Informe revela las amenazas y violencias que sufren líderes LGBTIQ+ en Colombia
Desplazamiento forzado y exilio, violencia sexual, lesiones personales e intento de secuestro son algunas de las violencias conexas que enfrentan las y los lideres LGBTIQ+ amenazados en Colombia.
Colombia Diversa
“Maricas no vamos a dejar llegar al Concejo”, fue uno de las mensajes amenazantes que recibió en agosto de 2023 Patricia Galindo*, lideresa lesbiana de la organización Manglaria Diversa y candidata al Concejo de Magüí Payán, Nariño. Aunque los hostigamientos que recibió ella, su familia y comitiva de campaña fueron denunciados ante la Fiscalía, la falta de medidas de protección y el incremento de las amenazas, dieron como resultado el retiro de su campaña y el desplazamiento forzado de su familia y varias personas LGBTIQ+ involucradas en el proyecto político.
El caso de Patricia ejemplifica el riesgo permanente al que se enfrentan las personas LGBTIQ+ defensoras de derechos humanos al participar e incidir en la política colombiana. Riesgos que combinan la discriminación por su identidad sexual y de género, y la estigmatización por ejercer el liderazgo social.
Lea aquí también: Candidata lesbiana al Concejo de Magüí Payán, Nariño, denuncia amenazas de muerte
En su último informe, la organización Colombia Diversa registró 203 casos de amenazas contra personas LGBTIQ+ perpetrados en 2023, de los cuales 67 corresponden a hostigamientos contra personas defensoras de derechos humanos. Estos hechos ocurrieron en 22 departamentos del país, siendo Bogotá y Santander los que registraron el mayor número de casos (7 y 6, respectivamente), seguidos de Valle del Cauca, Boyacá y Norte de Santander, con 5 casos cada uno.
Además de evidenciarse que las amenazas contra líderes sociales LGBTIQ+ son un fenómeno generalizado en Colombia, el hecho de que 15 de estos hechos ocurrieran en territorios donde la Defensoría del Pueblo ya había emitido Alertas Tempranas sobre los riesgos particulares para esta población, señala la falta de respaldo e incidencia de estas advertencias en los planes de seguridad locales, lo que terminó facilitando la consumación de los hechos.
Tal como ocurrió con Yesenia*, lideresa lesbiana de Barrancabermeja, quien en julio de 2023 recibió una carta amenazante de actores armados, señalando tanto su orientación sexual como su labor comunitaria. Este y otros hechos contra personas LGBTIQ+ ya habían sido mencionados en la Alerta Temprana 027 de 2022, que advertía sobre la expansión de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia en Magdalena Medio y la comisión de “homicidios ejemplarizantes” contra personas de poblaciones vulnerables, como la LGBTIQ+.
“Dimos la orden que lo mataran porque no queremos más locas”. Mensajes, llamadas e intimidaciones contra las y los líderes LGBTIQ+.
Desde 2019, Ramiro*, líder social de San Martín, Cesar, ha sido víctima de constantes amenazas de muerte por su orientación sexual y su liderazgo político, lo han llevado a sufrir varios desplazamientos: “No vamos a tolerar maricas en el pueblo, ustedes son una deshonra (…) lo mejor es que se vaya antes que lo matemos”. En 2023, tras un intento de agresión física perpetrado por desconocidos que intentaron herirlo con palos y piedras, Ramiro decidió exiliarse del país.
Este caso muestra que las amenazas contra las y los líderes LGBTIQ+ se llevan a cabo mediante diversos métodos. La investigación realizada por Colombia Diversa esclareció que 21 de las victimizaciones fueron a través de intimidaciones directas. Luego, se registraron 12 amenazas a través de llamadas telefónicas, mensajes de texto y redes sociales, como lo expone el caso de Patricia. Finalmente, se documentaron 7 casos en los que se distribuyeron panfletos amenazantes, algunos con los nombres de las víctimas.
De esta manera, según el informe de la organización, la violencia contra las defensoras LGBTIQ+ tiene una connotación “ejemplificante”, lo que significa que no solo la víctima directa la sufre, sino también todas las personas que se identifican con su liderazgo y temen por su integridad. Así, los 7 casos de circulación de panfletos provocaron un miedo generalizado en numerosas personas, quienes decidieron renunciar a visibilizarse y a participar en procesos comunitarios. Entre estos casos, destaca el panfleto dirigido a los miembros de la Mesa Distrital LGBTIQ+ de jóvenes estudiantes, reportado por la Defensoría del Pueblo de Bogotá.
