De nuevo, la Dijín impide que Otoniel hable ante la JEP
Fue suspendida una audiencia en la cual Otoniel iba a declarar en el macrocaso sobre violencia en Urabá. Desde inicio de 2022, instituciones resultantes del Acuerdo de Paz y la defensa judicial del capturado, denuncian tropiezos con la Policía para conocer la verdad del líder del Clan del Golfo.
Vuelve y juega. De nuevo es interrumpida una declaración de Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). El líder del Clan del Golfo, quien sigue detenido en Bogotá mientras se resuelve su pedido de extradición, iba a declarar otra vez en el marco del macrocaso 04, sobre la situación de violencia en el Urabá. Sin embargo, uniformados de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (Dijín), de la Policía, quisieron estar presentes en la Sala de Reconocimineto de Verdad, lo cual significa un nuevo revés en los pedidos de la JEP a los efectivos de custodia del extraditable.
Antecedentes: Defensa de “Otoniel” denuncia que Policía habría trabado audiencia de verdad
Durante marzo, la JEP ha sido estricta en pedirle a la Policía que permita a Otoniel dar su testimonio de manera libre, pues incluso lo han tenido esposado y bajo una presunta vigilancia excesiva, como lo denuncia su propia defensa judicial. Esta vez, uniformados de la Policía hicieron caso omiso a un pedido de la Jurisdicción, la cual solicitó estrictamente que Otoniel hable sobre lo que sabe sin ningún tipo de constreñimiento. Ante la omisión, la Sala de Reconocimiento decidió suspender la diligencia.
Úsuga fue capturado el 23 de octubre de 2021 en la vereda Pítica de Turbo, en el Urabá antioqueño. Dos meses después, precisamente en el macrocaso 04 declaró por primera vez ante las autoridades judiciales nacionales. Lo primero que dijo en la JEP fue que nunca lo capturó la Policía. Al contrario, señaló que él mismo se entregó y que se presentó ante los uniformados desarmado. Ahí empezaron los primeros choques de discurso con la Policía, la cual emitió un comunicado público explicando que sí fue aprehendido en una megaoperación.
Entre otras cosas, Otoniel ha señalado que busca negociar la paz con el Estado y ha insistido en que la JEP podría frenar su extradición, si se prueba que fue aliado de las Farc durante su militancia como guerrillero en el Urabá. Este año, la Comisión de la Verdad adelantó distintas audiencias con Otoniel en su lugar de reclusión, en las instalaciones de la Dijín en Bogotá. Sin embargo, la defensa del declarante denunció que la Policía no solo trabó una audiencia el pasado 17 de febrero, sino que las condiciones para hablar serían difíciles.
Lea también: Piden a la Dijín respetar la confidencialidad para que “Otoniel” rinda testimonios
“La oficina de prensa del equipo de defensa jurídico del señor Dairo Antonio Úsuga David, alias ‘Otoniel’, denuncia que el día de hoy, 17 de febrero de 2021, la audiencia realizada por la Comisión de la Verdad y nuestro defendido, en la sede de la Dijín, fue abruptamente interrumpida por miembros de la fuerza pública, obligando al Comisionado Alejandro Valencia Villa, al Investigador de la Comisión y a un abogado de la defensa a retirarse de la celda donde ocurría la audiencia”, explicaron en un comunicado.
La situación llevó a que representantes de la JEP, la Comisión de la Verdad y la Unidad de Búsqueda, todas resultantes del Acuerdo de Paz, enviaran una carta al general Murillo. Según el documento, no se pretende que se reduzcan las medidas de seguridad, pero sí “que dichas medidas pueden aplicarse, sin afectar la confidencialidad y privacidad del recaudo de verdad a cargo de las entidades del sistema”. La Policía Nacional, por su parte, ha respondido que existe un presunto plan de fuga de Otoniel, y que deben estar con la máxima alerta para garantizar su presencia ante la justicia.
Lea también: JEP pide explicaciones sobre presencia de policías en audiencia de alias “Otoniel”
Por otro lado, el pasado 10 de marzo el magistrado Óscar Parra, relator del macrocaso de ejecuciones extrajudiciales, suspendió una audiencia en la cual Otoniel estaba declarando. De acuerdo con el togado, los policías que custodiaban al líder del Clan del Golfo se negaron a salir de la sala. La JEP, entonces, le dio 48 horas a la Dijín para que le explique la presencia de los uniformados, ya que estarían violando sus derechos a la dignidad, defensa, debido proceso y a la confidencialidad. Según fuentes cercanas al proceso, en la sala había cuatro custodios armados, tres oficiales, dos mayores y un teniente coronel.
