Atentado al padre de Francia Márquez, otro hecho que confirma la difícil situación en Jamundí
En las últimas semanas, el municipio se volvió el epicentro de atentados por parte de las disidencias de las FARC. El más reciente lo sufrió el padre de la vicepresidenta, quien salió ileso del hecho.
Esta semana inicia, una vez más siendo noticia el municipio de Jamundí, Valle del Cauca, a raíz de la difícil situación de orden público que vive esta zona del país desde hace varias semanas. En la tarde del pasado domingo 16 de junio, fue perpetrado un atentado contra el carro en el que se movilizaba el padre de la vicepresidenta Francia Márquez, Sigifredo Márquez Trujillo. El vehículo recibió cuatro impactos, que no causaron heridas a él ni a sus dos acompañantes.
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Esta semana inicia, una vez más siendo noticia el municipio de Jamundí, Valle del Cauca, a raíz de la difícil situación de orden público que vive esta zona del país desde hace varias semanas. En la tarde del pasado domingo 16 de junio, fue perpetrado un atentado contra el carro en el que se movilizaba el padre de la vicepresidenta Francia Márquez, Sigifredo Márquez Trujillo. El vehículo recibió cuatro impactos, que no causaron heridas a él ni a sus dos acompañantes.
De acuerdo con el Comando General de las Fuerzas Militares, helicópteros del Ejército aterrizaron en la zona rural de Jamundí, Valle del Cauca, para evacuar a Márquez hacia Cali. En ellos llegaron más uniformados de las Fuerzas Especiales, que se encargaron de apoyar operaciones contra los grupos armados ilegales que tienen presencia en la zona, entre ellos las disidencias de “Iván Mordisco”, autodenominadas como Estado Mayor Central (EMC).
La vicepresidenta solicitó a la Fiscalía comenzar las investigaciones pertinentes e instó al Ministerio de Defensa a tomar las medidas para “fortalecer la presencia de las fuerzas militares y de Policía, que contribuyan a garantizar la seguridad en el Cauca y Valle del Cauca”. La Presidencia ya anunció que las Fuerzas Armadas “seguirán en ofensiva contra todas las estructuras de esta zona que persisten en la guerra” y a estos grupos “les seguirá cayendo todo el peso de la ley”.
El presidente Gustavo Petro se pronunció por medio de redes sociales, en donde pidió iniciar las investigaciones pertinentes para dar con los responsables. “Es inaceptable que los grupos armados que operan en la zona continúen insistan en usar la violencia desproporcionada y el terror como herramientas de guerra”, señaló la Presidencia.
Cauca y Valle, bajo asedio
Desde el 17 de marzo pasado, cuando el gobierno de Gustavo Petro levantó el cese al fuego con un grupo de disidencias de las FARC que delinquen en Nariño, Cauca y Valle del Cauca, la situación de inseguridad va en aumento en esta convulsa zona de Colombia. Por ejemplo, la semana pasada, este grupo criminal perpetró dos atentados en Jamundí sin que la fuerza pública haya podido ponerle coto a la situación.
En la mañana del pasado miércoles 12 de junio se registraron dos atentados en el municipio vallecaucano de Jamundí, el cual colinda con el norte de Cauca y que, en los últimos cuatro años, se convirtió en un fortín de la columna Jaime Martínez del EMC. Se trata de una facción criminal que, dicho sea de paso, seguiría órdenes de Iván Mordisco y se le atribuyen las recientes acciones violentas que dejaron a seis personas heridas.
Esta célula ilegal también fue responsable de otros tres atentados en apenas un mes: el pasado viernes 7 de junio también fue activado un carro bomba, pero no dejó víctimas. A su vez, el 12 y el 20 de mayo se ejecutaron dos atentados en el que dos policías quedaron gravemente heridos. La consolidación de las disidencias en este municipio, ubicado a aproximadamente una hora de Cali, tiene que ver con la presencia de cultivos de uso ilícito.
La cifra más reciente que existe la dio el Ministerio de Justicia en 2022, cuando afirmó en un informe que se había consolidado un enclave productivo de hoja de coca en Jamundí, junto a los municipios caucanos de Timba y Buenos Aires, con más de 1.400 hectáreas. “Una situación que les ha servido a las disidencias (que controlan los cultivos) y a los narcotraficantes que se refugian en el Valle del Cauca. Por eso, también se ha reportado la presencia de emisarios de carteles mexicanos en el Valle”, señala una alta fuente policial.
Una reciente alerta temprana de la Defensoría del Pueblo, de febrero de 2024, explica que Jamundí también es parte de un corredor de movilidad que comunica a los municipios de Buenos Aires y Suárez (Cauca) con Buenaventura (Valle del Cauca), que también hacen parte de una zona estratégica para el narcotráfico. Ese escenario, dice el documento, facilita el tránsito “seguro” de bienes ilícitos asociados al narcotráfico, armas y de los integrantes de las disidencias de las FARC.
El atentado contra el padre de la vicepresidenta ocurre luego de que el pasado viernes llegaran 100 miembros de la Policía Y las Fuerzas Militares para reforzar la inteligencia en el norte del Cauca y el sur del Valle del Cauca, donde está ubicado el municipio de Jamundí, aun así, el orden público no ha podido ser restablecido, como lo demuestra el hecho criminal de este domingo contra Sigifredo Márquez Trujillo.
Al cierre de esta edición, las autoridades no habían dado con los responsables del atentado.
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