Como muestra el caso de Patricia, muchas de las amenazas incluyen otras formas de violencia. De acuerdo con el informe, se registraron 12 casos de hostigamiento que resultaron en lesiones personales, 11 casos que provocaron el desplazamiento forzado de las víctimas, 10 donde hubo violencia verbal relacionada con la identidad sexual y de género, 4 casos de robo de bienes, 3 amenazas que involucraron intentos de homicidio, y 2 casos de extorsión. Además, se reportaron casos de confinamiento, violencia sexual, intento de secuestro, retención ilegal y exilio, con un caso para cada uno de estos.
Vea aquí: Aún existen barreras para garantizar los derechos LGBTIQ+ en Colombia
“Cuídese o lo acostamos”. Grupos armados y otros responsables de las amenazas a líderes LGBTIQ+.
En mayo de 2023, Andrey Herrera, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Pastranita en Bogotá, recibió un panfleto amenazante por parte de las Águilas Negras donde advertían que lo mataría si no suspendía sus labores comunitarias y se desplazaba. “Gamín revolucionario, drogadicto y homosexual que fue elegido por los sapos de Pastranita (…), lo mejor es que se vaya del barrio (…) nos está quitando los chinos, dizque para la Universidad y allá no es la guerra, necesitamos gente en el monte”, se puede leer en la misiva que Andrey compartió frente al Concejo de Bogotá, señalando que tuvo que permanecer encerrado en el salón comunal del barrio por dos días.
Al igual que el caso de Andrey, 16 amenazas contra líderes sociales LGBTIQ+ son adjudicadas a grupos armados (mayoritariamente, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, el ELN y las Águilas Negras). Se suman dos hechos atribuidos a bandas delincuenciales (El Tren de Aragua y Tren de los Alemanes Ak 47).
Frente a todo este panorama, la organización señala que las vidas de las personas LGBTIQ+ que defienden los derechos humanos están en peligro. Por eso, “es necesario analizar la discriminación en su violencia y desarrollar estrategias para la promoción y fortalecimiento de iniciativas organizacionales LGBTIQ+ para garantizar la democracia”, concluye Marcela Sánchez Buitrago, directora de Colombia Diversa.
*Los nombres de estas personas han sido modificados para proteger su identidad.
“Maricas no vamos a dejar llegar al Concejo”, fue uno de las mensajes amenazantes que recibió en agosto de 2023 Patricia Galindo*, lideresa lesbiana de la organización Manglaria Diversa y candidata al Concejo de Magüí Payán, Nariño. Aunque los hostigamientos que recibió ella, su familia y comitiva de campaña fueron denunciados ante la Fiscalía, la falta de medidas de protección y el incremento de las amenazas, dieron como resultado el retiro de su campaña y el desplazamiento forzado de su familia y varias personas LGBTIQ+ involucradas en el proyecto político.
El caso de Patricia ejemplifica el riesgo permanente al que se enfrentan las personas LGBTIQ+ defensoras de derechos humanos al participar e incidir en la política colombiana. Riesgos que combinan la discriminación por su identidad sexual y de género, y la estigmatización por ejercer el liderazgo social.
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En su último informe, la organización Colombia Diversa registró 203 casos de amenazas contra personas LGBTIQ+ perpetrados en 2023, de los cuales 67 corresponden a hostigamientos contra personas defensoras de derechos humanos. Estos hechos ocurrieron en 22 departamentos del país, siendo Bogotá y Santander los que registraron el mayor número de casos (7 y 6, respectivamente), seguidos de Valle del Cauca, Boyacá y Norte de Santander, con 5 casos cada uno.
Además de evidenciarse que las amenazas contra líderes sociales LGBTIQ+ son un fenómeno generalizado en Colombia, el hecho de que 15 de estos hechos ocurrieran en territorios donde la Defensoría del Pueblo ya había emitido Alertas Tempranas sobre los riesgos particulares para esta población, señala la falta de respaldo e incidencia de estas advertencias en los planes de seguridad locales, lo que terminó facilitando la consumación de los hechos.
