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La reivindicaciónde los escombros

En su asamblea, la Andi le hizo un reconocimiento a Residuos de Construcción y Demolición (RC&D). Grandes empresas del sector se interesan en la idea.

Ricardo Gutiérrez Zapata
23 de agosto de 2008 - 12:01 a. m.

Todo es particular en RC&D. Su nombre proviene de Residuos de Construcción y Demolición, sus directivos no pasan de los 23 años y su labor consiste en reutilizar, en las mismas obras, los escombros que se producen con las demoliciones.

Con el auge de las renovaciones urbanas que vive el país, uno de los principales obstáculos que enfrentaban los constructores y las propias administraciones locales era la disposición final de los desechos. En esa situación Alejandro Vallejo Arias y Juan Camilo Gómez Cardona encontraron una oportunidad de negocio.

Ésta consiste en utilizar en las propias construcciones los desechos que quedan tras una demolición o los que se generan en cualquier obra de ingeniería. Este reciclaje reduce hasta en un 50% los costos con relación a los materiales vírgenes. El proyecto forma parte de un concepto mucho más amplio denominado Logística Reversa, que pretende establecer un negocio que además de ser rentable es amigable con el medio ambiente.

Con esta premisa, este par de ingenieros industriales de la Universidad Nacional y jóvenes emprendedores hoy se desempeñan como gerente general y gerente de operaciones respectivamente, de la firma Improve Logística Reversa, que de acuerdo con sus propias palabras es la primera compañía colombiana especializada en brindar soluciones para el retorno adecuado y disposición final de todos los productos, material de empaques, desechos y productos posconsumo generados en cualquier etapa de la cadena de valor.

En términos más sencillos, de lo que se encarga Improve es de gestionar el retorno de mercancías, como llantas y baterías de carro, envases de cerveza y otros cientos de productos que forman parte de la cadena de suministro de la manera más efectiva y económica posible.

En el caso de RC&D se empezó a estructurar hace nueve meses y, de acuerdo con Alejandro Vallejo, la idea nació a partir de identificar los problemas socioambientales que genera la disposición inadecuada de los escombros en las principales ciudades del país. Vieron que allí se puede aplicar la Logística Reversa y estructuraron un modelo de negocio que consiste en diseñar un sistema logístico que permita recoger los escombros y generarles valor, para reutilizarlos en los procesos de construcción.

En este caso en particular, lo que hicieron fue tomar los escombros y residuos, procesarlos y obtener como resultado lo que se denomina agregado.

Según el gerente de operaciones de Improve, Juan Camilo Gómez, este material tiene diversos usos. “Una vez triturados y clasificados los escombros son seleccionados por tamaños y vendidos o reutilizados, por ejemplo, como subbase de carreteras, grava en nuevos proyectos constructivos, así como empleado como agregado de nuevos concretos y hormigones”.

Esto ahorra costos, espacio en vertederos, reduce la necesidad del reciclaje de escombros mediante su transformación en áridos, ahorra espacio en los rellenos sanitarios, disminuye la explotación de grava procedente de la minería y contribuye a disminuir la contaminación provocada por los desechos de las demoliciones.

Pero más allá de la labor de estos emprendedores, en la ejecución de su proyecto ha desempeñado un papel importante la


Universidad Nacional, sede Manizales. Como egresados de la institución han tenido la oportunidad de usar sus laboratorios de ingeniería para realizar pruebas de materiales, suelos, pavimentos, concretos y resistencia.

Ante lo novedoso de su sistema en el país, pues en Europa se usa hace algunos años, han recibido reconocimientos de la Andi y en las próximas semanas los directivos de Improve se reunirán con sus homólogos de importantes empresas del sector de la construcción en Colombia.

Alejandro Vallejo y Juan Camilo Gómez están convencidos de que la reivindicación de los escombros ofrece un mundo de posibilidades.

La Andi reconoció valor innovador de Improve

Desde hace cuatro años, en su asamblea general, la Asociación Nacional de Industriales (Andi) reconoce el trabajo de los emprendedores de Colombia.

Bajo el programa Andi del Futuro, el gremio elige los planes empresariales más destacados de los jóvenes del país. Durante los dos últimos años la compañía caldense Improve Logística Reversa ha logrado llegar a la final de este concurso, gracias a lo novedoso de sus ideas.

En la edición de este año, la Andi seleccionó a seis empresas por sus proyectos innovadores. En el fallo final la Andi señaló: “Residuos de Construcción y Demolición es una empresa creada por jóvenes de Andi del Futuro, con una novedosa y creativa propuesta, según lo considera el jurado del Premio Andi a la Creación de Empresa, y una prometedora empresa. El jurado felicita a RC&D por su empeño en entregar al país ideas como esta”.

Al final el ganador del concurso de la Andi fue Minepro, que se dedica a la innovación tecnológica, fabricación y comercialización de productos de protección contra ambientes agresivos.

Los pormenores de la logística reversa o inversa

Hasta hace pocos años no se oía hablar de logística reversa o inversa, pero el término ha venido ganando espacio en el último tiempo.

De acuerdo con el experto argentino en canales de distribución, Juan Carlos Tagtachian, este concepto consiste en la recuperación sistemática de los productos o sus envases para evitar su disposición final —muchas veces contaminante— o para reutilizarlos, agregando valor a la cadena productiva.

El gaucho pone como ejemplo el plástico que se utiliza para producir envases livianos, con alta resistencia a impactos, tienen cierre hermético, no alteran las propiedades del contenido y no son tóxicos. Su ductilidad les da múltiples aplicaciones como envases: gaseosas, aceites, aguas, cosméticos, bandejas, etc., pero el proceso se puede llevar a otros sectores como la construcción o los desechos médicos, por ejemplo.

En la implementación de la logística reversa juegan un rol fundamental tres aspectos: los beneficios económicos, porque disminuyen el costo de materias primas; el marco legal y la conciencia social.

Por Ricardo Gutiérrez Zapata

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