Cero y van tres: no se ha podido acusar a Alejandro Lyons por excusas de su abogado

Ayer 7 de agosto por fin era el día en que la Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema acusaría formalmente al exgobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, por su presunta participación en el cartel de la hemofilia. Sin embargo, para la sorpresa -o mejor no- de los magistrados, el abogado del investigado, Álvaro José Lyons, presentó una nueva excusa médica, aduciendo una fuerte infección, con fiebre, diarrea y vomito.

En contexto: Edwin Besaile y Alejandro Lyons conocían la ilicitud de sus actos: Fiscalía

Se trata de la tercera vez que el abogado de Lyons presenta un impedimento médico para realizar la audiencia de acusación, lo cual tiene frenada la diligencia desde noviembre de 2020. Es decir, ya casi tres años. Con esta audiencia, a la cual el abogado de Lyons se ha negado a asistir, se llamará a juicio a el exgobernador por presuntamente participar en un cartel de desfalco de dineros públicos basado en la presentación de listados falsos de pacientes con hemofilia.

Como la Sala ya no le cree al abogado de Lyons, se requirió al profesional de la salud que lo atendió para que, mediante un escrito, explique con los mayores detalles el diagnóstico firmado con su puño y letra. Y, asimismo, las razones médicas o científicas que lo llevaron a otorgar las incapacidades que frenaron en tres oportunidades la audiencia de acusación.

Antecedentes: Así se robaron la plata del cartel de la hemofilia en Córdoba

“Una vez obtenido ello, se oficiará a Medicina Legal para que se designe un Médico Forense para que, en el menor tiempo posible, realice una valoración al profesional del derecho Álvaro José Lyons. Analizará su historial clínico para que emita concepto acerca del diagnóstico del profesional de salud que lo atendió, si la misma amerita o no incapacidad, e informe si la patología se presentó y si ameritaba incapacidad laboral y por cuanto tiempo”, señaló la Sala de la Corte Suprema.

Según el historial de la Sala, la primera vez que el abogado de Lyons presentó una incapacidad fue en noviembre de 2020, explicando que tenía una bronquitis que lo marginaba de su cargo por cinco días. Luego, en noviembre de 2021, un día antes de la audiencia, aseguró que tenía una hernia inguinal que lo incapacitaba para defender a Lyons por cinco días. Y, la última fue presentada ayer 8 de agosto, por una fuerte infección que lo tenía vomitando.

Más procesos: Aprobado principio de oportunidad de Alejandro Lyons: declarará contra los Besaile

“Esta es la tercera oportunidad en que el abogado Álvaro José Lyons solicita aplazamiento de audiencia de formulación de acusación aduciendo quebrantos de salud, lo cual implica alta preocupación para la Sala ante la coincidencia de las diversas patologías que se le presentan justo cuando se va a reanudar la audiencia de formulación de acusación”, señaló la Sala de Primera Instancia.

Los magistrados consideraron que, si bien en el derecho rige el principio de buena fe, es apenas extraño las coincidentes justificaciones médicas, aun más cuando los procedimientos pueden realizar se manera virtual y los puede presenciar un abogado suplente, que pudo haber designado el defensor de Lyons. Todo ha sido, en síntesis, una pérdida de tiempo, dado que el investigado está encarcelado en Estados Unidos y para poder coordinar las audiencias se necesitan entre cuatro y cinco meses de anticipación.

Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.

Ayer 7 de agosto por fin era el día en que la Sala de Primera Instancia de la Corte Suprema acusaría formalmente al exgobernador de Córdoba, Alejandro Lyons, por su presunta participación en el cartel de la hemofilia. Sin embargo, para la sorpresa -o mejor no- de los magistrados, el abogado del investigado, Álvaro José Lyons, presentó una nueva excusa médica, aduciendo una fuerte infección, con fiebre, diarrea y vomito.

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Se trata de la tercera vez que el abogado de Lyons presenta un impedimento médico para realizar la audiencia de acusación, lo cual tiene frenada la diligencia desde noviembre de 2020. Es decir, ya casi tres años. Con esta audiencia, a la cual el abogado de Lyons se ha negado a asistir, se llamará a juicio a el exgobernador por presuntamente participar en un cartel de desfalco de dineros públicos basado en la presentación de listados falsos de pacientes con hemofilia.

Como la Sala ya no le cree al abogado de Lyons, se requirió al profesional de la salud que lo atendió para que, mediante un escrito, explique con los mayores detalles el diagnóstico firmado con su puño y letra. Y, asimismo, las razones médicas o científicas que lo llevaron a otorgar las incapacidades que frenaron en tres oportunidades la audiencia de acusación.

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“Una vez obtenido ello, se oficiará a Medicina Legal para que se designe un Médico Forense para que, en el menor tiempo posible, realice una valoración al profesional del derecho Álvaro José Lyons. Analizará su historial clínico para que emita concepto acerca del diagnóstico del profesional de salud que lo atendió, si la misma amerita o no incapacidad, e informe si la patología se presentó y si ameritaba incapacidad laboral y por cuanto tiempo”, señaló la Sala de la Corte Suprema.

Según el historial de la Sala, la primera vez que el abogado de Lyons presentó una incapacidad fue en noviembre de 2020, explicando que tenía una bronquitis que lo marginaba de su cargo por cinco días. Luego, en noviembre de 2021, un día antes de la audiencia, aseguró que tenía una hernia inguinal que lo incapacitaba para defender a Lyons por cinco días. Y, la última fue presentada ayer 8 de agosto, por una fuerte infección que lo tenía vomitando.

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“Esta es la tercera oportunidad en que el abogado Álvaro José Lyons solicita aplazamiento de audiencia de formulación de acusación aduciendo quebrantos de salud, lo cual implica alta preocupación para la Sala ante la coincidencia de las diversas patologías que se le presentan justo cuando se va a reanudar la audiencia de formulación de acusación”, señaló la Sala de Primera Instancia.

Los magistrados consideraron que, si bien en el derecho rige el principio de buena fe, es apenas extraño las coincidentes justificaciones médicas, aun más cuando los procedimientos pueden realizar se manera virtual y los puede presenciar un abogado suplente, que pudo haber designado el defensor de Lyons. Todo ha sido, en síntesis, una pérdida de tiempo, dado que el investigado está encarcelado en Estados Unidos y para poder coordinar las audiencias se necesitan entre cuatro y cinco meses de anticipación.

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