Tal como ocurrió con Yesenia*, lideresa lesbiana de Barrancabermeja, quien en julio de 2023 recibió una carta amenazante de actores armados, señalando tanto su orientación sexual como su labor comunitaria. Este y otros hechos contra personas LGBTIQ+ ya habían sido mencionados en la Alerta Temprana 027 de 2022, que advertía sobre la expansión de las Autodefensas Gaitanistas de Colombia en Magdalena Medio y la comisión de “homicidios ejemplarizantes” contra personas de poblaciones vulnerables, como la LGBTIQ+.
“Dimos la orden que lo mataran porque no queremos más locas”. Mensajes, llamadas e intimidaciones contra las y los líderes LGBTIQ+.
Desde 2019, Ramiro*, líder social de San Martín, Cesar, ha sido víctima de constantes amenazas de muerte por su orientación sexual y su liderazgo político, lo han llevado a sufrir varios desplazamientos: “No vamos a tolerar maricas en el pueblo, ustedes son una deshonra (…) lo mejor es que se vaya antes que lo matemos”. En 2023, tras un intento de agresión física perpetrado por desconocidos que intentaron herirlo con palos y piedras, Ramiro decidió exiliarse del país.
Este caso muestra que las amenazas contra las y los líderes LGBTIQ+ se llevan a cabo mediante diversos métodos. La investigación realizada por Colombia Diversa esclareció que 21 de las victimizaciones fueron a través de intimidaciones directas. Luego, se registraron 12 amenazas a través de llamadas telefónicas, mensajes de texto y redes sociales, como lo expone el caso de Patricia. Finalmente, se documentaron 7 casos en los que se distribuyeron panfletos amenazantes, algunos con los nombres de las víctimas.
De esta manera, según el informe de la organización, la violencia contra las defensoras LGBTIQ+ tiene una connotación “ejemplificante”, lo que significa que no solo la víctima directa la sufre, sino también todas las personas que se identifican con su liderazgo y temen por su integridad. Así, los 7 casos de circulación de panfletos provocaron un miedo generalizado en numerosas personas, quienes decidieron renunciar a visibilizarse y a participar en procesos comunitarios. Entre estos casos, destaca el panfleto dirigido a los miembros de la Mesa Distrital LGBTIQ+ de jóvenes estudiantes, reportado por la Defensoría del Pueblo de Bogotá.
Como muestra el caso de Patricia, muchas de las amenazas incluyen otras formas de violencia. De acuerdo con el informe, se registraron 12 casos de hostigamiento que resultaron en lesiones personales, 11 casos que provocaron el desplazamiento forzado de las víctimas, 10 donde hubo violencia verbal relacionada con la identidad sexual y de género, 4 casos de robo de bienes, 3 amenazas que involucraron intentos de homicidio, y 2 casos de extorsión. Además, se reportaron casos de confinamiento, violencia sexual, intento de secuestro, retención ilegal y exilio, con un caso para cada uno de estos.
Vea aquí: Aún existen barreras para garantizar los derechos LGBTIQ+ en Colombia
“Cuídese o lo acostamos”. Grupos armados y otros responsables de las amenazas a líderes LGBTIQ+.
En mayo de 2023, Andrey Herrera, presidente de la Junta de Acción Comunal del barrio Pastranita en Bogotá, recibió un panfleto amenazante por parte de las Águilas Negras donde advertían que lo mataría si no suspendía sus labores comunitarias y se desplazaba. “Gamín revolucionario, drogadicto y homosexual que fue elegido por los sapos de Pastranita (…), lo mejor es que se vaya del barrio (…) nos está quitando los chinos, dizque para la Universidad y allá no es la guerra, necesitamos gente en el monte”, se puede leer en la misiva que Andrey compartió frente al Concejo de Bogotá, señalando que tuvo que permanecer encerrado en el salón comunal del barrio por dos días.
Al igual que el caso de Andrey, 16 amenazas contra líderes sociales LGBTIQ+ son adjudicadas a grupos armados (mayoritariamente, las Autodefensas Gaitanistas de Colombia, el ELN y las Águilas Negras). Se suman dos hechos atribuidos a bandas delincuenciales (El Tren de Aragua y Tren de los Alemanes Ak 47).
Frente a todo este panorama, la organización señala que las vidas de las personas LGBTIQ+ que defienden los derechos humanos están en peligro. Por eso, “es necesario analizar la discriminación en su violencia y desarrollar estrategias para la promoción y fortalecimiento de iniciativas organizacionales LGBTIQ+ para garantizar la democracia”, concluye Marcela Sánchez Buitrago, directora de Colombia Diversa.
*Los nombres de estas personas han sido modificados para proteger su identidad.