El Ejército nacional reportó más de 90 horas de trabajo continuo de los soldados de la Quinta Brigada para lograr mitigar los incendios forestales en Santander. Tanto por tierra como por aire han desplegado un plan para resolver la emergencia, para el cual se han necesitado más de 25.000 litros de agua, que son descargados en los puntos más complejos. Los esfuerzos están concentrados principalmente en el páramo de Berlín, en el municipio de Tona, allí las llamas han consumido varias hectáreas de frailejones y otros tipos de flora típicos de la región.
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En este punto, específicamente, más de 80 soldados del pelotón de Atención y Prevención de Desastres del Batallón Caldas y helicópteros de la Aviación del Ejército Nacional se concentran para contener la conflagración que atenta contra una zona de gran importancia ambiental y que cuenta con uno de los recursos naturales más preciados en el nororiente del país. Los frailejones son conocidos por su capacidad de captar agua del medio ambiente y permitir la regulación hídrica.
El trabajo en la zona se ha dificultado, ya que las temperaturas varían entre los 8 y los 30 grados centígrados, además de que los fuertes vientos de la temporada amenazan con expandir el fuego aún más, explicaron las autoridades. Mogotes, Floridablanca, Piedecuesta y Tona son los municipios más afectados en los últimos días por estos incendios forestales, los cuales han devastado hectáreas de fauna y flora.
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El Batallón de Movilidad y Maniobra de Aviación N.°2 en un despliegue de su plan Ayacucho está usando 2 aeronaves, un UH-60 Black Hawk y un MI-17, las cuales se encontraban en el departamento de Norte de Santander en operaciones militares. Desde este momento se encuentran planeando estrategias que permitan resarcir el daño ambiental y renovar la capa vegetal. Finalizaron afirmando que estarán en el sitio el tiempo que sea necesario.
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