El frente 33 de las disidencias, principal sospechoso de doble asesinato en Tibú
El comandante de la Policía en Norte de Santander apuntó contra el grupo criminal, el cual es liderado por alias “Jhon Mechas”, hombre al que se le atribuye el atentado contra el helicóptero de la Presidencia en julio pasado en el aeropuerto de Cúcuta.
Las primeras declaraciones de la Policía sobre el doble homicidio perpetrado en Tibú el pasado viernes 8 de octubre de 2021, además de ofrecer una recompensa de 100 millones de pesos por información que esclarezca el hecho, también dio con nombre propio sobre los presuntos responsables del crimen. El comandante de la Policía en Norte de Santander, coronel Carlos Martínez, señaló a las disidencias del frente 33 de las disidencias de las Farc, comandadas por alias Jhon Mechas.
Le podría interesar: Fiscal general designó grupo especial para investigar doble homicidio en Tibú
Según el alto oficial, esta estructura se caracteriza por cometer este tipo de asesinatos selectivos en Tibú, donde hace presencia gran parte de su estructura criminal. Y no es cualquier facción del grupo criminal. Se trata de la misma que es señalada de atacar al helicóptero del presidente Iván Duque en julio pasado en el aeropuerto de Cúcuta; y de organizar el atentado con carro bomba en la brigada 30 del Ejército que explotó en junio de 2021 y que dejó a más de treinta personas heridas.
En ese momento, cuando fue baleado la aeronave presidencial, Javier Alonso Veloza García, nombre real de alias Jhon Mechas, reconoció en un video ser el autor intelectual del atentado con carro bomba contra esa brigada y del ataque contra el presidente Iván Duque en Norte de Santander. Por esto, la Policía decidió dar una recompensa de $600 millones por información que permita su captura quien, según las autoridades, tiene una alianza para el narcotráfico y otras rentas criminales con Gentil Duarte.
La historia del frente 33 de las disidencias
De acuerdo con información de la Defensoría del Pueblo, en junio de 2018, se conoció la presencia de esta facción de las disidencias a través de un comunicado del grupo criminal y en el que se deslindan del proceso de paz y el reinicio de una fase de operaciones bajo la directriz de alias Gentil Duarte y Jhon 40, para retomar el control del Catatumbo. Este último criminal, Jhon 40, es considerado como uno de los hombres que manejó durante años el narcotráfico mientras existieron las Farc.
En agosto de 2019, mediante un video, se dio a conocer un extenso comunicado que da cuenta de la alianza entre mandos altos y medios encabezados por Iván Márquez y Jesús Santrich, quienes anunciaron su retorno a las actividades del grupo armado bajo la estructura denominada Segunda Marquetalia. Con este anuncio, también nació el llamado Comando Danilo García, aliado de Iván Márquez, el cual ha buscado acercarse a la gente del frente 33 de las disidencias.
“Esta última (Frente 33), ha manifestado en sus comunicados públicos que no aceptará imposiciones sino la construcción de una propuesta conjunta que permita unificar nuevamente a las antiguas Farc”, dice una alerta temprana de finales de noviembre de 2020. “Se teme que puedan desencadenarse acciones de retaliación o ataque entre esas dos estructuras, pero además tensiones entre la disidencia del Frente 33 de las FARC con el ELN por choque de intereses”, apunta también el documento del organismo liderado por Carlos Camargo.
Y lo que preocupa además a la Defensoría es que esas acciones se perpetran cada vez más cerca del casco urbano del municipio, especialmente cuando se acude al uso de artefactos explosivos, aunque el homicidio sigue concentrándose en mayor medida en los entornos rurales, como ocurrió el pasado 8 de octubre. Hay voces que dicen que esa disputa en Tibú ya quedó saldada a favor del frente 33, sin embargo, hasta hace algunos meses se creía que había un pacto de no agresión.
“Hasta ahora el territorio se encuentra aparentemente distribuido con un acuerdo de beneficio mutuo, pero es frágil debido al interés que tiene la disidencia en fortalecer su acción, ampliar su capacidad militar y económica que le permita mantener su autonomía y posicionarse como la disidencia con mayor incidencia en la zona, frente al antagonismo que representa el Comando Danilo García que ha insinuado condicionar o limitar su accionar”, dice la Defensoría del Pueblo.
No obstante, algunos de los mandos reconocidos del antiguo Frente 33 se han visto en los pronunciamientos públicos del grupo liderado por Iván Márquez y Jesús Santrich, hechos que evidencian que hay intereses de esta segunda estructura sobre la frontera nortesantandereana y que siembran dudas de cómo es la dinámica de poder al interior de las disidencias. En cuanto a su relación con otros grupos criminales como el Eln o el Epl, el frente 33 genera espacios para continuar su crecimiento sin generar confrontación, dice la Defensoría.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.
