Criminales venden a San Andrés como ruta VIP hacia el sueño americano y así funciona

La procuradora Margarita Cabello presentó un informe preventivo sobre la situación de derechos humanos de la población migrante que atraviesa San Andrés. Se trata de una investigación en terreno durante 2023, la cual da cuenta de cómo la isla está siendo utilizada por traficantes de personas para venderles la idea de una ruta VIP con destino a Estados Unidos, con la cual pueden evitarse la pesadilla de cruzar por el Tapón del Darién. No obstante, la ruta es más costosa y presenta riesgos tan graves como en la selva.

Reportaje: San Andrés: eslabón en una cadena de tráfico de migrantes y crimen transnacional

Entre los puntos clave señalados por la Procuraduría está la ausencia institucional del Estado en San Andrés, donde apenas hay tres funcionarios de Migración Colombia para atender la llegada de, al menos, 80.000 personas por año al Archipiélago. De hecho, todo el peso de la problemática recae en la Armada Nacional, en cuyas interdicciones y rescates se basan las estadísticas con las que el Ministerio Público emite su tercera alerta con respecto a la situación. En 2022, por ejemplo, se identificaron seis naufragios y 59 personas desaparecidas, quienes tomaron botes desde la isla con destino a Nicaragua.

Según la Procuraduría, San Andrés ha sido una ruta predilecta de miles de personas a quienes se les engaña con una ruta más rápida y segura con destino a Centroamérica, y de ahí al “sueño americano”. Tal es la cantidad de personas que aprovechan la falta de control en la isla, que en los últimos dos años se han rescatado a 895 personas en altamar. ¿Cuántos han cruzado? Es un dato que ninguna institución tiene consolidado. Lo cierto es que decenas de personas, cada semana, llegan al archipiélago nacional, donde criminales los embarcan con destino a Nicaragua por un costo que oscila entre los US$ 1.500 dólares y US$ 5.000 dólares.

Antecedentes: Así funciona el tráfico de migrantes en San Andrés, ruta “VIP” del sueño americano

Sin embargo, tal como lo contó El Espectador en mayo pasado, nadie les asegura a los migrantes que lleguen con vida a Nicaragua. Las embarcaciones, en su mayoría, son botes pesqueros de un solo motor que deben soportar a decenas de viajantes. Como lo identificó la Procuraduría, no tienen radares y, ni siquiera, chalecos salvavidas en algunos casos. Una vez estando en altamar, hay una fuerte posibilidad de que piratas los intercepten y les roben el dinero con el que pensaban financiar el resto de viaje hacia Estados Unidos. Pueden llegar a estar 15 horas de seguido en el mar, con la incertidumbre de pasar.

“Al igual que otras zonas del país donde se presenta migración en tránsito, se identificó ausencia del liderazgo institucional sobre la materia y falta de articulación en sus niveles nacional, departamental y municipal. Se alerta sobre la existencia de grupos armados ilegales y la posible configuración de delitos como trata y tráfico de personas. Riesgos contra niños, niñas y adolescentes; mujeres gestantes; adultos mayores migrantes”, señaló la Procuraduría. Asimismo, cuenta con información de que la ruta VIP es utilizada por migrantes de al menos 12 países, incluido Colombia.

Este es el mapa de los migrantes que llegan a San Andrés desde otros países y continentes:

Según el procurador delegado para los Derechos Humanos, Javier Sarmiento, quien está liderando la investigación, los migrantes de los países más alejados llegan a Bogotá, Cali, Cartagena o Medellín, desde donde son transportados a San Andrés. Asimismo, quienes provienen de países cercanos, en su mayoría los migrantes de Venezuela, incluso se contactan con empresas legalmente constituidas, las cuales tienen la fachadas de organizaciones de turismo y que ofrecen el plan completo hasta Estados Unidos. Como lo conto este diario, hasta diciembre de 2022, en Colombia estaba activa en la Cámara de Comercio de La Guajira una empresa con estas características: Venetours Uniendo Familias SAS.

Lea: Una crisis aérea y ahora una migratoria. Es muy verraco: gobernador de San Andrés

De otro lado, con información consolidada por la Armada Nacional, la Procuraduría dio a conocer las rutas identificadas por los migrantes que utilizan la ruta de San Andrés. Una vez llegan a Nicaragua, empatan en tierra con quienes pasaron días y hasta semanas cruzando el infierno de El Darién.

“Hay una responsabilidad del sector privado. Las aerolíneas estarían omitiendo indagar a los viajeros sobre el tiquete de regreso. En algunos hoteles y sitios de posada presentes en San Andes no están reportando la información necesaria de extranjeros hospedados”, señaló la procuradora Margarita Cabello. Asimismo, requirió una “intervención urgente en la isla” para responder a la situación migratoria, en presencia del gobernador del archipiélago, Everth Julio Hawkins. Asimismo, la entidad entregó 30 recomendaciones a 13 entidades, entre ellas Migración Colombia.

Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.

La procuradora Margarita Cabello presentó un informe preventivo sobre la situación de derechos humanos de la población migrante que atraviesa San Andrés. Se trata de una investigación en terreno durante 2023, la cual da cuenta de cómo la isla está siendo utilizada por traficantes de personas para venderles la idea de una ruta VIP con destino a Estados Unidos, con la cual pueden evitarse la pesadilla de cruzar por el Tapón del Darién. No obstante, la ruta es más costosa y presenta riesgos tan graves como en la selva.

Reportaje: San Andrés: eslabón en una cadena de tráfico de migrantes y crimen transnacional

Entre los puntos clave señalados por la Procuraduría está la ausencia institucional del Estado en San Andrés, donde apenas hay tres funcionarios de Migración Colombia para atender la llegada de, al menos, 80.000 personas por año al Archipiélago. De hecho, todo el peso de la problemática recae en la Armada Nacional, en cuyas interdicciones y rescates se basan las estadísticas con las que el Ministerio Público emite su tercera alerta con respecto a la situación. En 2022, por ejemplo, se identificaron seis naufragios y 59 personas desaparecidas, quienes tomaron botes desde la isla con destino a Nicaragua.

Según la Procuraduría, San Andrés ha sido una ruta predilecta de miles de personas a quienes se les engaña con una ruta más rápida y segura con destino a Centroamérica, y de ahí al “sueño americano”. Tal es la cantidad de personas que aprovechan la falta de control en la isla, que en los últimos dos años se han rescatado a 895 personas en altamar. ¿Cuántos han cruzado? Es un dato que ninguna institución tiene consolidado. Lo cierto es que decenas de personas, cada semana, llegan al archipiélago nacional, donde criminales los embarcan con destino a Nicaragua por un costo que oscila entre los US$ 1.500 dólares y US$ 5.000 dólares.

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Sin embargo, tal como lo contó El Espectador en mayo pasado, nadie les asegura a los migrantes que lleguen con vida a Nicaragua. Las embarcaciones, en su mayoría, son botes pesqueros de un solo motor que deben soportar a decenas de viajantes. Como lo identificó la Procuraduría, no tienen radares y, ni siquiera, chalecos salvavidas en algunos casos. Una vez estando en altamar, hay una fuerte posibilidad de que piratas los intercepten y les roben el dinero con el que pensaban financiar el resto de viaje hacia Estados Unidos. Pueden llegar a estar 15 horas de seguido en el mar, con la incertidumbre de pasar.

“Al igual que otras zonas del país donde se presenta migración en tránsito, se identificó ausencia del liderazgo institucional sobre la materia y falta de articulación en sus niveles nacional, departamental y municipal. Se alerta sobre la existencia de grupos armados ilegales y la posible configuración de delitos como trata y tráfico de personas. Riesgos contra niños, niñas y adolescentes; mujeres gestantes; adultos mayores migrantes”, señaló la Procuraduría. Asimismo, cuenta con información de que la ruta VIP es utilizada por migrantes de al menos 12 países, incluido Colombia.

Este es el mapa de los migrantes que llegan a San Andrés desde otros países y continentes:

Según el procurador delegado para los Derechos Humanos, Javier Sarmiento, quien está liderando la investigación, los migrantes de los países más alejados llegan a Bogotá, Cali, Cartagena o Medellín, desde donde son transportados a San Andrés. Asimismo, quienes provienen de países cercanos, en su mayoría los migrantes de Venezuela, incluso se contactan con empresas legalmente constituidas, las cuales tienen la fachadas de organizaciones de turismo y que ofrecen el plan completo hasta Estados Unidos. Como lo conto este diario, hasta diciembre de 2022, en Colombia estaba activa en la Cámara de Comercio de La Guajira una empresa con estas características: Venetours Uniendo Familias SAS.

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De otro lado, con información consolidada por la Armada Nacional, la Procuraduría dio a conocer las rutas identificadas por los migrantes que utilizan la ruta de San Andrés. Una vez llegan a Nicaragua, empatan en tierra con quienes pasaron días y hasta semanas cruzando el infierno de El Darién.

“Hay una responsabilidad del sector privado. Las aerolíneas estarían omitiendo indagar a los viajeros sobre el tiquete de regreso. En algunos hoteles y sitios de posada presentes en San Andes no están reportando la información necesaria de extranjeros hospedados”, señaló la procuradora Margarita Cabello. Asimismo, requirió una “intervención urgente en la isla” para responder a la situación migratoria, en presencia del gobernador del archipiélago, Everth Julio Hawkins. Asimismo, la entidad entregó 30 recomendaciones a 13 entidades, entre ellas Migración Colombia.

Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.