuela me llevaba a giras políticas por los municipios del Caribe y a algunos viajes cuando ejercía como embajadora ante la FAO, eso sirvió para que creciera en mí la vocación de servicio también”.
Maestre lleva el sabor en sus venas. Sus apellidos son de origen vallenato y los luce con responsabilidad y orgullo. Pedro Castro, Paulina Mejía, Casimiro Maestre y Delfina Pavajeau son sus abuelos. Las costumbres vallenatas la abrigaron desde temprana edad gracias a sus padres, y aunque vivía en Barranquilla, se siente honrada por vestirse de Caribe y tener una mezcla de varias culturas con una simbiosis entre ‘Curramba la Bella’ y la también llamada Ciudad de los Santos Reyes del Valle de Upar.
“Para Barranquilla, la reina del mar, donde yo dejé al pasar parte de mi vida”
Así como esta frase que sonaba en la voz de Rafael Orozco, del Binomio de Oro, se puede musicalizar la vida de esta comunicadora social que encontró en el periodismo gastronómico otra herramienta para divulgar su origen. Ella es la directora de Sabor Barranquilla, una de las ferias gastronómicas más importantes de Colombia, y también lidera la Cruz Roja del Atlántico, ambas, sus mejores “fogones” que cocinan la tradición y el empuje de su departamento.
“Recién nombrada presidenta de la Junta Directiva de la Cruz Roja, una amiga voluntaria me recordó las noches gastronómicas que se hacían por allá en los años 80 para conseguir fondos, entonces, se me ocurrió revivirlas y me encontré con que el evento daba para mucho más. La junta apoyó mi idea, hablamos con Fenalco Atlántico y así terminé dirigiendo un proyecto que se dio por generación espontánea”, mencionó entre risas y recordando la felicidad del momento y la ansiedad por el futuro, Patricia contó que todo esto se dio porque “suele caminar la vida inventando cosas”.
Ahora cierra los ojos, y con el sabor dulce de la satisfacción del deber cumplido, se da cuenta de que este año va a entregarle a la gente la edición número 17 de una fiesta de sabor que estará enfocada en “viajar, comer, y vivir”. Tres momentos donde la gastronomía es la brújula que enmarca destinos potentes que dan cuenta de la cultura local, la historia a través de un plato, el recorrido por diferentes espacios y la conexión con la tradición. Para la directora de Sabor Barranquilla, esta iniciativa es un viaje, cercano o lejano, hacia otras tierras y personas que se graban en la memoria en forma de experiencias. “Por eso, el turismo (viajar) y los valores culinarios (comer) nos transforman (vivir)”.
Sueños que se transformaron en experiencias
Después de dieciséis ediciones, son muchas las lecciones que Maestre ha tenido. Asegura con total certeza que este evento nunca será un “copia y pega” de los que ya han transitado por la región, sino que vive en constante transformación. Cada año muestra algo distinto y en efecto, ese es uno de sus atractivos, la capacidad de saber adaptarse a los cambios, ajustarse a las tendencias y atraer cada vez más sin perder la identidad.
De ahí que la cultura culinaria del Caribe, para ella, contribuya al fortalecimiento de la gastronomía colombiana en la vitrina mundial. “Vivo convencida de que el Caribe colombiano y su vasta diversidad culinaria son los mejores embajadores de nuestro país ante el mundo. Hay tantas historias y secretos detrás de los ingredientes y las preparaciones en manos de gente con influencias culturales tan distintas, que eso es lo que nos hace una región llena de magia y encanto para los visitantes que buscan que un destino les dé ese ‘algo’ que les haga sentir que su viaje es especial, único y fantástico”.
Y es que cada año se corrobora la magia de la diversidad de las cocinas que permean en la región y que hablan de desarrollo para los territorios que la componen. Patricia sabe por sus investigaciones y estudios que el Caribe es la mezcla de culturas no solo españolas, indígenas y africanas. Su cocina está impregnada por la migración italiana, siria-libanesa, palestina, judía, alemana y china, todas presentes de una u otra forma en lo que se expone sobre la mesa.
La comunidad, el ingrediente infaltable en Sabor Barranquilla
El Carnaval, el río y la gente son las mejores fusiones de un departamento que se ha visto beneficiado con el proyecto que hoy es realidad y que algún día soñó esta costeña. El Atlántico es la extensión de un evento local que deja recursos direccionados para apoyar algunos programas de la Cruz Roja, que ella también comanda.
La colombiana cuenta que durante muchos años y hasta que llegó la pandemia, pudieron sostener un comedor infantil que servía desayunos diarios a más de 200 niños de hasta cinco años de edad, y que a su vez destinaron algunas ganancias a su Centro Educativo Integral, un espacio que brinda atención, casi que uno a uno, a más de 100 niños con necesidades cognitivas especiales. “Sabor Barranquilla siempre tendrá muy arraigado el componente social que nos caracteriza y que contagia a todos los que hacen parte de su organización y su historia, sin la gente esto no tendría sentido”.
Por esta razón es que cada vez que tiene la oportunidad, trae a algún municipio de Colombia para que se siente en su mesa y en la de todos los amantes del buen comer. Mompox será el invitado a esta nueva travesía de sabor y pondrá la cocina de este rincón de Colombia en diferentes propuestas que reflejarán la vocación ganadera y la influencia del río Magdalena y las ciénagas de la depresión Camposina.
“Con Sabor Barranquilla tendremos la oportunidad de disfrutar de la butifarra y el chorizo momposinos, hechos de manera artesanal, junto a los casabitos, los dulces de limón, el queso de capa, y demás delicias. Cada uno hará presencia en la muestra comercial y en las tarimas del festival. El viaje gastronómico irá acompañado de la música de chandé y la filigrana que distinguen a Mompox como destino turístico, entre muchos otros tesoros que guarda esta grata tierra”.
Cocina al instante
Un plato que la lleve a su niñez
Arepuelas dulces recién salidas de la olla que nos llevaba mi abuelita en Valledupar tempranito en la mañana.
Su vallenato preferido
La muerte de Pedro Castro, de Rafael Escalona, El abrazo Guajiro, de Carlos Huertas y todos los que mencionan a mi abuelo… La tierra de Pedro Castro.
El último libro que leyó
Siempre leo varios al tiempo. Por un lado, en el club de lectura con mis amigas leímos recientemente “Lo que aprendí viviendo” de Eleanor Roosevelt y yo le sumé “Franklin and Eleanor: an extraordinary marriage” de Hazel Rowley. Una pareja fascinante.
Su mejor recuerdo de Bogotá
La independencia de elegir y el poder vivir fuera de mi casa.
Bollo de mazorca con queso, arepa e´ huevo o sancocho de chivo
Difícil decisión. ¡Próxima pregunta!
La receta para tener un corazón bondadoso con matices de humildad
En mi vida he conocido personas extraordinarias dedicadas al servicio desinteresado. He querido, en lo posible, imitarlas y tratar siempre de aprender de ellas, y ser consciente de que los privilegios y la buena fortuna nos llegan para devolverlos.
A qué le sabe Sabor Barranquilla
Por un lado, a muchas emociones positivas como la solidaridad, el cariño, la cercanía, la empatía y la alegría, pero también a comida rica de todas partes del Caribe que se preparan con amor y orgullo.
Cuando le digo Karim Ganem Maloof, ¿qué se le viene a la cabeza?
Un ser inolvidable que dejó huella.
Un sabor que defina su gestión en la Cruz Roja
Poder ayudar sabe muy bien, pero no todo es dulce, trabajar con los menos favorecidos a veces deja un sabor áspero cuando te das cuenta de que por mucho que ayudes, en ocasiones no puedes mejorar la vida de toda la gente que quisieras. Pero, no desfallecemos nunca en nuestro propósito de tener una mejor sociedad, somos obstinados.
Sus cantantes vallenatos favoritos
Soy fan número uno del gran Colacho Mendoza, ya fallecido, y de Almes Granados, ambos coronados como Rey de Reyes del Festival de la Leyenda Vallenata.
Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) o al de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