Trucos para que los macarrones con queso te queden como de restaurante

El mac and cheese (macarrones con queso) se originó en Estados Unidos en el periodo de la Segunda Guerra Mundial, está clasificado dentro del mundo de las cazuelas y su característica principal es la salsa resultante de la pasta y la mezcla del queso, la cual deja una apariencia cremosa que se fusiona con los toppings que el comensal quiera agregar.

Es una de las recetas más populares y fáciles de hacer en la cocina, sin embargo, algunas veces su facilidad puede jugar malas pasadas haciendo que esta preparación quede seca, sin salsa o que en su defecto se utilice una pasta que no es la idónea para llevar este sabor a la mesa. Hoy en Gastronomía y recetas compartimos algunos trucos para que no se convierta en un “obstáculo” encender fogones y hacer esta delicia.

Elige la pasta adecuada

Evita utilizar tallarines o espaguetis tradicionales. La idea es que siempre utilices conchitas o coditos para que, a la hora de hacer la preparación, la salsa se adhiera al producto y cree una salsa consistente. Recuerda que este plato se caracteriza por ser cremosa, no líquida y en eso influye mucho el tipo de pasta que uses.

Disminuye el tiempo de cocción de la pasta

Esta receta requiere cocinarse constantemente, así que la sugerencia es que la pasta quede al dente, no importa si queda un poquito cruda, como vas a agregar queso e incluso crema bechamel, a la hora de darle cocción a las otras preparaciones, se fusionará para darle el toque perfecto a la preparación.

Para destacar: La economista que dejó su trabajo y montó una fábrica de pasta fresca y natural

El queso es muy importa

Aquí hay que aplicar una estrategia que favorezca tu receta. Mezcla un buen queso cheddar con uno mozzarella, ambos serán protagonistas en esta preparación. Lo que va a quedar como resultado es una fusión que creará humedad y se fundirá para resaltar sabores.

Usa pan para gratinar

¡Sí! El pan rallado es tu aliado para esta receta. Esto puede darle la crocancia que deseas a tus macarrones con queso. A la hora de llevar la propuesta al horno, puedes poner una capa de pan rallado, una capa de queso y repites el proceso hasta que tu refractaria quede a tope, dejando como resultado un plato con una costra llena de sabor.

No pierdas de vista: Receta para preparar macarrones con bechamel de queso

Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧

El mac and cheese (macarrones con queso) se originó en Estados Unidos en el periodo de la Segunda Guerra Mundial, está clasificado dentro del mundo de las cazuelas y su característica principal es la salsa resultante de la pasta y la mezcla del queso, la cual deja una apariencia cremosa que se fusiona con los toppings que el comensal quiera agregar.

Es una de las recetas más populares y fáciles de hacer en la cocina, sin embargo, algunas veces su facilidad puede jugar malas pasadas haciendo que esta preparación quede seca, sin salsa o que en su defecto se utilice una pasta que no es la idónea para llevar este sabor a la mesa. Hoy en Gastronomía y recetas compartimos algunos trucos para que no se convierta en un “obstáculo” encender fogones y hacer esta delicia.

Elige la pasta adecuada

Evita utilizar tallarines o espaguetis tradicionales. La idea es que siempre utilices conchitas o coditos para que, a la hora de hacer la preparación, la salsa se adhiera al producto y cree una salsa consistente. Recuerda que este plato se caracteriza por ser cremosa, no líquida y en eso influye mucho el tipo de pasta que uses.

Disminuye el tiempo de cocción de la pasta

Esta receta requiere cocinarse constantemente, así que la sugerencia es que la pasta quede al dente, no importa si queda un poquito cruda, como vas a agregar queso e incluso crema bechamel, a la hora de darle cocción a las otras preparaciones, se fusionará para darle el toque perfecto a la preparación.

Para destacar: La economista que dejó su trabajo y montó una fábrica de pasta fresca y natural

El queso es muy importa

Aquí hay que aplicar una estrategia que favorezca tu receta. Mezcla un buen queso cheddar con uno mozzarella, ambos serán protagonistas en esta preparación. Lo que va a quedar como resultado es una fusión que creará humedad y se fundirá para resaltar sabores.

Usa pan para gratinar

¡Sí! El pan rallado es tu aliado para esta receta. Esto puede darle la crocancia que deseas a tus macarrones con queso. A la hora de llevar la propuesta al horno, puedes poner una capa de pan rallado, una capa de queso y repites el proceso hasta que tu refractaria quede a tope, dejando como resultado un plato con una costra llena de sabor.

No pierdas de vista: Receta para preparar macarrones con bechamel de queso

Si te gusta la cocina y eres de los que crea recetas en busca de nuevos sabores, escríbenos al correo de Edwin Bohórquez Aya (ebohorquez@elespectador.com) o al de Tatiana Gómez Fuentes (tgomez@elespectador.com) para conocer tu propuesta gastronómica. 😊🥦🥩🥧