Capturan a quien estaría detrás del paro minero del Bajo Cauca antioqueño
Se trata de Fredy José Rivera Cochero alias Bula o Roberto, quien según las autoridades es el principal cabecilla de la subestructura Uldar Cardona Rueda del Clan del Golfo.
En el corregimiento Piamonte del municipio de Cáceres (Antioquia), las autoridades capturaron a Fredy José Rivera Cochero alias Bula o Roberto, principal cabecilla de la subestructura Uldar Cardona Rueda del Clan del Golfo. Las autoridades lo señalan de ser quien estuvo detrás de las acciones violentas que ese grupo armado cometió durante el paro minero que se realizó este año en el bajo cauca antioqueño y que desencadenó el fin del cese al fuego entre ese grupo con el Gobierno.
Lea además: Bajo Cauca Antioqueño: suspenden paro minero tras más de un mes de protestas
Este hombre, según las autoridades, tenía una trayectoria criminal de 15 años, donde inicialmente logró un reconocimiento producto de las actividades de narcotráfico, extorsiones y homicidios que realizó en 2016 para Uldar Cardona Rueda, alias Pablito, quien falleció en una operación militar para 2017.
Con el pasar de los años se consolidó, según las autoridades, como el principal cabecilla de esa subestructura, designado por alias Gonzalito para fortalecer el engranaje financiero de la estructura Roberto Vargas Gutiérrez mediante el despliegue de minería ilegal y narcotráfico, garantizando el fortalecimiento armado en los departamentos de Antioquia y Córdoba.
Lea: El Espectador le explica lo que está pasando con la discusión minera en Colombia
Además de ser el presunto responsable de estar detrás de las acciones violentas que ese grupo armado cometió durante el paro minero, las autoridades lo señalan también de ser el presunto dinamizador de las confrontaciones armadas con las disidencias de las Farc en el Bajo Cauca Antioqueño y de la intimidación y desplazamiento de líderes sociales e indígenas ubicados en esa zona del país.
El paro minero arrancó desde el 2 de marzo de este año y duró más de un mes. Estas manifestaciones, que se produjeron en rechazo a las operaciones de la Fuerza Pública contra la minería ilegal, se presentaron atentados contra el peaje del municipio de Tarazá, al cual le prendieron fuego, y rompieron los tubos de agua potable. Además, fueron quemadas dos ambulancias. El Gobierno aseguró que detrás de estos hechos está el Clan del Golfo, por lo que suspendió el cese al fuego con ese grupo armado.
Por su parte, el gremio de mineros de esa zona asegura que es una estigmatización por parte del Gobierno relacionarlos con miembros del Clan del Golfo. El Comité Por la Vida y la Formalización Minera del Bajo Cauca, dice que estos señalamientos empañan la razón de ser del liderazgo social que se ejerce en la región.
“Hacemos un llamado reiterativo al Gobierno nacional en cabeza del Presidente Gustavo Petro, para que cuanto antes se entreguen las conclusiones del proceso de caracterización y así poder lograr la tan anhelada formalización para nuestro gremio”, dice el Comité.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
En el corregimiento Piamonte del municipio de Cáceres (Antioquia), las autoridades capturaron a Fredy José Rivera Cochero alias Bula o Roberto, principal cabecilla de la subestructura Uldar Cardona Rueda del Clan del Golfo. Las autoridades lo señalan de ser quien estuvo detrás de las acciones violentas que ese grupo armado cometió durante el paro minero que se realizó este año en el bajo cauca antioqueño y que desencadenó el fin del cese al fuego entre ese grupo con el Gobierno.
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Este hombre, según las autoridades, tenía una trayectoria criminal de 15 años, donde inicialmente logró un reconocimiento producto de las actividades de narcotráfico, extorsiones y homicidios que realizó en 2016 para Uldar Cardona Rueda, alias Pablito, quien falleció en una operación militar para 2017.
Con el pasar de los años se consolidó, según las autoridades, como el principal cabecilla de esa subestructura, designado por alias Gonzalito para fortalecer el engranaje financiero de la estructura Roberto Vargas Gutiérrez mediante el despliegue de minería ilegal y narcotráfico, garantizando el fortalecimiento armado en los departamentos de Antioquia y Córdoba.
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Además de ser el presunto responsable de estar detrás de las acciones violentas que ese grupo armado cometió durante el paro minero, las autoridades lo señalan también de ser el presunto dinamizador de las confrontaciones armadas con las disidencias de las Farc en el Bajo Cauca Antioqueño y de la intimidación y desplazamiento de líderes sociales e indígenas ubicados en esa zona del país.
El paro minero arrancó desde el 2 de marzo de este año y duró más de un mes. Estas manifestaciones, que se produjeron en rechazo a las operaciones de la Fuerza Pública contra la minería ilegal, se presentaron atentados contra el peaje del municipio de Tarazá, al cual le prendieron fuego, y rompieron los tubos de agua potable. Además, fueron quemadas dos ambulancias. El Gobierno aseguró que detrás de estos hechos está el Clan del Golfo, por lo que suspendió el cese al fuego con ese grupo armado.
Por su parte, el gremio de mineros de esa zona asegura que es una estigmatización por parte del Gobierno relacionarlos con miembros del Clan del Golfo. El Comité Por la Vida y la Formalización Minera del Bajo Cauca, dice que estos señalamientos empañan la razón de ser del liderazgo social que se ejerce en la región.
“Hacemos un llamado reiterativo al Gobierno nacional en cabeza del Presidente Gustavo Petro, para que cuanto antes se entreguen las conclusiones del proceso de caracterización y así poder lograr la tan anhelada formalización para nuestro gremio”, dice el Comité.
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