“El lanzamiento del libro es por Jesús María Valle”: abogada María McFarland
Tras años de investigación, el libro "Aquí no hay muertos: una historia de asesinato y negación en Colombia" se lanzará mañana. Su tema principal son los nexos entre el paramilitarismo en Colombia con el Estado a través de las historias Jesús María Valle, Iván Velásquez y Ricardo Calderón.
-Redacción Judicial
La abogada e investigadora peruana y estadounidense María McFarland trabajó seis años en Human Rights Watch como experta en el conflicto armado interno en Colombia y mañana, 27 de febrero, lanza el libro Aquí no hay muertos: una historia de asesinato y negación en Colombia, que trata sobre los nexos del paramilitarismo con el Estado. En las páginas de su trabajo, McFarland destacó el trabajo de tres colombianos que están o estuvieron relacionados con las investigaciones sobre paramilitarismo: Jesús María Valle, Iván Velásquez y Ricardo Calderón.
Desde antes de su publicación, el libro despertó revuelo a nivel nacional tras la columna de Daniel Coronell "Aquí no hay muertos" en la revista Semana, en la cual se baraja la hipótesis de que el asesinato de Valle, el 27 de febrero de 1998, habría sido por solicitud de Juan Pedro Moreno (secretario de gobierno de la Gobernación de Álvaro Uribe), debido a las investigaciones de Valle acerca de la masacre de El Aro. Además, se cita un correo electrónico que Don Berna envió a McFarland en el que asegura que Moreno era un "asiduo visitante" de los campamentos dirigidos por los hermanos Castaño Gil. El mensaje aseguraría que el expresidente Uribe habría estado involucrado en la muerte de Moreno, lo cual siempre ha circulado pero como un rumor no comprobado.
¿Cuáles son los hallazgos más importantes de la investigación?
En Colombia no se conoce, por ejemplo, el detalle de quién era Jesús María Valle. Conocer mejor ese personaje, detalles de su vida, es algo que no se ha hecho antes. También descubrí sobre la vida de Iván Velásquez, todo su pasado trabajando en la Fiscalía en Antioquia, a finales de los 90.
¿Por qué se publica inicialmente en inglés?
Yo quería alcanzar un público en Estados Unidos, pero también quiero publicarlo en castellano. Me encantaría que en Colombia se lea. Normalmente es más fácil publicarlo en español después de haberlo publicado en inglés. Publicar un libro en inglés, en Estados Unidos, es sumamente difícil. Por eso me tomó cuatro años escribir la propuesta del libro y conseguir una casa editorial que lo publicara.
(Le puede interesar: “Don Berna” negó que Uribe haya participado en el asesinato de Pedro Juan Moreno)
Usted habla en el libro sobre el accidente en el que murió Pedro Juan Moreno. ¿Quién cree que fue el responsable de sus muertes?
No sé cuál es la verdad de ese asunto. Yo creo que las acusaciones que han hecho alias Don Berna, Rito Alejo del Río y alias Don Mario son gravísimas y preocupantes. Han quedado demasiadas preguntas abiertas a lo largo de los años en torno a lo que sabía el expresidente Uribe. Es impresionante el enorme número de funcionarios cercanos a él que han sido condenados por graves delitos o por vínculos con el paramilitarismo. Uribe siempre ha proyectado ser una persona que se preocupa por saber todo lo que está pasando a su alrededor, así que es inverosímil sostener que no se dio cuenta de todo lo que estaba sucediendo. Eso no significa que haya cometido un delito, pero yo creo que sí es importante entender mejor cuál fue su postura frente a los personajes condenados o implicados en gravísimos delitos.
¿Qué pretende dejarles a los colombianos con el libro?
Yo creo que uno puede encontrar inspiración en esos personajes tan comprometidos con la justicia y la verdad, los cuales hicieron enormes sacrificios por contarla. Pueden encontrar importantes dosis de verdad acerca del paramilitarismo y sus vínculos con el Estado. Este libro no es algo que haya hecho de la noche a la mañana y espero que encuentren información que sirva para una conversación en el país sobre lo que sucedió a lo largo de las últimas décadas y por qué muchas cosas no se conocieron en su momento o no se quisieron ver.
(Lea también: Lo inconcluso del caso Moreno, quien murió tras caer el helicóptero en el que viajaba)
¿Qué diferencia hay entre los informes que publicó con Human Rights Watch en el pasado con este libro?
Uno se queda frustrado porque las historias que uno puede contar en un informe de derechos humanos son limitadas. No tienen la profundidad ni el análisis de los personajes que uno puede tener cuando cuenta toda la historia. Los informes tuvieron bastante impacto, pero más allá de eso yo creo que Colombia tiene un problema grave por el mercado ilícito de las drogas para financiar a grupos armados, a organizaciones criminales. Este es un problema que no se arregla así no más.
¿Por qué la historia de estas tres personas?
