Escucha este artículo
Audio generado con IA de Google
0:00
/
0:00
Para las autoridades judiciales no existen pruebas suficientes para inferir que el excomandante de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) Vicente Castaño Gil esté muerto. Pese a que existen muchas menciones sobre su desaparición desde el año 2008 no hay elementos que permitan establecer que en realidad fue asesinado.
Esta conclusión se desprende del fallo emitido por el juzgado 12 penal de Cali (Valle del Cauca) en contra de Castaño Gil por el crimen de Julio Enrique Galeano registrado en 2002. La víctima era un reinsertado de las milicias de las Farc.
Según la investigación el hombre fue interceptado por dos hombres del Bloque Calima de las AUC cuando se movilizaba en una motocicleta en el oeste de Cali junto a su pareja sentimental. En la acción Galeano fue baleado lo que le causó la muerte inmediata.
Por su participación en el delito de homicidio agravado en condición de determinador el exjefe paramilitar fue condenado a 30 años de prisión. Igualmente se le ordenó el pago de una multa de 2.000 salarios mínimos legales vigentes para el año 2002 e inhabilidad para ocupar cargos públicos por 15 años.
El paradero de Castaño Gil es un completo misterio. Muchas versiones se han presentado en los últimos años pero para las autoridades judiciales no existe ninguna prueba de peso que permita inferir que ha muerto por lo que las investigaciones en su contra han seguido.
Vicente Castaño Gil se desmovilizó el 3 de septiembre del 2005 junto a 1.736 de sus hombres en el municipio de Yopal (Casanare) en el marco del proceso de paz que se adelantó con el Gobierno de Álvaro Uribe Vélez.