La gravedad del asunto no pasó desapercibida en la JEP y abogados y víctimas que están acreditados en el caso 03, sobre falsos positivos. “¿Cómo va un testigo a hablar de uniformados relacionados con ejecuciones extrajudiciales si en la sala hay miembros de la Fuerza Pública?”, expresó un abogado de víctimas. La Dijín presentó un recurso para responder a la JEP y sigue sosteniendo su teoría sobre una posible fuga de Otoniel. De hecho, el mismo presidente Iván Duque ha alertado por un presunto plan de escape, teoría que la defensa del líder del Clan del Golfo niega constantemente.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
Vuelve y juega. De nuevo es interrumpida una declaración de Dairo Antonio Úsuga, alias Otoniel, ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP). El líder del Clan del Golfo, quien sigue detenido en Bogotá mientras se resuelve su pedido de extradición, iba a declarar otra vez en el marco del macrocaso 04, sobre la situación de violencia en el Urabá. Sin embargo, uniformados de la Dirección de Investigación Criminal e Interpol (Dijín), de la Policía, quisieron estar presentes en la Sala de Reconocimineto de Verdad, lo cual significa un nuevo revés en los pedidos de la JEP a los efectivos de custodia del extraditable.
Antecedentes: Defensa de “Otoniel” denuncia que Policía habría trabado audiencia de verdad
Durante marzo, la JEP ha sido estricta en pedirle a la Policía que permita a Otoniel dar su testimonio de manera libre, pues incluso lo han tenido esposado y bajo una presunta vigilancia excesiva, como lo denuncia su propia defensa judicial. Esta vez, uniformados de la Policía hicieron caso omiso a un pedido de la Jurisdicción, la cual solicitó estrictamente que Otoniel hable sobre lo que sabe sin ningún tipo de constreñimiento. Ante la omisión, la Sala de Reconocimiento decidió suspender la diligencia.
Úsuga fue capturado el 23 de octubre de 2021 en la vereda Pítica de Turbo, en el Urabá antioqueño. Dos meses después, precisamente en el macrocaso 04 declaró por primera vez ante las autoridades judiciales nacionales. Lo primero que dijo en la JEP fue que nunca lo capturó la Policía. Al contrario, señaló que él mismo se entregó y que se presentó ante los uniformados desarmado. Ahí empezaron los primeros choques de discurso con la Policía, la cual emitió un comunicado público explicando que sí fue aprehendido en una megaoperación.
Entre otras cosas, Otoniel ha señalado que busca negociar la paz con el Estado y ha insistido en que la JEP podría frenar su extradición, si se prueba que fue aliado de las Farc durante su militancia como guerrillero en el Urabá. Este año, la Comisión de la Verdad adelantó distintas audiencias con Otoniel en su lugar de reclusión, en las instalaciones de la Dijín en Bogotá. Sin embargo, la defensa del declarante denunció que la Policía no solo trabó una audiencia el pasado 17 de febrero, sino que las condiciones para hablar serían difíciles.
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“La oficina de prensa del equipo de defensa jurídico del señor Dairo Antonio Úsuga David, alias ‘Otoniel’, denuncia que el día de hoy, 17 de febrero de 2021, la audiencia realizada por la Comisión de la Verdad y nuestro defendido, en la sede de la Dijín, fue abruptamente interrumpida por miembros de la fuerza pública, obligando al Comisionado Alejandro Valencia Villa, al Investigador de la Comisión y a un abogado de la defensa a retirarse de la celda donde ocurría la audiencia”, explicaron en un comunicado.
La situación llevó a que representantes de la JEP, la Comisión de la Verdad y la Unidad de Búsqueda, todas resultantes del Acuerdo de Paz, enviaran una carta al general Murillo. Según el documento, no se pretende que se reduzcan las medidas de seguridad, pero sí “que dichas medidas pueden aplicarse, sin afectar la confidencialidad y privacidad del recaudo de verdad a cargo de las entidades del sistema”. La Policía Nacional, por su parte, ha respondido que existe un presunto plan de fuga de Otoniel, y que deben estar con la máxima alerta para garantizar su presencia ante la justicia.
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Por otro lado, el pasado 10 de marzo el magistrado Óscar Parra, relator del macrocaso de ejecuciones extrajudiciales, suspendió una audiencia en la cual Otoniel estaba declarando. De acuerdo con el togado, los policías que custodiaban al líder del Clan del Golfo se negaron a salir de la sala. La JEP, entonces, le dio 48 horas a la Dijín para que le explique la presencia de los uniformados, ya que estarían violando sus derechos a la dignidad, defensa, debido proceso y a la confidencialidad. Según fuentes cercanas al proceso, en la sala había cuatro custodios armados, tres oficiales, dos mayores y un teniente coronel.
La gravedad del asunto no pasó desapercibida en la JEP y abogados y víctimas que están acreditados en el caso 03, sobre falsos positivos. “¿Cómo va un testigo a hablar de uniformados relacionados con ejecuciones extrajudiciales si en la sala hay miembros de la Fuerza Pública?”, expresó un abogado de víctimas. La Dijín presentó un recurso para responder a la JEP y sigue sosteniendo su teoría sobre una posible fuga de Otoniel. De hecho, el mismo presidente Iván Duque ha alertado por un presunto plan de escape, teoría que la defensa del líder del Clan del Golfo niega constantemente.
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