Las primeras declaraciones de la Policía sobre el doble homicidio perpetrado en Tibú el pasado viernes 8 de octubre de 2021, además de ofrecer una recompensa de 100 millones de pesos por información que esclarezca el hecho, también dio con nombre propio sobre los presuntos responsables del crimen. El comandante de la Policía en Norte de Santander, coronel Carlos Martínez, señaló a las disidencias del frente 33 de las disidencias de las Farc, comandadas por alias Jhon Mechas.
Le podría interesar: Fiscal general designó grupo especial para investigar doble homicidio en Tibú
Según el alto oficial, esta estructura se caracteriza por cometer este tipo de asesinatos selectivos en Tibú, donde hace presencia gran parte de su estructura criminal. Y no es cualquier facción del grupo criminal. Se trata de la misma que es señalada de atacar al helicóptero del presidente Iván Duque en julio pasado en el aeropuerto de Cúcuta; y de organizar el atentado con carro bomba en la brigada 30 del Ejército que explotó en junio de 2021 y que dejó a más de treinta personas heridas.
En ese momento, cuando fue baleado la aeronave presidencial, Javier Alonso Veloza García, nombre real de alias Jhon Mechas, reconoció en un video ser el autor intelectual del atentado con carro bomba contra esa brigada y del ataque contra el presidente Iván Duque en Norte de Santander. Por esto, la Policía decidió dar una recompensa de $600 millones por información que permita su captura quien, según las autoridades, tiene una alianza para el narcotráfico y otras rentas criminales con Gentil Duarte.
La historia del frente 33 de las disidencias
De acuerdo con información de la Defensoría del Pueblo, en junio de 2018, se conoció la presencia de esta facción de las disidencias a través de un comunicado del grupo criminal y en el que se deslindan del proceso de paz y el reinicio de una fase de operaciones bajo la directriz de alias Gentil Duarte y Jhon 40, para retomar el control del Catatumbo. Este último criminal, Jhon 40, es considerado como uno de los hombres que manejó durante años el narcotráfico mientras existieron las Farc.
En agosto de 2019, mediante un video, se dio a conocer un extenso comunicado que da cuenta de la alianza entre mandos altos y medios encabezados por Iván Márquez y Jesús Santrich, quienes anunciaron su retorno a las actividades del grupo armado bajo la estructura denominada Segunda Marquetalia. Con este anuncio, también nació el llamado Comando Danilo García, aliado de Iván Márquez, el cual ha buscado acercarse a la gente del frente 33 de las disidencias.
“Esta última (Frente 33), ha manifestado en sus comunicados públicos que no aceptará imposiciones sino la construcción de una propuesta conjunta que permita unificar nuevamente a las antiguas Farc”, dice una alerta temprana de finales de noviembre de 2020. “Se teme que puedan desencadenarse acciones de retaliación o ataque entre esas dos estructuras, pero además tensiones entre la disidencia del Frente 33 de las FARC con el ELN por choque de intereses”, apunta también el documento del organismo liderado por Carlos Camargo.
Y lo que preocupa además a la Defensoría es que esas acciones se perpetran cada vez más cerca del casco urbano del municipio, especialmente cuando se acude al uso de artefactos explosivos, aunque el homicidio sigue concentrándose en mayor medida en los entornos rurales, como ocurrió el pasado 8 de octubre. Hay voces que dicen que esa disputa en Tibú ya quedó saldada a favor del frente 33, sin embargo, hasta hace algunos meses se creía que había un pacto de no agresión.
“Hasta ahora el territorio se encuentra aparentemente distribuido con un acuerdo de beneficio mutuo, pero es frágil debido al interés que tiene la disidencia en fortalecer su acción, ampliar su capacidad militar y económica que le permita mantener su autonomía y posicionarse como la disidencia con mayor incidencia en la zona, frente al antagonismo que representa el Comando Danilo García que ha insinuado condicionar o limitar su accionar”, dice la Defensoría del Pueblo.
No obstante, algunos de los mandos reconocidos del antiguo Frente 33 se han visto en los pronunciamientos públicos del grupo liderado por Iván Márquez y Jesús Santrich, hechos que evidencian que hay intereses de esta segunda estructura sobre la frontera nortesantandereana y que siembran dudas de cómo es la dinámica de poder al interior de las disidencias. En cuanto a su relación con otros grupos criminales como el Eln o el Epl, el frente 33 genera espacios para continuar su crecimiento sin generar confrontación, dice la Defensoría.
Para conocer más sobre justicia, seguridad y derechos humanos, visite la sección Judicial de El Espectador.