Yo conocí la historia de Iván Velásquez porque cuando cubría Colombia salió el escándalo de la parapolítica y yo lo estuve documentando. Hablando con Iván me di cuenta de que el tema era muy extenso para contar su historia, la de Jesús María Valle y la de Calderón y que se podía tejer no solamente sus historias individuales sino también la del paramilitarismo y sus vínculos con el Estado. Obviamente hay muchas otras personas en el libro que también han hecho sacrificios, pero a través de estos tres pude contar un pedazo que refleja esa realidad.
La abogada e investigadora peruana y estadounidense María McFarland trabajó seis años en Human Rights Watch como experta en el conflicto armado interno en Colombia y mañana, 27 de febrero, lanza el libro Aquí no hay muertos: una historia de asesinato y negación en Colombia, que trata sobre los nexos del paramilitarismo con el Estado. En las páginas de su trabajo, McFarland destacó el trabajo de tres colombianos que están o estuvieron relacionados con las investigaciones sobre paramilitarismo: Jesús María Valle, Iván Velásquez y Ricardo Calderón.
Desde antes de su publicación, el libro despertó revuelo a nivel nacional tras la columna de Daniel Coronell "Aquí no hay muertos" en la revista Semana, en la cual se baraja la hipótesis de que el asesinato de Valle, el 27 de febrero de 1998, habría sido por solicitud de Juan Pedro Moreno (secretario de gobierno de la Gobernación de Álvaro Uribe), debido a las investigaciones de Valle acerca de la masacre de El Aro. Además, se cita un correo electrónico que Don Berna envió a McFarland en el que asegura que Moreno era un "asiduo visitante" de los campamentos dirigidos por los hermanos Castaño Gil. El mensaje aseguraría que el expresidente Uribe habría estado involucrado en la muerte de Moreno, lo cual siempre ha circulado pero como un rumor no comprobado.
¿Cuáles son los hallazgos más importantes de la investigación?
En Colombia no se conoce, por ejemplo, el detalle de quién era Jesús María Valle. Conocer mejor ese personaje, detalles de su vida, es algo que no se ha hecho antes. También descubrí sobre la vida de Iván Velásquez, todo su pasado trabajando en la Fiscalía en Antioquia, a finales de los 90.
¿Por qué se publica inicialmente en inglés?
Yo quería alcanzar un público en Estados Unidos, pero también quiero publicarlo en castellano. Me encantaría que en Colombia se lea. Normalmente es más fácil publicarlo en español después de haberlo publicado en inglés. Publicar un libro en inglés, en Estados Unidos, es sumamente difícil. Por eso me tomó cuatro años escribir la propuesta del libro y conseguir una casa editorial que lo publicara.
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Usted habla en el libro sobre el accidente en el que murió Pedro Juan Moreno. ¿Quién cree que fue el responsable de sus muertes?
No sé cuál es la verdad de ese asunto. Yo creo que las acusaciones que han hecho alias Don Berna, Rito Alejo del Río y alias Don Mario son gravísimas y preocupantes. Han quedado demasiadas preguntas abiertas a lo largo de los años en torno a lo que sabía el expresidente Uribe. Es impresionante el enorme número de funcionarios cercanos a él que han sido condenados por graves delitos o por vínculos con el paramilitarismo. Uribe siempre ha proyectado ser una persona que se preocupa por saber todo lo que está pasando a su alrededor, así que es inverosímil sostener que no se dio cuenta de todo lo que estaba sucediendo. Eso no significa que haya cometido un delito, pero yo creo que sí es importante entender mejor cuál fue su postura frente a los personajes condenados o implicados en gravísimos delitos.
¿Qué pretende dejarles a los colombianos con el libro?
Yo creo que uno puede encontrar inspiración en esos personajes tan comprometidos con la justicia y la verdad, los cuales hicieron enormes sacrificios por contarla. Pueden encontrar importantes dosis de verdad acerca del paramilitarismo y sus vínculos con el Estado. Este libro no es algo que haya hecho de la noche a la mañana y espero que encuentren información que sirva para una conversación en el país sobre lo que sucedió a lo largo de las últimas décadas y por qué muchas cosas no se conocieron en su momento o no se quisieron ver.
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¿Qué diferencia hay entre los informes que publicó con Human Rights Watch en el pasado con este libro?
Uno se queda frustrado porque las historias que uno puede contar en un informe de derechos humanos son limitadas. No tienen la profundidad ni el análisis de los personajes que uno puede tener cuando cuenta toda la historia. Los informes tuvieron bastante impacto, pero más allá de eso yo creo que Colombia tiene un problema grave por el mercado ilícito de las drogas para financiar a grupos armados, a organizaciones criminales. Este es un problema que no se arregla así no más.
¿Por qué la historia de estas tres personas?
Yo conocí la historia de Iván Velásquez porque cuando cubría Colombia salió el escándalo de la parapolítica y yo lo estuve documentando. Hablando con Iván me di cuenta de que el tema era muy extenso para contar su historia, la de Jesús María Valle y la de Calderón y que se podía tejer no solamente sus historias individuales sino también la del paramilitarismo y sus vínculos con el Estado. Obviamente hay muchas otras personas en el libro que también han hecho sacrificios, pero a través de estos tres pude contar un pedazo que refleja esa realidad.