Publicidad

El 'Doctor' que aterrorizó a Tumaco

Tras 11 meses de seguimientos, la Policía logró la captura de José Geidin Castro, el hombre que manejaba el negocio del narcotráfico en el puerto y tenía amenazados a los comerciantes.

Santiago Martínez Hernández
26 de febrero de 2014 - 01:37 a. m.
‘El Doctor’ es señalado de ser responsable de más de 100 homicidios en el puerto de Tumaco. / David Campuzano  - El Espectador
‘El Doctor’ es señalado de ser responsable de más de 100 homicidios en el puerto de Tumaco. / David Campuzano - El Espectador
Resume e infórmame rápido

Escucha este artículo

Audio generado con IA de Google

0:00

/

0:00

Después de 11 meses de investigación, en la que se interceptaron líneas telefónicas y se consultaron fuentes humanas, el Gaula de la Policía logró dar con el paradero de José Geidin Castro Chillambo, alias El Doctor, el mayor capo del narcotráfico en Tumaco (Nariño) y uno de los jefes de la columna Daniel Aldana de las Farc, que bajo el mando de alias Rambo y Oliver logró apropiarse del puerto a sangre y fuego. No sólo las bombas en las estaciones de Policía y las extorsiones a comerciantes lo hicieron merecedor del título del “Terror de Tumaco”, también los más de 100 homicidios que, según los investigadores, tiene sobre su espalda.

El pasado martes, mientras se cumplía el operativo para capturarlo, la gente les decía a los agentes del Gaula que ese hombre “estaba rezado”. “Como a las 11:00 p.m., cuando me encontré con El Doctor, él mismo me dijo que estaba rezado. Que durante la persecución, que duró más de siete horas, recibió un disparo en el pecho que lo tumbó, pero que no lo atravesó porque estaba rezado”, aseguró el oficial que lo persiguió durante casi un año. Un mayor y un patrullero hallaron a Castro Chillambo escondido bajo unas rocas en el corregimiento de San Pedro del Vino (Tumaco).

Los policías indicaron que al principio no lograron reconocerlo, por lo que intentaron preguntar a vecinos del sector si lo identificaban. Sin embargo, apenas se acercaban con el capturado, la gente se volteaba y les cerraba la puerta. Al parecer, por el temor a que el hombre tomara alguna represalia en su contra, ya que era de público conocimiento que El Doctor no vacilaba al asesinar a alguien si dudaba de su lealtad.

La vida criminal de El Doctor, desde que se inició en las Farc hace 10 años, siempre ha estado relacionada al narcotráfico. Comenzó como raspachín en los laboratorios y fue escalando posiciones gracias a su forma de manejar el negocio. Según los investigadores del Gaula que adelantaron la operación, Castro Chillambo nunca fue un hombre de uniforme y fusil, a pesar de que siempre estuvo vinculado a la guerrilla. Su fuerte era el tráfico de drogas, al punto que durante los últimos años llegó a manejar las rutas que salían de Tumaco hacia Centroamérica y mantenía fuertes lazos con capos del Valle.

De acuerdo con lo que le contó a El Espectador el coronel del Gaula a cargo del operativo, en las interceptaciones realizadas se escucha a El Doctor llamar a comerciantes para exigirles pagos superiores a los $20 millones porque supuestamente estaban colaborando con las autoridades. “Les decía que le tenían que pagar como $50 millones porque lo habían delatado, o si no los mataba. Los comerciantes le decían que no tenían el dinero, entonces El Doctor bajaba la suma hasta $15 millones para que accedieran. Cuando llegaban a un acuerdo, este hombre los obligaba a que le pagaran un millón de pesos mensual para que no los asesinara”, precisó el oficial.

En las grabaciones también hay evidencia de decenas de homicidios ordenados por este hombre. Los investigadores manifestaron que entre las conversaciones con sus subalternos algunas veces se hablaba de posibles “sapos” que estaban colaborando con el Gaula. Según las autoridades, muchas de las personas asesinadas jamás habían hablado con ellos, por lo que su muerte se debía al delirio de persecución que sufría El Doctor. Castro Chillambo tenía circular roja de Interpol y la recompensa por su captura era de $500 millones.

Investigadores del caso también señalaron que El Doctor, a diferencia de Rambo y Oliver, no tenía un fuerte lineamiento con las ideologías de las Farc y más bien era un criminal que tenía una marcada debilidad por las mujeres. Sin embargo, para la guerrilla era un hombre importante, ya que es señalado de haber realizado atentados contra la Fuerza Pública, como el que se hizo contra la muralla de seguridad de las instalaciones de la Cuarta Brigada de Infantería de Marina, así como de asesinar a soldados y policías y de ser el autor del secuestro de Gioconda Segovia, excandidata a la Alcaldía de Tumaco.

El oficial que lideró la operación también reveló que el pasado 23 de diciembre casi logra detener a El Doctor en el caserío de Santa Rosa (zona rural de Tumaco), desde donde dirigía su centro de operaciones. En el allanamiento a su casa, donde vivían sus familiares, entre ellos su padre, que fue capturado, hallaron propaganda de las Farc, una pistola y dos kilos de cocaína. El papá de Castro Chillambo fue llevado de inmediato ante un juez para imputarle cargos y solicitar medida de aseguramiento.

Al llegar a la audiencia, las autoridades se llevaron una gran sorpresa. El Doctor había contratado cinco abogados para que sacaran a su padre libre de los líos con la justicia. El resultado fue negativo. Según el coronel del Gaula, al finalizar la audiencia uno de los juristas se les acercó y les dijo que temía por su vida, ya que Castro Chillambo les había dicho que si no lograban que su papá quedara en libertad, él los asesinaba. Hasta el momento ninguno de estos hombres ha sido asesinado.

El Doctor parecía la antítesis de un guerrillero común y corriente. Las autoridades descubrieron su gusto por la ropa de marca, ya que sólo usaba jeans Diesel y detestaba el uniforme. Era un mito en Tumaco por sus actos de barbarie y constantes amenazas y extorsiones. Por estos hechos será procesado por los delitos de terrorismo, concierto para delinquir, extorsión y homicidio. En estos momentos, una Corte Distrital de Nueva York tramita una solicitud para su extradición y para procesarlo por delitos relacionados al narcotráfico.

 

 

smartinezh@elespectador.com

@santsmartinez

Por Santiago Martínez Hernández

Temas recomendados:

 

Sin comentarios aún. Suscribete e inicia la conversación
Este portal es propiedad de Comunican S.A. y utiliza cookies. Si continúas navegando, consideramos que aceptas su uso, de acuerdo con esta  política.
Aceptar