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Stefanny Barranco, una mujer de 32 años y madre de dos niños, fue asesinada este miércoles 29 de mayo a manos de su expareja sentimental, Iván José de la Rosa. Según relatos de los testigos, el feminicidio tuvo lugar hacia las 5:15 de la tarde, durante la jornada laboral de Barranco. El sospechoso llegó al centro comercial Santafé, al norte de Bogotá, en una motocicleta, vistiendo una chaqueta y pantalón negro. Una vez ingresó al local comercial de Imusa, atacó a la mujer con un objeto cortopunzante que, aparentemente, portaba consigo, según informes de las autoridades.
La mayor Viviana Alvarado, comandante de las Patrullas Púrpura de la Policía Metropolitana de Bogotá, informó que el agresor atacó a Stefanny, luego de una discusión, hasta provocarle la muerte. Después del ataque, el presunto feminicida se propinó heridas en el pecho con la misma arma. Al llegar las autoridades al lugar de los hechos, fue capturado y trasladado a la clínica más cercana, en donde valoraron la gravedad de sus heridas, aclaró Alvarado.
El centro comercial aseguró que activó los protocolos correspondientes cuando ocurrieron los hechos. “Se dio aviso inmediato a las autoridades competentes, quienes hicieron presencia en el Centro Comercial a las 5:14 p. m. tomando el control de la situación”, afirmó en el comunicado que publicó en sus redes sociales.
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Sin embargo, este no es el primer caso de feminicidio que ocurre en el centro comercial Santafé. El 10 de abril de 2017, Claudia Giovanna Rodríguez Altuzarra fue asesinada por su expareja, Julio Alberto Reyes Andrade. Los hechos también ocurrieron en su lugar de trabajo, ópticas GMO, donde el agresor la confrontó y acabó con su vida utilizando un arma de fuego, propinándole dos disparos en el abdomen y uno en la cabeza.
Otro de los casos de feminicidio ocurridos en lugares comerciales abiertos al público fue el de Erika Aponte, en el centro comercial Unicentro, durante la celebración del Día de la Madre en 2023. Su expareja, Cristian Camilo Rincón, la acosó en su lugar de trabajo, una pizzería, y la asesinó con un arma de fuego, disparándole en dos ocasiones. Después, él se suicidaría.
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Estos tres casos se suman a la lista de feminicidios ocurridos en comercios. El 24 de febrero de este año, Julián Avellaneda asesinó a su expareja Estefany Katherine Bocanegra en un comercio de Ibagué, Tolima. El 15 de marzo de 2023, Luis Carlos Aguirre asesinó a su expareja Maryori Muñoz en el centro comercial Mayorca de Sabaneta, Antioquia. Y, el 31 de marzo de 2012, Javier Giovanny Ceballos asesinó a su expareja Viviana Paola Urrego, en el centro comercial Gran Estación, en el noroccidente de Bogotá.
Con estos antecedentes, hay más preguntas que respuestas sobre los protocolos que los centros comerciales adoptan para las violencias basadas en género y la prevención de feminicidios. Pues en el caso de Stefanny Barranco, el centro comercial Santafé tildó la situación como “un hecho aislado y puntual entre dos personas, de las cuales una de ellas falleció”.
En entrevista con El Espectador, Edna Lucía Murillo Ramírez, referenta de la Secretaría de la Mujer para la localidad de los Mártires y vocera de la campaña en centros comerciales “Te Queremos Viva y Diva”, asegura que estos establecimientos son lugares públicos y a la vez privados, en donde las trabajadoras están expuestas a todo el público, incluyendo a los agresores. “Identificamos que algunos centros comerciales no tienen sinergias entre los trabajadores y los equipos de seguridad para identificar el perfil o el comportamiento de una persona que llega a estos lugares con la intención de agredir”, añadió.
Según Murillo, a raíz del feminicidio de Erika Aponte, la Secretaría de la Mujer de Bogotá diseñó una campaña que capacita a comerciantes, equipos de seguridad y empleadas de estos establecimientos en la prevención de violencias basadas en género. Sin embargo, agrega que “lo que falta es una vinculación decisiva por parte del sector privado. Que los centros comerciales entiendan que, por su condición misma, hay una alta vulnerabilidad para que estas situaciones ocurran, y que es necesario tomar medidas preventivas”.
El caso de Stefanny Barranco y otras mujeres asesinadas en comercios, reflejan por qué el feminicidio surge de una violencia estructural contra la mujer en la sociedad colombiana. Según algunos expertos, el hecho de que esto ocurra en lugares tan concurridos, evidencia la idea de que las mujeres son propiedad de los hombres y que son ellos los que deciden sobre sus vidas. Uno de los móviles del delito de feminicidio.
Karol Martínez, directora de la Clínica de Violencia Intrafamiliar de la Universidad del Rosario, ha destacado en anteriores ocasiones que los feminicidios que tienen lugar en espacios públicos a menudo reflejan la intensidad de la rabia experimentada por el perpetrador, “es un contexto muy violento, de ‘no me importa que me capturen porque tú eres mi mujer y tengo el derecho’, lo que condiciona significativamente la falta de intervención por parte de quienes presencian el hecho”, señaló para El Espectador.
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Así mismo, Carlota Alméciga, socióloga especialista en asuntos de género y política social, ha dicho a este diario que todavía persiste en la sociedad un imaginario de que las violencias basadas en género, e incluso los feminicidios, son un asunto que se trata en privado y por eso hay una dificultad muy grande en la prevención e intervención en espacios públicos.
De acuerdo a la procuradora Margarita Cabello, el feminicidio de Stefanny Barranco se une “a las alarmantes agresiones contra la mujer reportadas durante el transcurso del año 2024″. La funcionaria hace referencia a que, desde el 1 de enero hasta el 30 de mayo del presente año, los medios de comunicación han documentado un total de 90 feminicidios.
Específicamente en Bogotá, las cifras del Ministerio del Interior, indican que en ese mismo periodo se han registrado seis casos de feminicidio.
En Colombia, prácticamente a diario, una mujer es asesinada, pero el país carece de una única cifra oficial que refleje el número exacto de feminicidios. Según el Observatorio de Feminicidios Colombia de la Red Feminista Antimilitarista, el año pasado se contabilizaron 520 casos de feminicidios en todo el país. Carol Rojas, analista del observatorio, destaca que entre 40 y 60 de estos casos se produjeron en espacios públicos.
¿Dónde puedo recibir ayuda ante un caso de violencia de género?
Línea única de atención de emergencias 123, al comunicarse solicitar especialista en temas de género.
Línea Nacional 155 para recibir orientación si estás siendo víctima de alguna violencia basada en género.
Red Solidaria de Mujeres: WhatsApp 3223328655.
Línea de Protección a Niños, Niñas y Adolescentes: 141. WhatsApp: 3202391685 – 3208655450 – 3202391320.
Línea Fiscalía General de la Nación: 122, para presentación de denuncias de violencia intrafamiliar, violencias basadas en género y violencia sexual.
Línea Púrpura en Bogotá: 018000112137, número gratuito desde teléfono fijo o celular. WhatsApp 3007551846
