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Un poco de la historia de este plato
El ají es originario de la zona de Bolivia y Perú. Se consume desde hace aproximadamente 7500 años. Es muy similar al pimentón y aunque no se iguala en su tamaño, su sabor es uno de los más apetecidos en la gastronomía mundial. Tiene variedad de colores entre ellos el rojo, naranja o amarillo trayendo consigo sabores más suaves o fuertes para el paladar del comensal. Son ideales para sazonar los alimentos y en ocasiones se convierte en el mejor aderezo para empandas, papas y sopas.
Existen alrededor de 25 especies y es uno de los mayores exponentes de la gastronomía de México y Perú, quienes además lideran sus propuestas incluyendo este ingrediente en helados y dulces. En Colombia es un acompañante ideal para guarniciones y carnes.
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Ají #1
Ingredientes
20 mililitros de vinagre
20 mililitros de agua
70 gramos de cebolla larga
14 gramos de ají triturado
12 gramos de sal
100 gramos de cilantro
Preparación
Iniciaremos cortando nuestra cebolla en trozos muy pequeños. La añadimos al ají triturado o la salsa de ají.
De la misma manera procedemos con el cilantro picándolo muy pequeño. Añádelo a la mezcla previa.
Después de esto disolvemos la sal en el vinagre con agua y lo añadimos al ají.
Mezcla todos los ingredientes y está listo.
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Ají #2
Ingredientes
20 mililitros de vinagre
20 mililitros de agua
70 gramos de cebolla larga
14 gramos de ají triturado
12 gramos de sal
100 gramos de cilantro
80 gramos de tomate
Preparación
Es el mismo procedimiento del ají anterior pero a este le vas a añadir tomate. Corta uno por la mitad y rállalo por la parte que no tiene cáscara. El sabor va a cambiar mucho solamente añadiéndole este ingrediente.
Ají #3
Ingredientes
4 gramos de pimienta cayena
80 gramos de sour cream (Puede ser suero costeño)
2 gramos de cebollín
70 gramos de pimentón
10 gramos de sal
Preparación
Pon un pimentón directo al fuego. Gíralo por todos lados hasta asegurar que quede lo más negro posible.
Luego déjalo reposar y llévalo directo al agua. Límpialo completamente, asegúrate de quitar todas las semillas y lo que no vayas a utilizar.
Procede a hacer julianas para picarlo muy pequeñito.
Una vez tengas una textura fina del pimentón, lo añades a la crema agria. Agrega los demás ingredientes: añade la sal, el cebollín y mezcla.
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