Así fueron identificados algunos de los integrantes de la red de explotación sexual
En días pasados fue desarticulada una red de prostitución que operaba en las ciudades de Medellín, Cartagena, Santa Marta y Bogotá. Las menores de edad recibían entre $200 mil y $400 mil por sus servicios sexuales. Ocho personas fueron capturadas en el operativo.
Redacción Judicial
El pasado 9 de diciembre la Fiscalía reveló la captura de ocho presuntos integrantes de una red de explotación sexual que al parecer operaba en las ciudades de Medellín, Cartagena, Santa Marta y Bogotá. Dentro los capturados hay seis ciudadanos israelíes, quienes ya se encuentran con Circular Roja de la Interpol, y un hombre que sería integrante de la Policía
Los detenidos fueron identificados como Mor Zohar, Eyal Shaty, Yakov Tzokduyan, Zauriberovski Itschak y Marcial Antonio Sarmiento, quien es integrante de la Policía y según indica la investigación, recibía dinero de la red de explotación sexual a cambio de información sobre los operativos que las autoridades adelantaban contra delitos sexuales. Asimismo, fueron detenidas otras dos personas identificadas como Víctor Hernando Navarro y Yulieth Lozano Ríos. Gabriel Konigsberger, uno de los ciudadanos israelíes quedó libre en las últimas horas, pues un juez consideró ilegal la captura.
(Lea: Capturan a seis ciudadanos israelíes que conformaban una red de explotación sexual)
Según señaló la Fiscalía, las menores de edad eran promocionados exclusivamente entre ciudadanos de Israel, la mayoría empresarios y hombres que terminaban su servicio militar obligatorio en ese país. Los miembros de la red delincuencial ofrecían viajes turísticos y al llegar a Colombia, los clientes recibían el servicio sexual.
Las investigaciones también pudieron determinar que el máximo jefe de la estructura criminal se identifica como Benyamin Mush y contamente registra ingresos a Colombia. Los socios aquí en Colombia fueron identificados como, Assi Ben Mush, Itay Senior y Mor Zohar.
Los testimonios obtenidos por la Fiscalía revelaron que las menores de edad recibían entre $200 mil y $400 mil por sus servicios y eran obligadas a hacer parte de un grupo en WhatsApp llamado Purim.
(Lea: Denuncian masiva llegada de trabajadoras sexuales a Guaduas, Cundinamarca)
Los operativos se realizaron en Santa Marta, Cartagena y algunas en Bogotá y tres personas fueron capturadas en flagrancia al poseer sustancias psicoactivas cuando se encontraban en el barrio La Candelaria.
El pasado 9 de diciembre la Fiscalía reveló la captura de ocho presuntos integrantes de una red de explotación sexual que al parecer operaba en las ciudades de Medellín, Cartagena, Santa Marta y Bogotá. Dentro los capturados hay seis ciudadanos israelíes, quienes ya se encuentran con Circular Roja de la Interpol, y un hombre que sería integrante de la Policía
Los detenidos fueron identificados como Mor Zohar, Eyal Shaty, Yakov Tzokduyan, Zauriberovski Itschak y Marcial Antonio Sarmiento, quien es integrante de la Policía y según indica la investigación, recibía dinero de la red de explotación sexual a cambio de información sobre los operativos que las autoridades adelantaban contra delitos sexuales. Asimismo, fueron detenidas otras dos personas identificadas como Víctor Hernando Navarro y Yulieth Lozano Ríos. Gabriel Konigsberger, uno de los ciudadanos israelíes quedó libre en las últimas horas, pues un juez consideró ilegal la captura.
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Según señaló la Fiscalía, las menores de edad eran promocionados exclusivamente entre ciudadanos de Israel, la mayoría empresarios y hombres que terminaban su servicio militar obligatorio en ese país. Los miembros de la red delincuencial ofrecían viajes turísticos y al llegar a Colombia, los clientes recibían el servicio sexual.
Las investigaciones también pudieron determinar que el máximo jefe de la estructura criminal se identifica como Benyamin Mush y contamente registra ingresos a Colombia. Los socios aquí en Colombia fueron identificados como, Assi Ben Mush, Itay Senior y Mor Zohar.
Los testimonios obtenidos por la Fiscalía revelaron que las menores de edad recibían entre $200 mil y $400 mil por sus servicios y eran obligadas a hacer parte de un grupo en WhatsApp llamado Purim.
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Los operativos se realizaron en Santa Marta, Cartagena y algunas en Bogotá y tres personas fueron capturadas en flagrancia al poseer sustancias psicoactivas cuando se encontraban en el barrio La Candelaria.