Televisores en espera de señal

En época de fin de año las ventas de televisores registran buen movimiento. En hipermercados y almacenes las ofertas son atractivas. A crédito, de contado, grandes, pequeños, importados, nacionales, planos o curvos, se consiguen a precios favorables. Pese a las dificultades la gente sigue comprando. Sin embargo, el auge de las promociones y los regalos de televisores puede resultar más costoso, si se tiene en cuenta que en junio de 2010 comienzan los cambios por la emisión de las primeras señales de Televisión Digital Terrestre (TDT). Por eso los expertos aconsejan pensarlo muy bien y sugieren prudencia antes de comprar un nuevo aparato.

La TDT es una tecnología que sustituirá a la anterior conocida como analógica, que funcionó durante 55 años en el país. Un cambio en donde, entre otros beneficios, el televidente recibirá mejor calidad de imagen, sonido, movilidad y diversidad de canales.

Según la Gran Encuesta Integrada de Hogares 2009 elaborada por la Comisión Nacional de Televisión (CNTV) y el Departamento Nacional de Estadística (DANE), en Colombia el 85,3% de los hogares tienen televisor a color y se estima que hay 15 millones de televisores. Cifras que ratifican la importancia de este electrodoméstico para los colombianos.

Sin embargo, pese a los esfuerzos de la CNTV, que definió con prontitud el 25 de agosto del año pasado el europeo como el nuevo estándar de televisión digital en Colombia, aún queda mucha tela por cortar en el asunto, procesos por consolidar y varias dudas que resolver.

Una historia que avanzó en los meses siguientes a la definición del estándar. De manera conjunta se reunieron los gremios, asociaciones de consumidores, los fabricantes de televisores y cajas decodificadoras, los operadores y los proveedores de tecnología con la CNTV y el Gobierno a fin de fijar los requisitos técnicos mínimos que deben tener los televisores que salgan al mercado.

A finales de septiembre la CNTV determinó 15 condiciones obligatorias de los televisores y dos opcionales para los fabricantes de televisores y decodificadores, con el propósito de tener reglas claras y garantizar un buen producto al consumidor. Al respecto Mauricio Samudio, gerente de TDT, señaló que “la idea es tener una matriz de referencia del producto que deben cumplir todas las empresas del sector”.

A este hecho se sumó una nueva disposición de la CNTV que registro la marca TDT como una especie de sello, que deben llevar todos los televisores que se fabriquen con el nuevo estándar.

Tres semanas después de que se anunciara la carta de navegación para los empresarios, otra pata le nació al cojo. El propio director de la entidad, Juan Andrés Carreño, señaló en un debate en el Congreso que por el pago de mesadas pensionales de Inravisión que gira la Comisión “peligra la televisión pública y la financiación de la red de Televisión Digital Terrestre”.

Pese a la grave denuncia, el proceso avanzó y hace dos semanas funcionarios de la CNTV se reunieron con el superintendente de Industria y Comercio, Gustavo Valbuena Quiñones, con el propósito de complementar el sistema de control de calidad de los nuevos televisores.

A través de dos vías se busca exigirles a las empresas que cumplan con las condiciones obligatorias emanadas del organismo regulador. La primera conocida como Certificación de Primera Parte, por medio de la cual el fabricante debe solicitar un certificado a la Superintendencia de Industria y Comercio para utilizar la marca estatal TDT y constituir una póliza de cumplimiento que cubra daños del aparato.

Otra vía que se está estudiando es que, autorizada por la Superintendencia, la misma CNTV entregue la licencia a los fabricantes de televisores y decodificadores. Un asunto que se definirá antes de finalizar el año.

A este hecho se suman los reclamos que hicieron a finales de noviembre los representantes de otros modelos de televisión digital a fin de cambiar el estándar, un asunto que la Comisión descartó de inmediato.

De igual manera, algunos miembros de la industria se quejan porque aún la Unión Europea no ha abierto la oficina de acompañamiento a la implementación del estándar digital.

Entre tanto, la CNTV conoció que ya llegó a Colombia un importante stock de televisores de las marcas Sony, LG y Samsung para el nuevo estándar, aparatos que no han salido al mercado, a la espera de que se definan los procesos pendientes en curso.

Aunque la implementación del estándar va a un ritmo aceptable, hoy el precio de los nuevos televisores es un enigma. Por ahora el mercado presenta buenas oportunidades para los aparatos convencionales. El valor de los decodificadores también es una incógnita, por eso aunque muchos no se atreven a decirlo públicamente para no afectar el mercado, saben en privado que lo mejor es esperar unos meses a que la Televisión Digital Terrestre despegue definitivamente.

