Desarticulan red de narcotráfico del Eln y el Cartel de Sinaloa en La Guajira
La Dirección de Inteligencia de la Policía Nacional estima que se movían hasta tres toneladas de cocaína al mes, en lanchas rápidas, hacia islas del Caribe como República Dominicana y Puerto Rico.
La Policía desarticuló una operación de narcotráfico llevada a cabo por el Eln con apoyo del Cartel de Sinaloa para enviar cocaína desde La Guajira hasta Puerto Rico y República Dominicana. Esta operación sería una de las más importantes para la financiación de este grupo armado. En la operación, que dirigió la Dirección de Inteligencia de la Policía, fueron incautados más de $50 millones y fueron capturadas 4 personas encargadas de las finanzas y la logística de la operación.
En contexto: Así fue como las guerrillas violaron el DIH y se financiaron del narcotráfico
Esta operación se estaría llevando a cabo a través de lanchas rápidas y embarcaciones pesqueras para trasladar la cocaína a las islas caribeñas. Además de estas islas, Guatemala era un destino intermedio para estas embarcaciones a la hora de transportar alrededor de tres toneladas mensuales de cocaína. Estas embarcaciones estarían cargadas con cocaína que llegaba desde laboratorios en el Putumayo. Antes de esta operación, la Policía había incautado dos embarcaciones en las que fueron encontrados 500 kilos de cocaína.
A pesar del largo trayecto que debían recorrer desde el sur del país hasta la costa caribe, este viaje les permitía evadir a las autoridades que enfocaban sus esfuerzos en los puertos del norte del país y no en la ruta que usaba esta estructura. El representante del Eln en esta operación, y encargado de las rutas, sería alias Wilser, quien cuenta con influencia en el Caribe y, según la investigación, coordinaba las salidas de las embarcaciones a través de Bahía Honda y Bahía Hondita, ubicadas en La Guajira.
Lea aquí: La incidencia de las guerrillas en civiles, organizaciones y partidos de izquierda
El líder de esta operación, Juan Carlos López Macias, alias Sobrino, ya había sido capturado y extraditado a Estados Unidos en el 2012,y le fueron incautados 510 millones de pesos en el 2020 en una operación en Gachancipá, Cundinamarca. Sobrino tenía a su cargo a las cuatro personas que fueron capturadas en esta operación: Mauricio Mantilla Rojas, alias Flafla, y Hernando Eduardo López, alias René, encargados de las finanzas de la organización, así como Omar Enrique Romero, alias Morgan, y John Jairo Romero, alias Poli, quienes estaban al frente de la operación logística.
Además de los laboratorios en Putumayo y los puertos en La Guajira, estos narcotraficantes tendrían sus operaciones de lavado de activos en el departamento de Casanare. Desde allí, a través de la compra de bienes muebles e inmuebles, vehículos de lujo y transacciones de empresas fachada dedicadas a la producción de arroz, se blanqueaban todos los recursos que esta empresa criminal recogía de sus envíos de cocaína.
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El destino final de los envíos de esta red de narcotráfico serían Estados Unidos y Europa. Sobrino habría pasado de realizar grandes envíos desde el estado de Apuré, en Venezuela, con destino a varios países centroamericanos, a coordinar esta operación conjunta entre el Eln y el Cartel de Sinaloa. Entre el 2009 y el 2011, Sobrino coordinaba el narcotráfico y actividades ilegales de Cristóbal Galeano Murcia, conocido como El señor de los Llanos.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
La Policía desarticuló una operación de narcotráfico llevada a cabo por el Eln con apoyo del Cartel de Sinaloa para enviar cocaína desde La Guajira hasta Puerto Rico y República Dominicana. Esta operación sería una de las más importantes para la financiación de este grupo armado. En la operación, que dirigió la Dirección de Inteligencia de la Policía, fueron incautados más de $50 millones y fueron capturadas 4 personas encargadas de las finanzas y la logística de la operación.
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Esta operación se estaría llevando a cabo a través de lanchas rápidas y embarcaciones pesqueras para trasladar la cocaína a las islas caribeñas. Además de estas islas, Guatemala era un destino intermedio para estas embarcaciones a la hora de transportar alrededor de tres toneladas mensuales de cocaína. Estas embarcaciones estarían cargadas con cocaína que llegaba desde laboratorios en el Putumayo. Antes de esta operación, la Policía había incautado dos embarcaciones en las que fueron encontrados 500 kilos de cocaína.
A pesar del largo trayecto que debían recorrer desde el sur del país hasta la costa caribe, este viaje les permitía evadir a las autoridades que enfocaban sus esfuerzos en los puertos del norte del país y no en la ruta que usaba esta estructura. El representante del Eln en esta operación, y encargado de las rutas, sería alias Wilser, quien cuenta con influencia en el Caribe y, según la investigación, coordinaba las salidas de las embarcaciones a través de Bahía Honda y Bahía Hondita, ubicadas en La Guajira.
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El líder de esta operación, Juan Carlos López Macias, alias Sobrino, ya había sido capturado y extraditado a Estados Unidos en el 2012,y le fueron incautados 510 millones de pesos en el 2020 en una operación en Gachancipá, Cundinamarca. Sobrino tenía a su cargo a las cuatro personas que fueron capturadas en esta operación: Mauricio Mantilla Rojas, alias Flafla, y Hernando Eduardo López, alias René, encargados de las finanzas de la organización, así como Omar Enrique Romero, alias Morgan, y John Jairo Romero, alias Poli, quienes estaban al frente de la operación logística.
Además de los laboratorios en Putumayo y los puertos en La Guajira, estos narcotraficantes tendrían sus operaciones de lavado de activos en el departamento de Casanare. Desde allí, a través de la compra de bienes muebles e inmuebles, vehículos de lujo y transacciones de empresas fachada dedicadas a la producción de arroz, se blanqueaban todos los recursos que esta empresa criminal recogía de sus envíos de cocaína.
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El destino final de los envíos de esta red de narcotráfico serían Estados Unidos y Europa. Sobrino habría pasado de realizar grandes envíos desde el estado de Apuré, en Venezuela, con destino a varios países centroamericanos, a coordinar esta operación conjunta entre el Eln y el Cartel de Sinaloa. Entre el 2009 y el 2011, Sobrino coordinaba el narcotráfico y actividades ilegales de Cristóbal Galeano Murcia, conocido como El señor de los Llanos.
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