El estudio se centró en el impacto del tono de la voz en la autopercepción de la identidad de género de mujeres trans.
Foto: Gustavo Torrijos
Para una mujer trans, algo tan sencillo como contestar una llamada telefónica y que la persona al otro lado de la línea responda “hola, señor, ¿cómo está?”, puede generar mucha frustración y un impacto negativo en su salud mental. Para muchas, la voz no es solo clave para ser reconocidas en la sociedad como mujeres, sino también tiene un impacto en la forma en que ellas se autoperciben. Esta feminización de sus voces constituye una parte fundamental de los tratamientos de afirmación de su identidad de género.
Por Mariana Escobar Bernoske
Comunicadora social con énfasis en periodismo y producción sonora/radiofónica. Ha participado en investigaciones sobre Derechos Humanos desde una perspectiva feminista y de género. Tiene estudios en el Centro Latinoamericano de Derechos Humanos y la Universidad de Strathclyde.mescobarb@elespectador.com
Temas recomendados:
Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación