El poder a la sombra de “Servi”, cabeza de la Oficina que será extraditado a EE.UU.
Jhon James Pulgarín era casi intocable dentro de la estructura del grupo criminal que tiene raíces en los años 80 y fue fundada por el capo del narcotráfico Pablo Escobar. Su hermano, alias el Capi, y su primo, el narcotraficante alias Fritanga, son cercanos a Otoniel, el líder de las Agc y el hombre más buscado por las autoridades colombianas.
David Escobar Moreno
Más allá de los carros de alta gama, fincas en varias zonas del Valle de Aburrá y el pago de una alta suma de dinero para ser mencionado en un vallenato, las conexiones en el bajo mundo alias Servi, una de las cabezas del cuerpo colegiado de la Oficina, dan cuenta del poder y protección que gozó durante varios años al interior de esa estructura criminal que ha mutado desde los años ochenta, cuando Pablo Escobar la fundó. Su reciente captura puso al descubierto que lavó dineros de la Oficina, incursionó en el narcotráfico y que sus lazos familiares le permitieron codearse con Otoniel, líder del grupo de origen paramilitar el Clan del Golfo y considerado el hombre más buscado por las autoridades colombianas. (Tres décadas del poder paralelo de la Oficina de Envigado)
Gánale la carrera a la desinformación NO TE QUEDES CON LAS GANAS DE LEER ESTE ARTÍCULO
¿Ya tienes una cuenta? Inicia sesión para continuar
Más allá de los carros de alta gama, fincas en varias zonas del Valle de Aburrá y el pago de una alta suma de dinero para ser mencionado en un vallenato, las conexiones en el bajo mundo alias Servi, una de las cabezas del cuerpo colegiado de la Oficina, dan cuenta del poder y protección que gozó durante varios años al interior de esa estructura criminal que ha mutado desde los años ochenta, cuando Pablo Escobar la fundó. Su reciente captura puso al descubierto que lavó dineros de la Oficina, incursionó en el narcotráfico y que sus lazos familiares le permitieron codearse con Otoniel, líder del grupo de origen paramilitar el Clan del Golfo y considerado el hombre más buscado por las autoridades colombianas. (Tres décadas del poder paralelo de la Oficina de Envigado)
El Espectador conoció detalles de la investigación de la Dijin de la Policía sobre este “duro” del crimen organizado y que ahora es requerido por una corte de los Estados Unidos para que responda por supuestos envíos de cocaína que hizo a ese país en los últimos años. Desde que Don Berna terminó extraditado a EE.UU. con otros 13 jefes paramilitares (mayo de 2008), el poder de la Oficina de Envigado se fragmentó, generando durante los siguientes años una violenta purga al interior del grupo y un cambio en su estructura. Sin embargo, en el último tiempo existe un pacto de no agresión que les permite delinquir sin que los homicidios en Medellín y todo el Valle de Aburrá aumenten inusitadamente.
Según un investigador de la Dijin que hizo parte del seguimiento a John James Pulgarín, como realmente se llama Servi, tenía un gran respaldo y respeto en ese mundo mafioso por ser el primo de un capo del narcotráfico que está tras las rejas: Camilo Torres Martínez, alias Fritanga. También creció junto Jhon Fredy Manco Torres, alias El Indio, en la zona de Urabá antioqueño. El primero fue capturado en julio de 2012 siendo uno de los líderes de los Urabeños, hoy más conocido como Clan del Golfo o Autodefensas Gaitanistas de Colombia (autodenominación que la familia de Jorge Eliecer Gaitán rechaza). Su captura se hizo celebre porque se produjo en su matrimonio, en la isla Múcura, al que asistieron celebridades colombianas y hasta agentes gringos. (El rastro impune de la Oficina de Envigado)
Las autoridades de EE.UU. lo señalaban de ser socio para el narcotráfico de Henry de Jesús López, alias Mi Sangre, otro capo que inició su carrera criminal en la Oficina y que estuvo a cargo del Bloque Centauros de las Auc. Este hombre de confianza del jefe paramilitar Vicente Castaño está ligado al surgimiento de las Agc, ya que luego de desmovilizarse en 2005, siguió delinquiendo y junto a Daniel Rendón Herrera, alias Don Mario, se unieron al propio Fritanga y los hermanos Juan De Dios y Dairo Úsuga David, este último siendo el verdadero nombre de Otoniel. Fritanga, en 2013 terminó extraditado a EE.UU., volvió en agosto de 2019 y está preso en la cárcel de Cómbita purgando una pena de 21 años.
