Alejandro Lyons, exgobernador de Córdoba, fue capturado en EE. UU. con fines de extradición
La captura la dio a conocer el ministro de Justicia, Wilson Ruiz, quien anunció que ya iniciaron los trámites para extraditar a Alejandro Lyons a Colombia, a responder por una condena que tiene vigente.
El exgobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, fue capturado en Estados Unidos. El delator inicial del escándalo del cartel de la toga, involucrado en un sinnúmero de escándalos de corrupción mientras fue mandatario, se encontraba en ese país, por lo menos, desde 2018. No obstante, alguaciles lo capturaron a solicitud de Colombia, que ya inició los trámites para asegurar su extradición, para que cumpla por una condena que tiene en firme.
(En contexto: Alejandro Lyons fue condenado a 5 años y 3 meses de cárcel)
El anuncio lo hizo el ministro de Justicia, Wilson Ruiz, quien confirmó que ya se iniciaron los trámites de solicitud de extradición para traer al corrupto exgobernador a Colombia. “El servicio de alguaciles de los Estados Unidos confirmó la captura de Alejandro Lyons en el distrito sur de Florida, en los Estados Unidos, por solicitud de Colombia, que pidió su extradición por una condena que tiene vigente por el delito de concierto para delinquir agravado”, señaló el alto funcionario.
(Lea también: La mafia de los cupos indicativos, según Alejandro Lyons)
En los años que Lyons fue gobernador de Córdoba (2012-2015) se presentó uno de los mayores desfalcos a su departamento: $89.000 millones de pesos salieron del erario. Cada peso, a través de sonados escándalos como los carteles de la hemofilia, el de falsos pacientes de SIDA, el de la odontología, entre muchos otros. Asimismo, a través de la firma de torcidos convenios de ciencia y tecnología, entre otras maniobras, logró malversar y apoderarse de millonarios recursos públicos.
En febrero de 2018, Lyons fue condenado a cinco años de prisión por preacuerdo. La Corte Suprema de Justicia le dio el aval a su negociación con la Fiscalía, pero desde entonces estaba en Estados Unidos. “Quiero pedirle disculpas a la Gobernación de Córdoba y al país en general por los delitos que cometí. Me genera vergüenza y estoy arrepentido. Quiero colaborar con la justicia y lo estoy demostrando”, dijo el exmandatario cordobés el día que recibió su sentencia.
(Lea también: Así destapó la DEA el cartel de la toga: detalles de los encuentros de Lyons, Pinilla y Moreno)
Su colaboración con la justicia incluyó, por ejemplo, su involucramiento en destapar el cartel de la toga. Acercándose en 2017 al abogado, también cordobés, Leonardo Pinilla, y a su socio, el exdirector anticorrupción de la Fiscalía, Luis Gustavo Moreno, Lyons participó de una operación encubierta para levantar el velo de lo que, se terminó descubriendo, sería una organización criminal enquistada en las más altas esferas de la justicia y dedicada a torcer procesos judiciales a cambio de sobornos.
A pesar de ser condenado en Colombia, el exgobernador había logrado quedarse en Estados Unidos por su colaboración con las agencias federales. Su rol en destapar el cartel de la toga ayudó, por ejemplo, a condenar a Pinilla y Moreno por lavado de activos. El tema era así: en grabaciones monitoreadas por la DEA, el exfiscal Moreno le pidió $100 millones a Lyons para embolatar los procesos que había en su contra en la Fiscalía y que alimentaban una imputación por 20 delitos.
Todas las conversaciones entre los tres quedaron registradas, y se destapó uno de los escándalos más graves de corrupción en la justicia colombiana: el cartel de la toga. Miembros y exmagistrados de la Corte Suprema, supuestamente, pedían millonarios sobornos para incidir en procesos de aforados (gobernadores, congresistas, entre otros). Luego Gustavo Moreno y Leonardo Pinilla comenzaron a colaborar con la justicia colombiana y sus dichos, entre otras evidencias, han dado para condenar a exfiscales, abogados y exmagistrados.
El exgobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, fue capturado en Estados Unidos. El delator inicial del escándalo del cartel de la toga, involucrado en un sinnúmero de escándalos de corrupción mientras fue mandatario, se encontraba en ese país, por lo menos, desde 2018. No obstante, alguaciles lo capturaron a solicitud de Colombia, que ya inició los trámites para asegurar su extradición, para que cumpla por una condena que tiene en firme.
(En contexto: Alejandro Lyons fue condenado a 5 años y 3 meses de cárcel)
El anuncio lo hizo el ministro de Justicia, Wilson Ruiz, quien confirmó que ya se iniciaron los trámites de solicitud de extradición para traer al corrupto exgobernador a Colombia. “El servicio de alguaciles de los Estados Unidos confirmó la captura de Alejandro Lyons en el distrito sur de Florida, en los Estados Unidos, por solicitud de Colombia, que pidió su extradición por una condena que tiene vigente por el delito de concierto para delinquir agravado”, señaló el alto funcionario.
(Lea también: La mafia de los cupos indicativos, según Alejandro Lyons)
En los años que Lyons fue gobernador de Córdoba (2012-2015) se presentó uno de los mayores desfalcos a su departamento: $89.000 millones de pesos salieron del erario. Cada peso, a través de sonados escándalos como los carteles de la hemofilia, el de falsos pacientes de SIDA, el de la odontología, entre muchos otros. Asimismo, a través de la firma de torcidos convenios de ciencia y tecnología, entre otras maniobras, logró malversar y apoderarse de millonarios recursos públicos.
En febrero de 2018, Lyons fue condenado a cinco años de prisión por preacuerdo. La Corte Suprema de Justicia le dio el aval a su negociación con la Fiscalía, pero desde entonces estaba en Estados Unidos. “Quiero pedirle disculpas a la Gobernación de Córdoba y al país en general por los delitos que cometí. Me genera vergüenza y estoy arrepentido. Quiero colaborar con la justicia y lo estoy demostrando”, dijo el exmandatario cordobés el día que recibió su sentencia.
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Su colaboración con la justicia incluyó, por ejemplo, su involucramiento en destapar el cartel de la toga. Acercándose en 2017 al abogado, también cordobés, Leonardo Pinilla, y a su socio, el exdirector anticorrupción de la Fiscalía, Luis Gustavo Moreno, Lyons participó de una operación encubierta para levantar el velo de lo que, se terminó descubriendo, sería una organización criminal enquistada en las más altas esferas de la justicia y dedicada a torcer procesos judiciales a cambio de sobornos.
A pesar de ser condenado en Colombia, el exgobernador había logrado quedarse en Estados Unidos por su colaboración con las agencias federales. Su rol en destapar el cartel de la toga ayudó, por ejemplo, a condenar a Pinilla y Moreno por lavado de activos. El tema era así: en grabaciones monitoreadas por la DEA, el exfiscal Moreno le pidió $100 millones a Lyons para embolatar los procesos que había en su contra en la Fiscalía y que alimentaban una imputación por 20 delitos.
Todas las conversaciones entre los tres quedaron registradas, y se destapó uno de los escándalos más graves de corrupción en la justicia colombiana: el cartel de la toga. Miembros y exmagistrados de la Corte Suprema, supuestamente, pedían millonarios sobornos para incidir en procesos de aforados (gobernadores, congresistas, entre otros). Luego Gustavo Moreno y Leonardo Pinilla comenzaron a colaborar con la justicia colombiana y sus dichos, entre otras evidencias, han dado para condenar a exfiscales, abogados y exmagistrados.