Capturan al rector de la Universidad de Córdoba
Agentes del CTI capturaron a Claudio Sánchez Parra, actual rector de la universidad de Córdoba por supuestos vínculos con el ex jefe paramilitar, Salvatore Mancuso.
El Espectador
El ex jefe del Bloque Norte de las Auc, Salvatore Mancuso, dijo que los paramilitares eran los que mandaban en el claustro universitario y que su apoyo fue clave para que lograra ser elegido como rector.
Así mismo manifestó que el nombramiento de rectores en la universidad fue parte de una estrategia que ideó para infiltrar y manejar el claustro universitario, del que dijo estaba infiltrado por la guerrilla.
"No obligamos a nadie, el que aceptara era porque accedía a cumplir con los compromisos impuestos por las Auc", manifestó Mancuso, durante su última versión libre, en el marco de la Ley de Justicia y Paz.
Según Mancuso, antes de la elección de Sánchez se reunió con los miembros del Consejo Superior, entre los que se encontraban el nuevo rector y representantes de los sindicatos de la Universidad.
Sánchez, investigado por los delitos de concierto para delinquir agravado, amenazas y constreñimiento ilegal, fue capturado en la sede del Club Campestre de Montería cuando presidía una reunión del Concejo Directivo de la institución, y en el que se analizaba el paro que desde hace 15 días lleva a cabo el sindicato de trabajadores de esa universidad.
La denuncia sobre las irregularidades en la postulación de Sánchez como rector de la Universidad de Córdoba fue hecha por Iván Cepeda, en su columna La prueba es Montería, publicada por el diario El Espectador.
En su columna Cepeda exigió la renuncia de Sánchez Parra, ya que fue recomendado por Salvatore Mancuso y tiene investigaciones en su contra tanto en la Fiscalía como en la Procuraduría. Por su parte la Presidencia rechazó la publicación a la que calificó como "informaciones calumniosas" y agregó que "Iván Cepeda posa de víctima de violación de Derechos Humanos y en la práctica, es un hostigador a que se violen derechos humanos".
En su momento, Cepeda respondió a Elespectador.com. que en su columna "hay argumentos y datos que he constatado. Lo que dice Presidencia es un insulto y eso se suma a otros hechos de debate público en que el Gobierno ha tenido que retractarse. Considero que esto hace parte de una actitud del Gobierno con sus contradictores en que coloca su vida en riesgo".
El ex jefe del Bloque Norte de las Auc, Salvatore Mancuso, dijo que los paramilitares eran los que mandaban en el claustro universitario y que su apoyo fue clave para que lograra ser elegido como rector.
Así mismo manifestó que el nombramiento de rectores en la universidad fue parte de una estrategia que ideó para infiltrar y manejar el claustro universitario, del que dijo estaba infiltrado por la guerrilla.
"No obligamos a nadie, el que aceptara era porque accedía a cumplir con los compromisos impuestos por las Auc", manifestó Mancuso, durante su última versión libre, en el marco de la Ley de Justicia y Paz.
Según Mancuso, antes de la elección de Sánchez se reunió con los miembros del Consejo Superior, entre los que se encontraban el nuevo rector y representantes de los sindicatos de la Universidad.
Sánchez, investigado por los delitos de concierto para delinquir agravado, amenazas y constreñimiento ilegal, fue capturado en la sede del Club Campestre de Montería cuando presidía una reunión del Concejo Directivo de la institución, y en el que se analizaba el paro que desde hace 15 días lleva a cabo el sindicato de trabajadores de esa universidad.
La denuncia sobre las irregularidades en la postulación de Sánchez como rector de la Universidad de Córdoba fue hecha por Iván Cepeda, en su columna La prueba es Montería, publicada por el diario El Espectador.
En su columna Cepeda exigió la renuncia de Sánchez Parra, ya que fue recomendado por Salvatore Mancuso y tiene investigaciones en su contra tanto en la Fiscalía como en la Procuraduría. Por su parte la Presidencia rechazó la publicación a la que calificó como "informaciones calumniosas" y agregó que "Iván Cepeda posa de víctima de violación de Derechos Humanos y en la práctica, es un hostigador a que se violen derechos humanos".
En su momento, Cepeda respondió a Elespectador.com. que en su columna "hay argumentos y datos que he constatado. Lo que dice Presidencia es un insulto y eso se suma a otros hechos de debate público en que el Gobierno ha tenido que retractarse. Considero que esto hace parte de una actitud del Gobierno con sus contradictores en que coloca su vida en riesgo".