Alias el Indio, el otro familiar de Servi, era otro hombre de confianza de Don Mario en la conformación de los Urabeños e integró el Bloque Elmer Cárdenas de las Auc en esa zona del país, que a su vez, fue comandado por alias el Alemán, hermano de Don Mario. El Indio, condenado por el asesinato del militante de la UP Marco Osorio en 2002, vivía en Pozuelo de Alarcón (España), un exclusivo municipio cerca a Madrid en el que algunos colombianos ligados al narcotráfico llegan a vivir. Allí fue vecino de Cristiano Ronaldo. En 2015, el Indio, cercano al antiguo jefe de la Oficina alias Sebastián y al paramilitar Monoleche, viajó a Brasil a ver un partido de la Selección Colombia de fútbol y fue capturado y deportado.
Fuentes de la Dijín señalan que el hermano de Servi, alias el Capi, es otro hombre que ha permanecido fuera del foco de los medios de comunicación pero que en los últimos años le ha servido a Servi para hacer negocios con la gente de Otoniel y el propio líder de las Agc. “En estos momentos se desempeña como piloto de una avioneta que fumiga cultivos de banano en Urabá para una empresa y en los últimos años ha servido como de enlace entre su hermano con Otoniel, pero de la información que reunimos parece que ya no está en el narcotráfico. Sabemos que era cercano a alias Pueblo, primo de Otoniel y quien se perfilaba para sucederlo”, señaló la fuente policial. Dentro de las interceptaciones que le hicieron a Servi, la Dijín estableció que él y el Capi estaban organizando las empresas legales, propiedades y el dinero de Fritanga. (Los tentáculos de la Oficina para el narcotráfico en Colombia y el mundo)
Alias Pueblo murió durante un operativo de las fuerzas especiales de la Policía en agosto de 2020 mientras celebraba una fiesta en Mutatá (Antioquia) y en plena pandemia. “Se sabe que alias el Capi fue el que gestionó en 2018 una reunión entre Servi y Otoniel. Eso fue en el municipio de Turbo. Esta reunión se hizo con unos enlaces del cartel de Jalisco Nueva Generación. Lo que no sabían ellos es que había un agente infiltrado de la DEA. Servi también era un tipo muy cercano a alias Lindolfo (un joven narco asociado a modelos y cantantes e hijo de un antiguo socio de Pablo Escobar). Sin embargo, tuvieron sus diferencias por plata. Alias Inglaterra, segundo al mando de las Agc también fue muy cercano a el Capi”, aseguró una alta fuente de la Dijín.
Las autoridades señalan que Servi le compraba cocaína en el Catatumbo al Eln, grupo subversivo que tiene varios laboratorios de droga en esa subregión. La semana pasada, cuando fue capturado alias Palomo, un ciudadano venezolano que que tenía fachada de empresario pero que era el encargado de coordinar los envíos de cocaína por ese país. “Hemos encontrado que la Oficina se expande por los santanderes, más específicamente en Cúcuta y Bucaramanga, en donde han invertido en rutas y propiedades por ese sector”, puntualizó el uniformado. Con la captura de Servi, la Policía ahora pone el ojo sobre alias Colmillo, un personaje enigmático que lleva más de dos décadas junto a su madre delinquiendo en la capital con la banda criminal Caicedo.