CEJ pide a los aspirantes al cargo de procurador renunciar a sus actuales puestos

Desde que el Consejo de Estado abrió la convocatoria para ocupar el cargo de procurador general, varios nombres empezaron a sonar como aspirantes. Ayer se cerró el plazo para aplicar a la carrera por el Ministerio Público dejando amplio panorama entre los perfiles de los candidatos. Entre el listado sobresalen los nombres de Juan Gregorio Eljach Pacheco, quien ha estado por ocho años a la cabeza de la Secretaría General del Senado y José Andrés O’meara, director de la Agencia Nacional de Contratación Pública. De acuerdo con la propuesta de la Corporación de Excelencia en la Justicia (CEJ), ambos funcionarios, por ejemplo, deberían renunciar a sus cargos actuales.

(En contexto: Estas son dos de las tres listas de aspirantes a la Procuraduría)

Esta corporación le puso el ojo al tema y sugirió que la renuncia de los aspirantes a sus actuales puestos mientras se conoce quién reemplazará a Fernando Carrillo en la Procuraduría, tiene como objetivo “realizar una veeduría activa para efectos de velar por la transparencia y objetividad en este proceso”. Además, la propuesta también buscaría generar condiciones de equidad en la selección de nuevo Procurador y que este, “pueda avanzar con absoluta igualdad frente a todos los candidatos”.

Entre las estrategias de veeduría, la CEJ presentó un cuestionario dirigido a los 25 candidatos en la contienda por la Procuraduría. De acuerdo con la corporación, el cuestionario le permitirá al Consejo de Estado y a la Corte Suprema de Justicia tener más insumos para evaluar las competencias y la trayectoria de los aspirantes. Entre las diez preguntas que formuló la CEJ, se encuentran, por ejemplo: ¿Ha sido denunciado o estado en curso en procesos penales, disciplinarios o de naturaleza fiscal? O ¿tendría algún conflicto de interés que influya indebidamente en la actuación de sus funciones y sus responsabilidades como procurador general?

(le puede interesar: El sonajero para quedarse con dos cargos esenciales: procurador y defensor del Pueblo)

Adicionalmente, los aspirantes a ocupar esta plaza deberán responder quiénes son sus cinco principales amigos. La CEJ señaló que las respuestas serán divulgadas la corporación para que sea de conocimiento público, asimismo, “en caso de existir por parte de algún aspirante la negativa a diligenciarlo, también ello será puesto de presente”. La lista la conforman algunos funcionarios que conocen la Procuraduría al derecho y al revés, como es el caso del exviceprocurador de Carrillo, Juan Carlos Cortés, siendo el único y el primero en presentar su renuncia aspirar al cargo.

Desde que el Consejo de Estado abrió la convocatoria para ocupar el cargo de procurador general, varios nombres empezaron a sonar como aspirantes. Ayer se cerró el plazo para aplicar a la carrera por el Ministerio Público dejando amplio panorama entre los perfiles de los candidatos. Entre el listado sobresalen los nombres de Juan Gregorio Eljach Pacheco, quien ha estado por ocho años a la cabeza de la Secretaría General del Senado y José Andrés O’meara, director de la Agencia Nacional de Contratación Pública. De acuerdo con la propuesta de la Corporación de Excelencia en la Justicia (CEJ), ambos funcionarios, por ejemplo, deberían renunciar a sus cargos actuales.

(En contexto: Estas son dos de las tres listas de aspirantes a la Procuraduría)

Esta corporación le puso el ojo al tema y sugirió que la renuncia de los aspirantes a sus actuales puestos mientras se conoce quién reemplazará a Fernando Carrillo en la Procuraduría, tiene como objetivo “realizar una veeduría activa para efectos de velar por la transparencia y objetividad en este proceso”. Además, la propuesta también buscaría generar condiciones de equidad en la selección de nuevo Procurador y que este, “pueda avanzar con absoluta igualdad frente a todos los candidatos”.

Entre las estrategias de veeduría, la CEJ presentó un cuestionario dirigido a los 25 candidatos en la contienda por la Procuraduría. De acuerdo con la corporación, el cuestionario le permitirá al Consejo de Estado y a la Corte Suprema de Justicia tener más insumos para evaluar las competencias y la trayectoria de los aspirantes. Entre las diez preguntas que formuló la CEJ, se encuentran, por ejemplo: ¿Ha sido denunciado o estado en curso en procesos penales, disciplinarios o de naturaleza fiscal? O ¿tendría algún conflicto de interés que influya indebidamente en la actuación de sus funciones y sus responsabilidades como procurador general?

(le puede interesar: El sonajero para quedarse con dos cargos esenciales: procurador y defensor del Pueblo)

Adicionalmente, los aspirantes a ocupar esta plaza deberán responder quiénes son sus cinco principales amigos. La CEJ señaló que las respuestas serán divulgadas la corporación para que sea de conocimiento público, asimismo, “en caso de existir por parte de algún aspirante la negativa a diligenciarlo, también ello será puesto de presente”. La lista la conforman algunos funcionarios que conocen la Procuraduría al derecho y al revés, como es el caso del exviceprocurador de Carrillo, Juan Carlos Cortés, siendo el único y el primero en presentar su renuncia aspirar al cargo.