Paro nacional: Confirman muerte de Lucas Villa, joven baleado en viaducto de Pereira

A las 11:28 de la noche de este lunes el corazón de Lucas Villa, el hombre que recibió ocho impactos de bala durante las protestas que se registraron en el viaducto de Pereira, dejó de latir. Así lo confirmó su padre Mauricio Villa quien aseguró en diálogo con Caracol Radio que no escatimara en mostrar su legado. “Quiero dar a conocer al mundo los pensamientos de Lucas, es un romántico que creía que podía cambiar el mundo con una flor. Que la palabra y su poder no podía ser superada por el poder de las armas”.

La situación médica de Villa se complicó en la tarde de este lunes, luego de que presentara muerte cerebral. Sobre el mediodía Juan Carlos Restrepo, gerente del Hospital San Jorge, lugar donde permaneció recluido en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) desde el pasado 5 de mayo, confirmó su estado de salud. “Lamentamos informar que no obstante a la atención especializada brindada durante estos días en nuestra UCI el paciente no presentó ninguna respuesta neurológica posterior a suspender la sedación y el estudio imaginológico es concordante con isquemia cerebral global. Es así, como al paciente en razón a su estado clínico, se le diagnostica muerte encefálica”.

Le puede interesar: Lucas Villa continúa en estado crítico: Hospital San Jorge de Pereira

Restrepo aseguró que después de la muerte cerebral el corazón de Villa dejaría de latir en un par de horas, y así ocurrió en la madrugada de este martes. El presidente Iván Duque, a través de su cuenta de Twitter, por su parte, lamentó el fallecimiento del estudiante de la Universidad Tecnológica de Pereira. “Acompañamos a la familia Villa con profunda tristeza tras la noticia del fallecimiento de Lucas. Repito lo que conversé con Mauricio, su padre, que sea esta la oportunidad para unirnos y manifestar nuestro rechazo a la violencia. A los responsables todo el peso de la ley”.

El jefe de Estado en diálogo con Mauricio Villa reiteró su intención de adelantar las investigaciones con el fin de determinar las causas y los responsables del deceso del hombre de 37 años de edad que era estudiante de la facultad Ciencias del Deporte y la Recreación. “Ellos están en un grupo importante como lo dijo el presidente. Él se comprometió que íbamos a llegar hasta las últimas consecuencias para encontrar a las personas que le hicieron esto a Lucas”.

Lea también: Hospital Universitario San Jorge confirma muerte cerebral de Lucas Villa

Mauricio aseguró que hasta el momento no han tenido información sobre los responsables de la muerte de su hijo, sin embargo, tiene claro que esta situación no es un “hecho fortuito”. “Usted no recibe ocho disparos de forma fortuita”, expresó y pidió celeridad en las investigaciones. Por su parte, el general Jorge Luis Vargas, director de la Policía ofreció $100 millones para dar con el paradero de los responsables del ataque, ya que según el oficial, Lucas es “símbolo de la manifestación pacífica en colombiana”. Por lo tanto, aseguró haber dado instrucciones a un equipo investigador para conocer quién está tras el asesinato del hombre.

Una misma postura se registró por parte de la Defensoría del Pueblo, en cabeza de Carlos Camargo quien no solo lamentó la muerte del joven y expresó solidaridad hacia su familia y amigos, sino también pidió celeridad en las investigaciones. “Rechazamos de manera categórica este vil ataque que no tiene justificación alguna, así como cualquier acto de violencia que atente contra la integridad de las personas, máxime cuando están ejerciendo su derecho a la protesta pacífica. Exigimos a las autoridades, @FiscaliaCol y @PoliciaColombia la mayor celeridad en las investigaciones que permitan esclarecer los hechos y dar con los responsables”.

Camargo a través de la cuenta oficial de la entidad que presiden hizo un llamado para que se tomen las medidas necesarias para poner fin a la violencia que, a su juicio, está desangrando a Colombia durante el ejercicio de las legítimas manifestaciones sociales.