En época de fin de año las ventas de televisores registran buen movimiento. En hipermercados y almacenes las ofertas son atractivas. A crédito, de contado, grandes, pequeños, importados, nacionales, planos o curvos, se consiguen a precios favorables. Pese a las dificultades la gente sigue comprando. Sin embargo, el auge de las promociones y los regalos de televisores puede resultar más costoso, si se tiene en cuenta que en junio de 2010 comienzan los cambios por la emisión de las primeras señales de Televisión Digital Terrestre (TDT). Por eso los expertos aconsejan pensarlo muy bien y sugieren prudencia antes de comprar un nuevo aparato.

La TDT es una tecnología que sustituirá a la anterior conocida como analógica, que funcionó durante 55 años en el país. Un cambio en donde, entre otros beneficios, el televidente recibirá mejor calidad de imagen, sonido, movilidad y diversidad de canales.

Según la Gran Encuesta Integrada de Hogares 2009 elaborada por la Comisión Nacional de Televisión (CNTV) y el Departamento Nacional de Estadística (DANE), en Colombia el 85,3% de los hogares tienen televisor a color y se estima que hay 15 millones de televisores. Cifras que ratifican la importancia de este electrodoméstico para los colombianos.

Sin embargo, pese a los esfuerzos de la CNTV, que definió con prontitud el 25 de agosto del año pasado el europeo como el nuevo estándar de televisión digital en Colombia, aún queda mucha tela por cortar en el asunto, procesos por consolidar y varias dudas que resolver.

Una historia que avanzó en los meses siguientes a la definición del estándar. De manera conjunta se reunieron los gremios, asociaciones de consumidores, los fabricantes de televisores y cajas decodificadoras, los operadores y los proveedores de tecnología con la CNTV y el Gobierno a fin de fijar los requisitos técnicos mínimos que deben tener los televisores que salgan al mercado.

A finales de septiembre la CNTV determinó 15 condiciones obligatorias de los televisores y dos opcionales para los fabricantes de televisores y decodificadores, con el propósito de tener reglas claras y garantizar un buen producto al consumidor. Al respecto Mauricio Samudio, gerente de TDT, señaló que “la idea es tener una matriz de referencia del producto que deben cumplir todas las empresas del sector”.

A este hecho se sumó una nueva disposición de la CNTV que registro la marca TDT como una especie de sello, que deben llevar todos los televisores que se fabriquen con el nuevo estándar.

Tres semanas después de que se anunciara la carta de navegación para los empresarios, otra pata le nació al cojo. El propio director de la entidad, Juan Andrés Carreño, señaló en un debate en el Congreso que por el pago de mesadas pensionales de Inravisión que gira la Comisión “peligra la televisión pública y la financiación de la red de Televisión Digital Terrestre”.

Pese a la grave denuncia, el proceso avanzó y hace dos semanas funcionarios de la CNTV se reunieron con el superintendente de Industria y Comercio, Gustavo Valbuena Quiñones, con el propósito de complementar el sistema de control de calidad de los nuevos televisores.

A través de dos vías se busca exigirles a las empresas que cumplan con las condiciones obligatorias emanadas del organismo regulador. La primera conocida como Certificación de Primera Parte, por medio de la cual el fabricante debe solicitar un certificado a la Superintendencia de Industria y Comercio para utilizar la marca estatal TDT y constituir una póliza de cumplimiento que cubra daños del aparato.

Otra vía que se está estudiando es que, autorizada por la Superintendencia, la misma CNTV entregue la licencia a los fabricantes de televisores y decodificadores. Un asunto que se definirá antes de finalizar el año.

A este hecho se suman los reclamos que hicieron a finales de noviembre los representantes de otros modelos de televisión digital a fin de cambiar el estándar, un asunto que la Comisión descartó de inmediato.

De igual manera, algunos miembros de la industria se quejan porque aún la Unión Europea no ha abierto la oficina de acompañamiento a la implementación del estándar digital.

Entre tanto, la CNTV conoció que ya llegó a Colombia un importante stock de televisores de las marcas Sony, LG y Samsung para el nuevo estándar, aparatos que no han salido al mercado, a la espera de que se definan los procesos pendientes en curso.

Aunque la implementación del estándar va a un ritmo aceptable, hoy el precio de los nuevos televisores es un enigma. Por ahora el mercado presenta buenas oportunidades para los aparatos convencionales. El valor de los decodificadores también es una incógnita, por eso aunque muchos no se atreven a decirlo públicamente para no afectar el mercado, saben en privado que lo mejor es esperar unos meses a que la Televisión Digital Terrestre despegue definitivamente.