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La Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia confirmó la condena contra uno de los alfiles más importantes del gobierno de Álvaro Uribe Vélez en su primer mandato: el exdirector del Departamento Administrativo de la Presidencia (Dapre) Bernardo Moreno Villegas. El Espectador conoció el documento completo con el que el alto tribunal, en segunda instancia, encontró culpable al alfil del uribismo por tráfico de influencias en servidor público, en medio del escándalo conocido como la Yidispolítica, que permitió la reelección del hoy imputado expresidente.
De acuerdo con los documentos conocidos por este diario, el ponente del caso era el propio presidente de la Corte Suprema, el magistrado Gerson Chaverra. En su decisión, la Sala Penal revisó la decisión tomada por la Sala Especial de Primera Instancia del mismo alto tribunal, la cual en octubre de 2023 había condenado a Moreno Villegas a cinco años y medio de cárcel, a pagar una multa y no podrá ejercer cargos públicos durante 82 meses.
La defensa del exdirector del Dapre buscaba tumbar el caso y señaló que el expediente contra su cliente se había adelantado con errores. Por ejemplo, dijo que no se le debió condenar por el delito de tráfico de influencias, sino por el de cohecho por dar u ofrecer. Sin embargo, la Sala Penal le dio un espaldarazo a la Sala de Primera Instancia y reiteró que al alfil del uribismo no se le juzgaría igual que al exministro del Interior Sabas Pretelt de la Vega, condenado en abril de 2015 a 80 meses de prisión, multa de 167 salarios mínimos legales mensuales vigentes y 112 meses de inhabilidad para el ejercicio de funciones públicas.
Lo que ya había encontrado la Corte en contra del exsecretario del Dapre del gobierno de Álvaro Uribe fue que se valió de su cargo para nombrar a personas cercanas a la entonces senadora Yidis Medina en cargos regionales de entidades públicas: desde Acción Social hasta notarías. Para la Corte, todo se trató de un “pacto ilegal” para conseguir el voto de Medina para que la reelección fuera una realidad en el país. De acuerdo con el alto tribunal, el exdirector del Departamento Administrativo de la Presidencia se aprovechó de su alto cargo, pese a que “sabía que una vinculación al Estado no podía convertirse en un medio para cumplir compromisos ilícitos”.
“Es evidente que la gestión de Moreno Villegas constituye la culminación del objetivo del entonces gobierno nacional para cumplir las promesas hechas a Medina Padilla, con motivo del apoyo que dio al proyecto de reelección presidencial inmediata, pues como integrante de la administración se beneficiaba con un segundo periodo presidencial como en efecto ocurrió”, rezaba en la sentencia de Primera Instancia en contra de Moreno, quien no es el único alto funcionario en ser condenado por el escándalo de la Yidispolítica.
El escándalo también dejó a varios exfuncionarios de la administración del expresidente Uribe Vélez rindiendo cuentas ante la justicia. Tal es el caso del exministro de Protección Social, Diego Palacio Betancourt, a quien Medina acusó de participar en el entramado, pues, aseguró, le habría ofrecido prebendas a cambio de su voto en pro de la reelección. De hecho, Medina fue más allá y señaló que Palacios le habría entregado participación en varias instituciones en Barrancabermeja. El exministro, al igual que su par Pretelt de la Vega, fue condenado a 80 meses de prisión, multa de 167 salarios mínimos legales mensuales vigentes y 112 meses de inhabilidad para el ejercicio de funciones públicas.
Entre otros nombres mencionados por la política apareció el del exsecretario general del Palacio de Nariño Alberto Velásquez Echeverri, a quien Medina acusó de haberle ofrecido un consulado. Fue condenado por el delito de cohecho, pues la justicia logró probar que varios nombramientos adelantados por Velásquez Echeverri al interior de la Red de Solidaridad Social, correspondían a ofrecimientos previamente adelantados en favor de la exsenadora Medina.
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