Lucas Villa era deportista, profesor de yoga y psicoterapeuta. Fue uno de los heridos el pasado 5 de mayo por civiles armados que dispararon contra los manifestantes que estaban en el viaducto que conecta a la capital de Risaralda con el municipio de Dosquebradas.

A las 11:28 de la noche de este lunes el corazón de Lucas Villa, el hombre que recibió ocho impactos de bala durante las protestas que se registraron en el viaducto de Pereira, dejó de latir. Así lo confirmó su padre Mauricio Villa quien aseguró en diálogo con Caracol Radio que no escatimara en mostrar su legado. “Quiero dar a conocer al mundo los pensamientos de Lucas, es un romántico que creía que podía cambiar el mundo con una flor. Que la palabra y su poder no podía ser superada por el poder de las armas”.

La situación médica de Villa se complicó en la tarde de este lunes, luego de que presentara muerte cerebral. Sobre el mediodía Juan Carlos Restrepo, gerente del Hospital San Jorge, lugar donde permaneció recluido en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) desde el pasado 5 de mayo, confirmó su estado de salud. “Lamentamos informar que no obstante a la atención especializada brindada durante estos días en nuestra UCI el paciente no presentó ninguna respuesta neurológica posterior a suspender la sedación y el estudio imaginológico es concordante con isquemia cerebral global. Es así, como al paciente en razón a su estado clínico, se le diagnostica muerte encefálica”.

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Restrepo aseguró que después de la muerte cerebral el corazón de Villa dejaría de latir en un par de horas, y así ocurrió en la madrugada de este martes. El presidente Iván Duque, a través de su cuenta de Twitter, por su parte, lamentó el fallecimiento del estudiante de la Universidad Tecnológica de Pereira. “Acompañamos a la familia Villa con profunda tristeza tras la noticia del fallecimiento de Lucas. Repito lo que conversé con Mauricio, su padre, que sea esta la oportunidad para unirnos y manifestar nuestro rechazo a la violencia. A los responsables todo el peso de la ley”.

El jefe de Estado en diálogo con Mauricio Villa reiteró su intención de adelantar las investigaciones con el fin de determinar las causas y los responsables del deceso del hombre de 37 años de edad que era estudiante de la facultad Ciencias del Deporte y la Recreación. “Ellos están en un grupo importante como lo dijo el presidente. Él se comprometió que íbamos a llegar hasta las últimas consecuencias para encontrar a las personas que le hicieron esto a Lucas”.

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Mauricio aseguró que hasta el momento no han tenido información sobre los responsables de la muerte de su hijo, sin embargo, tiene claro que esta situación no es un “hecho fortuito”. “Usted no recibe ocho disparos de forma fortuita”, expresó y pidió celeridad en las investigaciones. Por su parte, el general Jorge Luis Vargas, director de la Policía ofreció $100 millones para dar con el paradero de los responsables del ataque, ya que según el oficial, Lucas es “símbolo de la manifestación pacífica en colombiana”. Por lo tanto, aseguró haber dado instrucciones a un equipo investigador para conocer quién está tras el asesinato del hombre.

Una misma postura se registró por parte de la Defensoría del Pueblo, en cabeza de Carlos Camargo quien no solo lamentó la muerte del joven y expresó solidaridad hacia su familia y amigos, sino también pidió celeridad en las investigaciones. “Rechazamos de manera categórica este vil ataque que no tiene justificación alguna, así como cualquier acto de violencia que atente contra la integridad de las personas, máxime cuando están ejerciendo su derecho a la protesta pacífica. Exigimos a las autoridades, @FiscaliaCol y @PoliciaColombia la mayor celeridad en las investigaciones que permitan esclarecer los hechos y dar con los responsables”.

Camargo a través de la cuenta oficial de la entidad que presiden hizo un llamado para que se tomen las medidas necesarias para poner fin a la violencia que, a su juicio, está desangrando a Colombia durante el ejercicio de las legítimas manifestaciones sociales.

Lucas Villa era deportista, profesor de yoga y psicoterapeuta. Fue uno de los heridos el pasado 5 de mayo por civiles armados que dispararon contra los manifestantes que estaban en el viaducto que conecta a la capital de Risaralda con el municipio de Dosquebradas.