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Un poco de la historia de este plato
El beignet es un dulce que hace parte de la gastronomía francesa y que se asemeja mucho a los ya conocidos buñuelos. Se elaboran con una masa fermentada que posteriormente se fríe y deja como resultado un postre crocante y muy esponjoso en su interior. Aunque no se caracteriza por tener demasiado dulce, sí hace parte de la repostería ya que su plus diferencial es el azúcar glas que se le añade a la hora de servirlos.
Aunque la receta original ha sufrido algunas variaciones con el pasar del tiempo y se le han agregado ingredientes como la miel, en nuestra sección de Gastronomía y Recetas traemos una propuesta muy parecida a la original para que ustedes en sus casas se arriesguen y preparen este plato francés.
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INGREDIENTES
120 ml de leche tibia
60 gr de azúcar
7gr de levadura seca
1 cda de esencia de vainilla
1 huevo
50 gr de mantequilla a temperatura ambiente
330 gr de harina
Aceite para freír
Miel
Azúcar pulverizada
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PREPARACIÓN
Lo primero que debes hacer es activar la levadura seca en la leche tibia junto a una cucharadita de azúcar y mezcla bien.
En el bowl de la batidora mezcla los demás ingredientes. No olvides que en el bowl debes poner harina todo uso, azúcar, huevo, mantequilla y esencia de vainilla, cuando veas que la levadura ya se activó incorpórala a la mezcla anterior y bate.
El tiempo total en la batidora es de 10 minutos, si estás haciendo el proceso a mano tardará 20 minutos.
Cuando finalice el tiempo de amasado, transfiere la masa al mesón y continúa con el proceso 1 minuto más para formar una bolita y prepararla para fermentarla.
Pon la masa en un bowl engrasado con aceite de oliva y tápala con papel plástico para dejarla reposar durante mínimo 2 horas hasta que doble su tamaño.
Pasadas las dos horas enharina el mesón con poca harina para sacar la masa y que no se pegue. Tip: ponle harina por encima para que el rodillo se desplace más fácilmente.
Ahora, empieza a formar un rectángulo, aquí te recomiendo no dejar tan delgada la masa, lo ideal es que tenga más o menos 1 centímetro de grosor.
Inmediatamente corta tiras de más o menos 3 dedos de grosor y luego corta del lado contrario la masa para formar cuadraditos.
Utiliza bandejas con papel parafinado para poner los cuadritos y tápalos con papel plástico para dejarlos fermentar por mínimo 30 minutos más.
Una vez ya los beignets hayan crecido llévalos a aceite muy caliente, notarás que toman color y se inflan bastante rápido. Cuando los saques, ponlos en papel absorbente para quitar el exceso de aceite.
Decóralos con miel y azúcar pulverizada.
¡Trucos de la abuela!
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